-¿Que paso Kate? dime, dime- insistió Kris.
-Emy.. no esta muerta- dijo Kate.
-¿Que dices?- dijo Kris con una sonrisa de oreja a oreja, le había dado mucho gusto escuchar eso.
-Eso me dio a entender Andrew..- dijo Kate.
-¿Que? ¿Pero Andrew.. no se suponía que era el amigo imaginario de Emy?- Dijo Kris mirando a Kate.
-Emy nunca tubo un amigo imaginario.. O no se como explicarlo.. Pero Andrew no era parte de su imaginación, Andrew es real, solo que a Emy solamente se le permitía verlo, por sus virtudes. Yo vi a Andrew Kris..- dijo Kate mirando seria a Kris.
-No entiendo.. Ya.. Andrew solo lo puede ver Emy, y no es completamente falso. Entonces... ¿Por que lo viste tu?- Pregunto Kris confundida.
-Mira.. Andrew me explico, que cuando un Mediador .. En este caso Mediadora, estaba en peligro, sus virtudes, osea, todo lo que veía Emy el futuro, mover las cosas con la vista, ver a espíritus, observar, ect.. ect.. Todo eso, cuando ella esta en peligro, deja de tener esas virtudes, y se las traspasa a uno de sus seres queridos más cercanos, en este caso el ser querido que sea más débil, y este tiene que utilizar sus virtudes para ayudarla. Y ese ser querido, débil soy yo.- dijo Kate.
-Ya veo..-dijo Kris.
-¿Te acuerdas que Emy me dijo que viera la profecía, y que le averiguara quien muere?- Pregunto Kate.
-Si, pero no entiendo- dijo Kris, sorprendida por lo que acababa de escuchar.
-Yo tampoco lo entendía, pero ahora que tengo la virtudes de Emy, se me aclaro la mente completamente. Entonces me di cuenta de algo.
-¿De que? por favor ve directo al grano Kate- Dijo Kris un tanto nerviosa.
-Cuando me estaba peinando para ir al velorio, estaba puesto un canal en la tele, uno de películas antiguas. Entonces en el canal estaban dando una pelicula, y ahí sale Gregory Peck.- Explico Kate.
-Ya.. ¿y?- Pregunto Kris desconcertada.
-Mira la lista que apunté, el primero que muere es Gregory Peck, que sale como Robert Thorn.
-¡No entiendo!- grito Kris.
-¡Es una pregunta artificiosa! ¡Es una pregunta engañosa!- exclamó Kate- ¿Quien muere en la profecía?
-¡No entiendo Kate, no entiendo!- dijo Kris alterada.
-¡Nadie!.. Nadie muere en la profecía, me di cuenta que el mismo actor trabajaba en la otra película. Todo lo que ocurre en esa película, ocurre en todas las películas existentes, es todo ficticio.. Nada es real, todo es mentira, nada es cierto. Por eso Gregory Perck puede aparecer en otras películas, por que cuando termino la profecía el seguía vivo. Por eso nadie muere en "La profecía", como tampoco en "El exorcista", ni en "Masacre en texas. La respuesta en nadie, nadie, nadie. Respuesta: Nadie.
-¿Crees que estés en lo cierto?- pregunto Kris.
-Encaja todo correctamente Kris, pieza.. Además tengo las virtudes de Emily.
-Tienes razón.. Hablas como.. si estuviera hablando con ella- Dijo Kris y se le escapó una lagrima.
-Vamos al centro- dijo Kate.
-¿A que?- Preguntó Kris.
-Me voy a enfrentar a Guntra, me siento con fuerzas, siento que tengo todas las capacidades. Si no me dice donde esta Emy.. Me conocerá enojada.
Kris trago saliva, no conocía a Kate enojada, ya que siempre estaba alegre.
Libro de los héroes.-
15 de diciembre de 2011
1 de diciembre de 2011
Capitulo 34.-
"Así que esto es la muerte" "así que esto es el verdadero terror"- me decía a mi misma.
-¡Ayuda!- grité- ¡Elliot ayudameeeeeeee!
Empece a observar, enseguida noté que no estaba en mi casa. La puerta de abrió y reconocí a Eris, a la supuesta "mujer policía".
-¡Ayudaaaaaaaaaa! Elliot, Oliver.. Vengan por mí..- dije sintiendo la ausencia de mi pierna ortopédica al parecer me había anestesiado antes de sacármela por que no sentía ningún dolor.. Solo sentía cansancio. Estaba atada a una cama sin colchón, era solo una marquesa.
-Grita todo lo que quieras, nadie te va a oír- dijo Eris.
Estaba entre la vida y la muerte. Lo único que recordaba era cuando Eris me puso los alambres con espinas en mi cuello para ahogarme y así dormirme.. Las espinas tenían anestesia y luego había despertado en esta maldita celda.
-¿Y mi pierna?- le pregunté.
-Aquí no la vas a necesitar- Respondió- Puedes usar las muletas de Zeus para caminar.
-¿Zeus?- pregunté.
Sí- respondió apuntando a un cadáver que estaba en su habitación.
-Es una broma muy tétrica- afirmé.
-Esto no tiene nada de broma.
-No entiendo- le contesté.
-No se trata de que entiendas.
-Voy a dormir en esta fría y sucia celda?- le pregunté.
-Solo por esta noche.. Es para que refecciones, ye ayudara a pensar cuan afortunada eres.
Mire mi alrededor, no había cosa que no estuviera manchada con sangre. ¿Quien era Zeus? ¿alguna otra victima?
Eris ya me comenzaba a aterrar..
-Puedo preguntar.. ¿En donde estamos?- me atreví a preguntarle.
-Aquí la de las preguntas soy yo.
Me quede muda, ya no tenia fuerzas para hablar..
-Ya hablaras Emily, no tengo apuro, tengo mucha paciencia..
-Tienes una cómoda cama en tu casa. Piensa en ella para que te quedes dormida, piensa que tus padres están vivos y que están al lado tuyo.. Perdón padres adoptivos.
La miré boquiabierta, ¿como sabia en en mi casa tenia una cómoda cama? y también ¿Como supo que soy hija adoptiva? eso solamente lo sabia yo y mis hermanos, ni siquiera mis mejores amigas ni el resto de mi familia.
-¿Por que me haces tanto daño? ¿que te hice yo?- le pregunté.
Eris salio de la habitación, pero se detuvo en el marco de la puerta al escuchar un quejido de parte mía. No me contuve mas y le pregunte:
-¿Cuando piensas entregarles mis restos a mis hermanos? ¿cuando me asesinaras? Si lo harás.. por favor que sea luego.. A estas alturas no tengo la más mínima intención de seguí viviendo. ¿Que esperas? ¡Matame! ¡hazlo ya!.
Eris no se movió ningún centímetro, y respondió.
-Ya llegara el momento mediadora no te impacientes, todo a su tiempo..
Empece a reflexionar.. "Que cómoda cama tienes en tu casa". Era como si me conociera.. Era como si hubiera estado conmigo, ahí, ahí, ahí.
De pronto todo encajo, supe la verdad al instante, detecte un pequeño detalle que nadie se había dado cuenta, ni la policía, ni los padres de los niños.. Ni yo misma. Seguramente también tenia puesta una pequeña venda que no me permitía ver ese importante detalle.
***
Elliot y Oliver se habían adelantado al funeral, en cambio Kris quería esperar a su amiga Kate.. sentían que esto les afectaba de igual manera y que debían permanecer unidas.. Era una mañana gris de lluvia, Kris no decía nada, solo esperaba a su amiga.
-Era una buena amiga.. ¿no Kris?- le preguntó su chófer.
-La mejor..- contestó aun Kris con el animo por lo suelos- Era una persona que siempre me apoyaba en todo y sobre todo me acompañaba.. Hasta en mi más mínima locura- dijo suspirando.
-¿La extrañaras.. verdad?
Kris asistió, estaba pensando que, cuando volviera de nuevo al colegio, consiguiria que la expulsaran también del colegio Isaac Newton, para que no se sentía eran sola. De repente se empezó a reír sola, tubo recuerdos varios recuerdos en ese momento.
¿De que se rie niña Kris?
De repente Kate golpeó el vidrió del auto.
-¿Me esperas un rato por favor?- le Preguntó Kate a Kris.
-Ya pero apresúrate.
Kate fue a una calle oscura y fue ahí en donde lo vio..
-Kate por aquí- le dijo Andrew..
-¿Quien eres tu?- le preguntó Kate.
-No temas, mi nombre es Andrew, un gusto- se presentó.
-Alto.. tu eres el.. supuesto amigo que tenia Emy..- le dijo Kate algo extrañada.
-Sí, y ustedes la trataban de loca.. y muchas cosas más.. Sí..- respondió este.
-Y ahora mi pregunta es.. ¿por que ahora yo te veo?- le pregunté Kate.
-De eso vine a hablar contigo, veras.. Cuando un mediador esta en peligro, o a punto de morir, mientras tanto le traspasa sus poderes a un ser querido, el cual sea el más débil.. Y ahora este tendrás todas sus herramientas.. Ya saber, observar, mover cosas con la vista, leer la mente, presenciar en futuro ect.. ect.. Y ahora tu eres su suplente y te tengo que encomendar una misión.
-Adelante.. dime- le respondió Kate algo confundida.
-Mira.. averigua la pregunta ¿quien muere en la profecía? ahí esta esta la clave de todo. Ahí esta todo.. Trata de utilizar bien las herramientas.. Y ahí sabrás lo que realmente paso con Emily.
Adiós buena suerte.
Kate se fue corriendo hacia el auto de Kris.
-¿Que te paso?- le preguntó Kate.
-Ni te lo imaginas.. Vamos te lo voy contando..
-¡Ayuda!- grité- ¡Elliot ayudameeeeeeee!
Empece a observar, enseguida noté que no estaba en mi casa. La puerta de abrió y reconocí a Eris, a la supuesta "mujer policía".
-¡Ayudaaaaaaaaaa! Elliot, Oliver.. Vengan por mí..- dije sintiendo la ausencia de mi pierna ortopédica al parecer me había anestesiado antes de sacármela por que no sentía ningún dolor.. Solo sentía cansancio. Estaba atada a una cama sin colchón, era solo una marquesa.
-Grita todo lo que quieras, nadie te va a oír- dijo Eris.
Estaba entre la vida y la muerte. Lo único que recordaba era cuando Eris me puso los alambres con espinas en mi cuello para ahogarme y así dormirme.. Las espinas tenían anestesia y luego había despertado en esta maldita celda.
-¿Y mi pierna?- le pregunté.
-Aquí no la vas a necesitar- Respondió- Puedes usar las muletas de Zeus para caminar.
-¿Zeus?- pregunté.
Sí- respondió apuntando a un cadáver que estaba en su habitación.
-Es una broma muy tétrica- afirmé.
-Esto no tiene nada de broma.
-No entiendo- le contesté.
-No se trata de que entiendas.
-Voy a dormir en esta fría y sucia celda?- le pregunté.
-Solo por esta noche.. Es para que refecciones, ye ayudara a pensar cuan afortunada eres.
Mire mi alrededor, no había cosa que no estuviera manchada con sangre. ¿Quien era Zeus? ¿alguna otra victima?
Eris ya me comenzaba a aterrar..
-Puedo preguntar.. ¿En donde estamos?- me atreví a preguntarle.
-Aquí la de las preguntas soy yo.
Me quede muda, ya no tenia fuerzas para hablar..
-Ya hablaras Emily, no tengo apuro, tengo mucha paciencia..
-Tienes una cómoda cama en tu casa. Piensa en ella para que te quedes dormida, piensa que tus padres están vivos y que están al lado tuyo.. Perdón padres adoptivos.
La miré boquiabierta, ¿como sabia en en mi casa tenia una cómoda cama? y también ¿Como supo que soy hija adoptiva? eso solamente lo sabia yo y mis hermanos, ni siquiera mis mejores amigas ni el resto de mi familia.
-¿Por que me haces tanto daño? ¿que te hice yo?- le pregunté.
Eris salio de la habitación, pero se detuvo en el marco de la puerta al escuchar un quejido de parte mía. No me contuve mas y le pregunte:
-¿Cuando piensas entregarles mis restos a mis hermanos? ¿cuando me asesinaras? Si lo harás.. por favor que sea luego.. A estas alturas no tengo la más mínima intención de seguí viviendo. ¿Que esperas? ¡Matame! ¡hazlo ya!.
Eris no se movió ningún centímetro, y respondió.
-Ya llegara el momento mediadora no te impacientes, todo a su tiempo..
Empece a reflexionar.. "Que cómoda cama tienes en tu casa". Era como si me conociera.. Era como si hubiera estado conmigo, ahí, ahí, ahí.
De pronto todo encajo, supe la verdad al instante, detecte un pequeño detalle que nadie se había dado cuenta, ni la policía, ni los padres de los niños.. Ni yo misma. Seguramente también tenia puesta una pequeña venda que no me permitía ver ese importante detalle.
***
Elliot y Oliver se habían adelantado al funeral, en cambio Kris quería esperar a su amiga Kate.. sentían que esto les afectaba de igual manera y que debían permanecer unidas.. Era una mañana gris de lluvia, Kris no decía nada, solo esperaba a su amiga.
-Era una buena amiga.. ¿no Kris?- le preguntó su chófer.
-La mejor..- contestó aun Kris con el animo por lo suelos- Era una persona que siempre me apoyaba en todo y sobre todo me acompañaba.. Hasta en mi más mínima locura- dijo suspirando.
-¿La extrañaras.. verdad?
Kris asistió, estaba pensando que, cuando volviera de nuevo al colegio, consiguiria que la expulsaran también del colegio Isaac Newton, para que no se sentía eran sola. De repente se empezó a reír sola, tubo recuerdos varios recuerdos en ese momento.
¿De que se rie niña Kris?
De repente Kate golpeó el vidrió del auto.
-¿Me esperas un rato por favor?- le Preguntó Kate a Kris.
-Ya pero apresúrate.
Kate fue a una calle oscura y fue ahí en donde lo vio..
-Kate por aquí- le dijo Andrew..
-¿Quien eres tu?- le preguntó Kate.
-No temas, mi nombre es Andrew, un gusto- se presentó.
-Alto.. tu eres el.. supuesto amigo que tenia Emy..- le dijo Kate algo extrañada.
-Sí, y ustedes la trataban de loca.. y muchas cosas más.. Sí..- respondió este.
-Y ahora mi pregunta es.. ¿por que ahora yo te veo?- le pregunté Kate.
-De eso vine a hablar contigo, veras.. Cuando un mediador esta en peligro, o a punto de morir, mientras tanto le traspasa sus poderes a un ser querido, el cual sea el más débil.. Y ahora este tendrás todas sus herramientas.. Ya saber, observar, mover cosas con la vista, leer la mente, presenciar en futuro ect.. ect.. Y ahora tu eres su suplente y te tengo que encomendar una misión.
-Adelante.. dime- le respondió Kate algo confundida.
-Mira.. averigua la pregunta ¿quien muere en la profecía? ahí esta esta la clave de todo. Ahí esta todo.. Trata de utilizar bien las herramientas.. Y ahí sabrás lo que realmente paso con Emily.
Adiós buena suerte.
Kate se fue corriendo hacia el auto de Kris.
-¿Que te paso?- le preguntó Kate.
-Ni te lo imaginas.. Vamos te lo voy contando..
25 de noviembre de 2011
Capitulo 33.-
Kate gritaba lo que podía, pero nunca Emily nunca respondió. De repente escucho un grito de Emily. Kate se quedo escuchando lo que sucedía hasta que se le acabo el saldo. Habían pasado cinco minutos desde entonces.
Luego marcó desde el teléfono de su hermano.. Pero nada.
Dejo un buzón de voz, y automáticamente se le cayeron unas lagrimas. Elliot le había contado que Emily le había dicho que su fin estaba cerca, y nadie le creía.
Zac su hermano entro a la habitación y la sorprendió con la caratula de la película "La profecía".
-Te eh dicho que no veas esa película, por que te hace hablar sola en la noches- la regaño su hermano.
Kate no hiso caso al regaño de su hermano y se le tiró a los brazos a llorar.
-Zac a Emily le pasó algo malo lo se..- dijo esta llorando, apenas se le entendía los que hablaba.
-¿Que? ¿por que dices eso?- preguntó Zac sorprendido.
-Porque escuche unos ruidos raros.. incluido un grito de Emily- respondió Kate.
Zac abrazaba a Kate, a el también se le cayeron algunas lagrimas.
-Cálmate Kate, Emily es muy inteligente de seguro que debe estar bien- dijo Zac tratando de consolar a su hermana menor.
-Llamare a Elliot, Oliver, Kris y James- dijo Kate ya un poco más seria.
-También hay que llamar a la policía- agregó Zac.
Marcó el celular de Elliot, y este enseguida contestó.
-¿Sí?- respondió Elliot.
-Hola Elliot..- respondió Kate con un notorio sollozo.
-Kate.. ¿Paso algo?- preguntó Elliot.
-Elliot.. es Emily..
-¿¡Que le paso a mi hermana?! ¡Habla Kate por favor!- dijo Elliot alterado.
-Parece que tenia razón Elliot.. Ninguno de nosotros le creyó..- dijo Kate sollozando.
-¿A que te refieres Kate? por favor ve directo al grano- dijo gritando.
-Llame a Emily, pero de repente escuche un golpe y un grito de ella, pero nunca supe en donde estaba.
-¡Dios mio! te juro que si le pasa algo yo no quiero seguir viviendo.. Llamare a la policía.
Elliot cortó la llamada, Kate temía por el.. Por que conocía su condición psicológica.
-¿Que paso hermano?- preguntó Oliver saliendo de la cocina con un vaso de jugo.
-E..mi..ly no p..u..edeee.. ser- dijo Elliot llorando en el piso, estaba tiritando no podía creer lo que había escuchado.
-¿Que le paso?- dijo Oliver asustado.
-Nunca le creí.. estaba en lo cierto, me odio, soy la peor persona del mundo.. Soy un infeliz, como pude.. Emily nunca me había mentido.. Y yo creía que esta vez lo había echo. ¡Ella dijo la verdad todo este tiempo!- dijo Elliot llorando a gritos.
-¡Dime lo que pasa Elliot por favor!- le grito Oliver sacudiéndolo.
-¡Emily esta en manos del asesino! me lo dice el corazón, yo lo presiento esta en peligro ¡mi hermana esta en peligro!- dijo Elliot gritando.
Oliver dejó caer el vaso, consiguiendo de que se manchara el piso y se rompiera por completo. No pronunció ni la más mínima palabra, había quedado inmóvil.
Al cabo de unos minutos llegó a la casa, Kate, Zac, Kris y James. Kate tenia las llaves de la casa pero con la impotencia decidió usar la fuerza.
-¿Oliver? cariño.. ¿estas bien?- Le preguntó Kate inclinándose al suelo para abrazarlo.
Este no agregó nada solo atinó a corresponderle el abrazo.
-Elliot, por favor cálmate.. me rompe el corazón verte así- Le dijo Kris abrazándolo.
-Esto fue mi culpa, ella nunca me mintió, todo lo que había dicho era cierto.. Soy un imbécil.
-Elliot.. Nadie le creyó.. La verdad es culpa de todos- Dijo James dándole unas palmadas en la espalda.
-Kate.. por favor.. nunca me dejes solo- Dijo Oliver, las pocas palabras que le alcanzaron a salir.
Kate solo lo abrazaba.
Zac pensaba en la peores posibilidades, y no quería ver pasar a su hermana algo tan terrible como la muerte de un ser querido a tan temprana edad.
Son cosas de la vida.. Las personas mueren sin previo aviso, pero si se tiene quince años el golpe es más terrible.
Cuando Kate controlo su llanto, paro a Oliver. Sentia que su novio en este momento estaba muy débil, y que en este momento ella debía ser su soporte. De pronto parecía ser una persona independiente. Se sacó su cola de caballo y su tutú rosa. Zac comprendió que su hermana estaba creciendo. Todos los acontecimientos que estaba viviendo la estaban haciendo más fuerte.
-Oliver.. por favor cálmate, y tu también Elliot.. Emily este donde este.. siempre estará con nosotros. Hay que ser fuertes y mantenernos unidos en este momento.
Todos miraron con extrañeza a Kate. Parece que la madurez le llego de golpe, ya era capaz de mantenerse de pie sola, de tal manera que era la más fuerte del grupo.
Kate le quitó el celular de las manos a Elliot, quien estaba llamando insistentemente a Emily para ver si daba señales de vida. Al quitárselo lo azotó al suelo, consiguiendo de que se partiera.
-Yo se que en este momento Emily desearía que fueras fuerte, por favor cumple ese deseo y ya deja de llorar- le dijo Kate seriamente- tomen- Dijo Kate dándoles un calmante.
-No quiero- dijo Elliot.
-Yo tampoco- dijo Oliver.
-¡Se lo toman los dos ahora mismo!- les grito Kate.
-Esta bien- dijeron los dos, tuvieron algo de miedo con la reacción de Kate.
De repente llamaron a la puerta. Era el comisario.
El comisario ingresó a la casa, había una ambiente muy melancólico.
-Comisario.. ¿Tiene algún rastro de mi sobrina?- dijo James en voz baja.
El comisario dio un suspiro y respondió.
-No, lo siento mucho.
Nadie quería mencionar nada, pero temían que en cualquier momento, en la puerta dejaran una bolsa con restos.
-Reuniré a una patrulla para que hagan guardia- dijo el comisario.
Todos asintieron con la cabeza. Ya habían pasado trece horas desde que no aparecía Emily.
Cuando de repente, una llamada.
Oliver se apresuró en contestar. Sus ojos se inundaron de terror.
-No... n..o pu..puu..ede ser.. ¡nooooo!- dijo Oliver tirándose al suelo.
-¿Que paso detective?- preguntó el comisario.
Oliver no podía pronunciar nada.
-Dime a mi cariño.. Tranquilamente.. dime que paso- dijo Kate acariciándole la espalda.
-Mi hermana.. Esta en el armario del cuarto de Elliot..- dijo Oliver en voz baja.
-¿Era el asesino?- preguntó el comisario.
-Si, y me dijo.. "El dolor es bueno"- dijo Oliver tiritando.
-¡Y que esperamos! ¡vamos a ver si efectivamente esta ahí!
Elliot y Oliver subieron a ver el armario. No fue la nota lo primero que vieron, sino que fue la prótesis de Emily. Eris había actuado muy rápido esta vez.
Los gemelos no pudieron más y tomaron la bolsa entre sus brazos, como si con ello pudieran dar un último abrazo a su hermana..
Luego marcó desde el teléfono de su hermano.. Pero nada.
Dejo un buzón de voz, y automáticamente se le cayeron unas lagrimas. Elliot le había contado que Emily le había dicho que su fin estaba cerca, y nadie le creía.
Zac su hermano entro a la habitación y la sorprendió con la caratula de la película "La profecía".
-Te eh dicho que no veas esa película, por que te hace hablar sola en la noches- la regaño su hermano.
Kate no hiso caso al regaño de su hermano y se le tiró a los brazos a llorar.
-Zac a Emily le pasó algo malo lo se..- dijo esta llorando, apenas se le entendía los que hablaba.
-¿Que? ¿por que dices eso?- preguntó Zac sorprendido.
-Porque escuche unos ruidos raros.. incluido un grito de Emily- respondió Kate.
Zac abrazaba a Kate, a el también se le cayeron algunas lagrimas.
-Cálmate Kate, Emily es muy inteligente de seguro que debe estar bien- dijo Zac tratando de consolar a su hermana menor.
-Llamare a Elliot, Oliver, Kris y James- dijo Kate ya un poco más seria.
-También hay que llamar a la policía- agregó Zac.
Marcó el celular de Elliot, y este enseguida contestó.
-¿Sí?- respondió Elliot.
-Hola Elliot..- respondió Kate con un notorio sollozo.
-Kate.. ¿Paso algo?- preguntó Elliot.
-Elliot.. es Emily..
-¿¡Que le paso a mi hermana?! ¡Habla Kate por favor!- dijo Elliot alterado.
-Parece que tenia razón Elliot.. Ninguno de nosotros le creyó..- dijo Kate sollozando.
-¿A que te refieres Kate? por favor ve directo al grano- dijo gritando.
-Llame a Emily, pero de repente escuche un golpe y un grito de ella, pero nunca supe en donde estaba.
-¡Dios mio! te juro que si le pasa algo yo no quiero seguir viviendo.. Llamare a la policía.
Elliot cortó la llamada, Kate temía por el.. Por que conocía su condición psicológica.
-¿Que paso hermano?- preguntó Oliver saliendo de la cocina con un vaso de jugo.
-E..mi..ly no p..u..edeee.. ser- dijo Elliot llorando en el piso, estaba tiritando no podía creer lo que había escuchado.
-¿Que le paso?- dijo Oliver asustado.
-Nunca le creí.. estaba en lo cierto, me odio, soy la peor persona del mundo.. Soy un infeliz, como pude.. Emily nunca me había mentido.. Y yo creía que esta vez lo había echo. ¡Ella dijo la verdad todo este tiempo!- dijo Elliot llorando a gritos.
-¡Dime lo que pasa Elliot por favor!- le grito Oliver sacudiéndolo.
-¡Emily esta en manos del asesino! me lo dice el corazón, yo lo presiento esta en peligro ¡mi hermana esta en peligro!- dijo Elliot gritando.
Oliver dejó caer el vaso, consiguiendo de que se manchara el piso y se rompiera por completo. No pronunció ni la más mínima palabra, había quedado inmóvil.
Al cabo de unos minutos llegó a la casa, Kate, Zac, Kris y James. Kate tenia las llaves de la casa pero con la impotencia decidió usar la fuerza.
-¿Oliver? cariño.. ¿estas bien?- Le preguntó Kate inclinándose al suelo para abrazarlo.
Este no agregó nada solo atinó a corresponderle el abrazo.
-Elliot, por favor cálmate.. me rompe el corazón verte así- Le dijo Kris abrazándolo.
-Esto fue mi culpa, ella nunca me mintió, todo lo que había dicho era cierto.. Soy un imbécil.
-Elliot.. Nadie le creyó.. La verdad es culpa de todos- Dijo James dándole unas palmadas en la espalda.
-Kate.. por favor.. nunca me dejes solo- Dijo Oliver, las pocas palabras que le alcanzaron a salir.
Kate solo lo abrazaba.
Zac pensaba en la peores posibilidades, y no quería ver pasar a su hermana algo tan terrible como la muerte de un ser querido a tan temprana edad.
Son cosas de la vida.. Las personas mueren sin previo aviso, pero si se tiene quince años el golpe es más terrible.
Cuando Kate controlo su llanto, paro a Oliver. Sentia que su novio en este momento estaba muy débil, y que en este momento ella debía ser su soporte. De pronto parecía ser una persona independiente. Se sacó su cola de caballo y su tutú rosa. Zac comprendió que su hermana estaba creciendo. Todos los acontecimientos que estaba viviendo la estaban haciendo más fuerte.
-Oliver.. por favor cálmate, y tu también Elliot.. Emily este donde este.. siempre estará con nosotros. Hay que ser fuertes y mantenernos unidos en este momento.
Todos miraron con extrañeza a Kate. Parece que la madurez le llego de golpe, ya era capaz de mantenerse de pie sola, de tal manera que era la más fuerte del grupo.
Kate le quitó el celular de las manos a Elliot, quien estaba llamando insistentemente a Emily para ver si daba señales de vida. Al quitárselo lo azotó al suelo, consiguiendo de que se partiera.
-Yo se que en este momento Emily desearía que fueras fuerte, por favor cumple ese deseo y ya deja de llorar- le dijo Kate seriamente- tomen- Dijo Kate dándoles un calmante.
-No quiero- dijo Elliot.
-Yo tampoco- dijo Oliver.
-¡Se lo toman los dos ahora mismo!- les grito Kate.
-Esta bien- dijeron los dos, tuvieron algo de miedo con la reacción de Kate.
De repente llamaron a la puerta. Era el comisario.
El comisario ingresó a la casa, había una ambiente muy melancólico.
-Comisario.. ¿Tiene algún rastro de mi sobrina?- dijo James en voz baja.
El comisario dio un suspiro y respondió.
-No, lo siento mucho.
Nadie quería mencionar nada, pero temían que en cualquier momento, en la puerta dejaran una bolsa con restos.
-Reuniré a una patrulla para que hagan guardia- dijo el comisario.
Todos asintieron con la cabeza. Ya habían pasado trece horas desde que no aparecía Emily.
Cuando de repente, una llamada.
Oliver se apresuró en contestar. Sus ojos se inundaron de terror.
-No... n..o pu..puu..ede ser.. ¡nooooo!- dijo Oliver tirándose al suelo.
-¿Que paso detective?- preguntó el comisario.
Oliver no podía pronunciar nada.
-Dime a mi cariño.. Tranquilamente.. dime que paso- dijo Kate acariciándole la espalda.
-Mi hermana.. Esta en el armario del cuarto de Elliot..- dijo Oliver en voz baja.
-¿Era el asesino?- preguntó el comisario.
-Si, y me dijo.. "El dolor es bueno"- dijo Oliver tiritando.
-¡Y que esperamos! ¡vamos a ver si efectivamente esta ahí!
Elliot y Oliver subieron a ver el armario. No fue la nota lo primero que vieron, sino que fue la prótesis de Emily. Eris había actuado muy rápido esta vez.
Los gemelos no pudieron más y tomaron la bolsa entre sus brazos, como si con ello pudieran dar un último abrazo a su hermana..
24 de noviembre de 2011
Capitulo 32.-
Estaba haciendo fuerza con Emily para ahorgacarla con un alambre con espinas y ponerle un paño para que se durmiera. Después todo se le Hiso mas fácil el cuello de Emily solo sangraba, y su cuerpo cayó dormido. Lo puso sobre el escritorio con mucho sigilo, y estaba redactando la séptima nota "Todo ocurre por una razón". Luego la firmó "Eris"
"Esto tiene que ser rápido.. Muy rápido" se decía ella misma.
Tomó el saco y levantó a Emily llego fuera de la oficina.
"Hay que actuar rápido, la policía se aproxima". Dijo mientras abría la maleta de su auto y dentro de un instante ta había metido a Emily a la maleta sin que nadie se diera cuenta.
Trató de limpiar un poco la sangre que salia por litros del cuello de Emily. La observaba con gusto.. Y pasaba un paso húmedo lentamente.
El fin de su misión estaba cerca.. Tan solo bastaba dar el golpe final.
"Esto tiene que ser rápido.. Muy rápido" se decía ella misma.
Tomó el saco y levantó a Emily llego fuera de la oficina.
"Hay que actuar rápido, la policía se aproxima". Dijo mientras abría la maleta de su auto y dentro de un instante ta había metido a Emily a la maleta sin que nadie se diera cuenta.
Trató de limpiar un poco la sangre que salia por litros del cuello de Emily. La observaba con gusto.. Y pasaba un paso húmedo lentamente.
El fin de su misión estaba cerca.. Tan solo bastaba dar el golpe final.
13 de noviembre de 2011
Capitulo 31.-
-Al tiempo.. Mediadora te arrepentirás de no haber leído cierto libro.
Decía el mensaje de Carias que llego a mi celular.
-¿Que estas queriendo decir?- pregunté por el mensaje.
-Nada... Te estaba tratando de contactar por ultima vez. Tal vez no nos volvamos a ver nunca más- decía el nuevo mensaje.
-¿Que dices?- pregunté.
-Ojalas tu muerte no sea tan horrible mediadora.. Pero en realidad, todo Mediador muere de una forma espantosa. Buena suerte.
El pecho me golpeaba, sentía que mi corazón se iba a salir, tenia mucho miedo.
-Ayúdame.. Carias- me atreví a responderle.
-Lo que te espera es el verdadero terror Claussen, que querrás morirte para no enfrentarlo. ¿Cuanto miedo puedes soportar Claussen? ahora lo descubrirás. Adiós.
-¿Sucede algo Emy?- me preguntó Andrew mientras caminábamos por el centro.
-Emmm.. nada- respondí.
-No puedes mentirme y lo sabes.. Era Carias. Lo peor de todo es que yo no te puedo ayudar. Es tu decisión si salvas a no tu vida.
-No entiendo como sabes lo de Carias, no se lo eh dicho a nadie- le dije a Andrew.
-Recuerda que puedo leer tu mente- respondió este.
Preferí enfocarme en el caso, deduje que Eris al secuestrar a los niños, no quería dar a conocer ningún tipo de evidencias. A todos los niños los había llevado con sus bolsos, menos a Monica Pinto y Christofer Reyes. Por eso no coincidían los seis casos, era porque estaban planeados así.
Entré al centro comercial, tenía un gran optimismo, pero no quería darlo a conocer, ahora estaba sola en el caso, y tampoco quería involucrar a nadie más hasta no estar segura de lo que estaba haciendo.
Fui directamente al kiosko de canje.
Ahí estaba el premio que ofrecían, el moderno celular. También había un buzón donde se dejaban las opiniones de los individuos para saber su opinión respecto al kiosko.
-¿Que se te ofrece?- dijo una voz que se me hacia familiar.
-¿Andrew? ¿donde estas?- en efecto Andrew había desaparecido, y cuando eso pasaba significaba que se aproximaba algo malo.. Lo malo de esto es que Andrew no me podía ayudar en nada, la labor de "Mediadora" era únicamente individual.
-Buenas Tardes- respondí, al parecer era la mujer policía.. Adriana.
-¿Ya nos conocíamos? ¿no?- dijo amablemente, tenía una linda sonrisa.
-Sí- dije sonríendole también.
-¿Me esperas un poco?- preguntó ella.
-Sí, como no- le respondí.
Mientras la esperaba miraba hacia fuera de ventanas, la gente iba y venia.
Observe que Andriana estaba muy ocupada buscando unos expedientes.. No sabia de que se trataba..
-¿Usted sabe quien es el dueño del buzón de opiniones?- le pregunté.
-Ni idea- respondió un poco más seria.
Me pareció extraña que una policía no supiera ese dato.. Por que de tal maneras, era el lugar en donde trabajaba.
De repente sonó mi celular, era Kate.
-¿Hola Isa? ¡donde andas!- preguntó esta un poco alterada.
-¿Que pasa Kate? ¿tienes mi encargo?- le pregunté.
-Estuve pensando.. Me encargaste esa tontería para desacerté de mi ¿verdad?
-No Kate. Es enserio.
-Pues no la entiendo- dijo esta.
Adriana Gutierres había desaparecido de mi vista. Mire por todos lado para ver en donde estaba.
-Yo tampoco entiendo, pero en esa pregunta esta la clave de todo esto. ¿Quien muere en la profecía?
-por tu culpa no podre dormir por varios días la película estaba horrible- dijo Kate.
-¡Dime quien muere en la profecía. Maldita!- dije gritándole, por que en verdad Kate me colmaba la poca paciencia que tenía.
-Esta bien.. Esta bien, en la Profecía muere un niño, que te hace creer que el diablo existe.
-Gracias- le dije.
Me gire para ver nuevamente, a donde se había ido Adriana. Y de un golpe, me di cuenta de la verdad.. Era tan difícil de creer, pero tan fácil de darse cuenta... La mujer policía me observaba desde el rincón de la puerta de la oficina. Su miraba lo decía todo, estaba planeando hacer algo terrible. Ya no llevaba la gorra de policía. Y su sonrisa se había ido.. Tenia es rostro desfigurado. Lloraba y lloraba.. Un llanto falso, un llanto que quedaría marcado en mis oídos para el resto de mi vida,un llanto de que de mi más diminuto temor había pasado a convertirse en el temor más grande que hubiera podido experimentar en mi vida.
Estaba frente a frente con Eris.
"Claro" Eris es una Diosa griega de la discordia, no un Dios.. A eso se estaba refiriendo Carias todo el tiempo.. ¡El asesino era una mujer!
Sentía miedo.. Me estaba enfrentando al verdadero asesino sin ningún tipo de advertencia. Había entrado por mi cuenta a la oficina sin saber nada..
Retrocedí hacia atrás lentamente chocando con todos los mueble. Me puse a pensar lo inútil que seria gritar.. No había nadie, Kate seguía en el teléfono contándome la película. Se me pasó por la cabeza la muerte de Annuk.. Eris la había asesinado degollándola con unos vidrios lentamente.., en ese preciso instante deje caer mi celular al suelo..
Me quedé esperando mi destino..
Decía el mensaje de Carias que llego a mi celular.
-¿Que estas queriendo decir?- pregunté por el mensaje.
-Nada... Te estaba tratando de contactar por ultima vez. Tal vez no nos volvamos a ver nunca más- decía el nuevo mensaje.
-¿Que dices?- pregunté.
-Ojalas tu muerte no sea tan horrible mediadora.. Pero en realidad, todo Mediador muere de una forma espantosa. Buena suerte.
El pecho me golpeaba, sentía que mi corazón se iba a salir, tenia mucho miedo.
-Ayúdame.. Carias- me atreví a responderle.
-Lo que te espera es el verdadero terror Claussen, que querrás morirte para no enfrentarlo. ¿Cuanto miedo puedes soportar Claussen? ahora lo descubrirás. Adiós.
-¿Sucede algo Emy?- me preguntó Andrew mientras caminábamos por el centro.
-Emmm.. nada- respondí.
-No puedes mentirme y lo sabes.. Era Carias. Lo peor de todo es que yo no te puedo ayudar. Es tu decisión si salvas a no tu vida.
-No entiendo como sabes lo de Carias, no se lo eh dicho a nadie- le dije a Andrew.
-Recuerda que puedo leer tu mente- respondió este.
Preferí enfocarme en el caso, deduje que Eris al secuestrar a los niños, no quería dar a conocer ningún tipo de evidencias. A todos los niños los había llevado con sus bolsos, menos a Monica Pinto y Christofer Reyes. Por eso no coincidían los seis casos, era porque estaban planeados así.
Entré al centro comercial, tenía un gran optimismo, pero no quería darlo a conocer, ahora estaba sola en el caso, y tampoco quería involucrar a nadie más hasta no estar segura de lo que estaba haciendo.
Fui directamente al kiosko de canje.
Ahí estaba el premio que ofrecían, el moderno celular. También había un buzón donde se dejaban las opiniones de los individuos para saber su opinión respecto al kiosko.
-¿Que se te ofrece?- dijo una voz que se me hacia familiar.
-¿Andrew? ¿donde estas?- en efecto Andrew había desaparecido, y cuando eso pasaba significaba que se aproximaba algo malo.. Lo malo de esto es que Andrew no me podía ayudar en nada, la labor de "Mediadora" era únicamente individual.
-Buenas Tardes- respondí, al parecer era la mujer policía.. Adriana.
-¿Ya nos conocíamos? ¿no?- dijo amablemente, tenía una linda sonrisa.
-Sí- dije sonríendole también.
-¿Me esperas un poco?- preguntó ella.
-Sí, como no- le respondí.
Mientras la esperaba miraba hacia fuera de ventanas, la gente iba y venia.
Observe que Andriana estaba muy ocupada buscando unos expedientes.. No sabia de que se trataba..
-¿Usted sabe quien es el dueño del buzón de opiniones?- le pregunté.
-Ni idea- respondió un poco más seria.
Me pareció extraña que una policía no supiera ese dato.. Por que de tal maneras, era el lugar en donde trabajaba.
De repente sonó mi celular, era Kate.
-¿Hola Isa? ¡donde andas!- preguntó esta un poco alterada.
-¿Que pasa Kate? ¿tienes mi encargo?- le pregunté.
-Estuve pensando.. Me encargaste esa tontería para desacerté de mi ¿verdad?
-No Kate. Es enserio.
-Pues no la entiendo- dijo esta.
Adriana Gutierres había desaparecido de mi vista. Mire por todos lado para ver en donde estaba.
-Yo tampoco entiendo, pero en esa pregunta esta la clave de todo esto. ¿Quien muere en la profecía?
-por tu culpa no podre dormir por varios días la película estaba horrible- dijo Kate.
-¡Dime quien muere en la profecía. Maldita!- dije gritándole, por que en verdad Kate me colmaba la poca paciencia que tenía.
-Esta bien.. Esta bien, en la Profecía muere un niño, que te hace creer que el diablo existe.
-Gracias- le dije.
Me gire para ver nuevamente, a donde se había ido Adriana. Y de un golpe, me di cuenta de la verdad.. Era tan difícil de creer, pero tan fácil de darse cuenta... La mujer policía me observaba desde el rincón de la puerta de la oficina. Su miraba lo decía todo, estaba planeando hacer algo terrible. Ya no llevaba la gorra de policía. Y su sonrisa se había ido.. Tenia es rostro desfigurado. Lloraba y lloraba.. Un llanto falso, un llanto que quedaría marcado en mis oídos para el resto de mi vida,un llanto de que de mi más diminuto temor había pasado a convertirse en el temor más grande que hubiera podido experimentar en mi vida.
Estaba frente a frente con Eris.
"Claro" Eris es una Diosa griega de la discordia, no un Dios.. A eso se estaba refiriendo Carias todo el tiempo.. ¡El asesino era una mujer!
Sentía miedo.. Me estaba enfrentando al verdadero asesino sin ningún tipo de advertencia. Había entrado por mi cuenta a la oficina sin saber nada..
Retrocedí hacia atrás lentamente chocando con todos los mueble. Me puse a pensar lo inútil que seria gritar.. No había nadie, Kate seguía en el teléfono contándome la película. Se me pasó por la cabeza la muerte de Annuk.. Eris la había asesinado degollándola con unos vidrios lentamente.., en ese preciso instante deje caer mi celular al suelo..
Me quedé esperando mi destino..
12 de noviembre de 2011
Capitulo 30.-
Eris hubiera querido dejar a Emily para el final, para el momento en que pudiera decir "Misión cumplida".
Pero nada puede oponerse a la voluntad de los dioses.
Justo al otro lado del pantalla estaba. Emily Claussen, la chica de la televisión, la victima que había reservado para el final. La chica con la prótesis, necesitaba lograr un trabajo perfecto.
Se la había imaginado, en el octavo lugar. Pero estaba contra su voluntad, primero tenia que alcanzar a la séptima victima. Pero Eris prefirió ocupar su mayor virtud, esperar.. esperar y esperar..
Eris no iba a desaprovechar esa oportunidad.
Su séptima labor estaba en camino.
"Ocho menos siete, da uno."
El fin estaba cerca..
Pero nada puede oponerse a la voluntad de los dioses.
Justo al otro lado del pantalla estaba. Emily Claussen, la chica de la televisión, la victima que había reservado para el final. La chica con la prótesis, necesitaba lograr un trabajo perfecto.
Se la había imaginado, en el octavo lugar. Pero estaba contra su voluntad, primero tenia que alcanzar a la séptima victima. Pero Eris prefirió ocupar su mayor virtud, esperar.. esperar y esperar..
Eris no iba a desaprovechar esa oportunidad.
Su séptima labor estaba en camino.
"Ocho menos siete, da uno."
El fin estaba cerca..
Capitulo 29.-
Cuando llegué a mi casa me quite el uniforme y me pude la tenia más formal que tenia, un vestido negro. Luego me prepare mentalmente. Para ver que iba a revisar en su casa y a la vez pedirles disculpas a sus padres.
Salí de mi casa, y sentí la necesidad de ir a ver a la plaza. Un instinto me llevo a pararme frente a la estatua "Madre Tierra" y comenzar a hablarle, luego que inicie la platica poco a poco me fui sintiendo bien.
-Dice Kate que puedes escuchar. Yo no creo que sea cierto, pero de alguna manera me haces sentir bien. Soy alguien que confía en mis ideas y si es necesario, llegare al punto de morir defendiéndolas, y eso nadie me lo entiende. Por eso te pido que me ayudes a resolver esto, y completar mi misión y así poder salvar el alma de Andrew. Ayúdame Madre Tierra por favor.
-¿Ya te volviste loca? ¿estas hablando con la estatua?
Me gire a ver quien era. Era Kate, con su tu-tu puesto, al parecer tampoco había ido al colegio. No pude evitar sonreír. Yo misma siempre le decía que estaba loca por que hablaba con la estatua.
-Kate.. Quiero pedirte disculpas por no haberte hablado este tiempo, aclare mis ideas este tiempo, y la verdad es que cometí un error. Lo siento- Le dije a mi amiga.
-¿Tu pidiendo disculpas? ¿quien te lavo el cerebro?- dijo esta riendo.
-Nadie solo me eh dado cuenta de mis errores- dije con una gran sonrisa en mi rostro.
-No te preocupes- dijo abrazándome.
-Y bien.. ¿Tus padres tampoco te dejaron ir al colegio?- le pregunté.
-No. Y tampoco me dejan estar estar con Oliver, Elliot y tu. Ya se enteraron que la niña asesinada iba en nuestro colegio- dijo Kate.
-Lo siento- dije tristemente.
-Pero no me importa, yo le hablo a quien se me de la gana. No te preocupes- dijo Kate.
-¿Y también te pidieron que terminaras con Oliver?- le pregunté.
-Si, pero nunca lo haría, antes muerta- dijo Kate.
Reí por la exagerada respuesta de Kate, luego agregué:
-Que lindo gesto- dije sonriendo.
-¿Es lo que hacen las novias por los novios no?- dije riendo.
-Hay Kate.. Nunca cambias- dije riendo nuevamente.
-Soy genial- Dijo sarcásticamente.
-Te quiero pedir un favor enorme- le dije a Kate.
-No vallas a cometer locuras Emy.. Haber.. ¿De que se trata?- preguntó Kate.
-Quiero que averigües, quien muere en "La profecía". Carias me dijo que ahí estaba la pista de todo. Le respondí a Kate.
-¿Estas loca? tu sabes que le tengo pánico a lo que sea de terror- me respondió con cara de horror.
-Cuando tengas los nombres me mandas un mensaje. Adiós- Dije llego hacia donde estaba el chófer.
-¡No! hasta que me digas a donde vas tan arreglada- me gritó Kate.
-Voy a casa de la niña asesinada, y después donde me lleve el destino- le respondí- te encargo la pregunta es muy importante. Adiós- le dije corriendo hasta donde Gastón.
Llegue a la casa de Monica Pinto, las flores que llevaba eran las que había comprado con el dinero de la Directora.
Llame al timbre, al poco tiempo respondieron:
-¿Quien?.
-Buenos días, vengo a ver a mi amiga Monica- respondí.
Caminé por el tranquilo pasillo, su casa era muy humilde. La familia era de clase baja. Supuse que la familia había estado haciendo grande sacrificios para mantener a su hija en el colegio Isaac Newton en vez de tenerla en cualquier escuela pública. Al parecer sus padres tenían una gran esperanza puesta en ella, que ahora se había ido para siempre con su muerte.
Divise una persona con traje negro y de cabello largo, por lo visto tenia mucha prisa. El corazón me anunciaba que algo malo sucedería.
Al fondo del pasillo apareció Melquiades Guntra. Por mi mete pasó. "Puedo soportar el miedo, puedo soportarlo."
Apreté los dientes, no quería que Guntra notara mi miedo.
-Nos volvemos a encontrar Melquiades- me atreví a decir.
-Me sorprendes Mediadora, que bien soportar el miedo. Has estado entrenando- Dijo con su voz ronca.
-¿Que haces aquí?- le pregunté.
-Vine a ver a la familia. Ellos son victimas, de los imbéciles que no sabes hacer tu trabajo. Te lo imaginaras Mediadora.
-Sí me equivoque, fue porque mis sentidos me engañaron, pero quizás tu aun tienes algo que ver con esto. Maldito- Dije apretando mis puños.
-"Ja, ja, ja, ja"- Rió como un loco- mira como tiemblo-dijo este, como si estuviese jugando- Abre los ojos. Soportas bien el terror, pero no sabes nada.
-Me tengo que ir- dije caminando hacia la salida.
Guntra me empujó al suelo.
-La única razón de porque no te devoro aquí, es porque quiero hacerlo con calma, quiero hacerte pasar el terror que jamas hayas soportado. Quiero que tu muerte sea muy lenta y dolorosa.- dijo agarrándome del cuello.
-¡Me tengo que ir maldito! ¡Que parte no entiendes de eso!- dije levantándome del suelo.
Guntra se había ido, como una normal y civilizada persona.
Subí mas escaleras, hasta llegar al velorio nuevamente, iba pensando que lo que le había dicho a mi hermano Elliot se aproximaba.. Mi muerte.. Se aproximaba. De repente me toque frente a frente con el comisario Guillén.
-¡Que haces aquí!- me dijo el comisario sorprendido.
-Monica... emmm.. era mi amiga- mentí.
-Comprendo, vienes a ver a su familia ¿verdad?- pregunto el comisario.
-Sí, pero también..
-¡Te pedí que dejaras el caso!- dijo el comisario alterado.
-No me pidan que haga eso.. No puedo, mi cuerpo quiere, pero mi mente y corazón no- dije tristemente.
-Bueno tampoco es para tanto. Eh sido demasiado duro contigo. Discúlpame. Vamos subamos.
Al subir las escaleras, me dio un ataque de llanto pero supe contenerme.
Tocamos a la puerta.
-Buenos días señor Pinto. Mi sobrina Emily viene a dar sus condolencias- dijo el teniente.
-Claro. Pasa supongo que tu y Moni eran muy buenas amigas.
Preferí no agregar nada, varias personas llegaban a darle el ultimo Adiós a Monica Pinto. Algunos lloraban. Y en general el ambiente era muy melancólico. El comisario me llevo donde la madre de la niña. La señora se inclinó y me abrazó. Al parecer se había quebrado en una torrente de lagrimas, trate de soportar el fuerte desahogo de la señora. Luego me dio un beso en la mejilla y volvió con las demás personas.
Me recargué de brazos cruzados a la pared, junto con el comisario. Se respiraba un aire de tristeza, que casi ya no soportaba.
Y entonces el comisario susurró en mi oído:
-Pon atención.
-No pude dejar de sorprenderme, el comisario había conseguido sacarme una gran sonrisa. Eso me dio a entender que me estaba dando la bienvenida al caso.
-A la izquierda esta el baño, en el segundo piso. Justo al lado esta la habitación de Monica. Pide permiso para ir al baño, vamos yo te cubro- dijo el comisario haciéndome unas disimuladas señas.
Seguía asombrada. Pero no tenia tiempo que perder . Me acerque a la señora, y le pedí prestado el baño. Y de manera inmediata fui hacia a ya.
Encontré enseguida la habitación de la sexta victima. Puse a trabajar mi mente, los segundos valían oro. Me puse a absorber todo lo que viera, para que quedara grabado para siempre en mi memoria.
No había nada que me llamara la atención por el momento, había en su armario unas rameras, también unas peinetas de juguete, unos cuantos accesorios de maquillaje,una bolsa y un reloj de pulsera. Hasta el momento no sabia nada de mi compañera, nada más que iba en mi curso, y era una excelente persona.
De pronto me asombró un detalle. Fue como salir de muchos obstáculos. Revisé la bolsa. Un aire de optimismo vino a mi. Mi corazón se aceleraba.
-¡Claro, como pude ser tan ciega!- dije en un leve grito- que tonta soy..
Saque un boleto, que era un premio. Era un moderno celular.
Salí tranquilamente de la habitación, y me puse como si no hubiese pasado nada, al lado del comisario.
-¿Encontraste algo?- preguntó el comisario.
Me puse a reflexionar por unos instante, y respondí:
-No, no encontré nada- le respondí.
El comisario, Hiso notoria su decepción.
-Ahora me debo ir, adiós comisario.
-Gracias, de todas maneras. Adiós.
EL comisario, sospecho algo el apuro en irme. Se animó quedarse un rato más con la familia.
Iba corriendo en busca de un taxi.. Hasta que..
-¿Que pasa a donde vas con tanto apuro?- Dijo Andrew deteniéndome.
-Que bueno que estas aquí, acompáñame.
Tomamos el taxi y nos fuimos al centro comercial.
-¿Que pasa Emy?- preguntó Andrew.
-Eh encontrado una pista muy importante, después te la digo con más calma.
-Señorita.. ¿Se siente bien?- preguntó el chófer, al ver que "hablaba sola".
Andrew rió a carcajadas.
-Es mi vida, usted solo maneje.
El chófer me miró con cara de asustado.
Nos bajamos en el centro comercial, cerca de la villa Especular. Tenia una mezcla de miedo y entusiasmo. Ahora estaba en la pista correcta.
Salí de mi casa, y sentí la necesidad de ir a ver a la plaza. Un instinto me llevo a pararme frente a la estatua "Madre Tierra" y comenzar a hablarle, luego que inicie la platica poco a poco me fui sintiendo bien.
-Dice Kate que puedes escuchar. Yo no creo que sea cierto, pero de alguna manera me haces sentir bien. Soy alguien que confía en mis ideas y si es necesario, llegare al punto de morir defendiéndolas, y eso nadie me lo entiende. Por eso te pido que me ayudes a resolver esto, y completar mi misión y así poder salvar el alma de Andrew. Ayúdame Madre Tierra por favor.
-¿Ya te volviste loca? ¿estas hablando con la estatua?
Me gire a ver quien era. Era Kate, con su tu-tu puesto, al parecer tampoco había ido al colegio. No pude evitar sonreír. Yo misma siempre le decía que estaba loca por que hablaba con la estatua.
-Kate.. Quiero pedirte disculpas por no haberte hablado este tiempo, aclare mis ideas este tiempo, y la verdad es que cometí un error. Lo siento- Le dije a mi amiga.
-¿Tu pidiendo disculpas? ¿quien te lavo el cerebro?- dijo esta riendo.
-Nadie solo me eh dado cuenta de mis errores- dije con una gran sonrisa en mi rostro.
-No te preocupes- dijo abrazándome.
-Y bien.. ¿Tus padres tampoco te dejaron ir al colegio?- le pregunté.
-No. Y tampoco me dejan estar estar con Oliver, Elliot y tu. Ya se enteraron que la niña asesinada iba en nuestro colegio- dijo Kate.
-Lo siento- dije tristemente.
-Pero no me importa, yo le hablo a quien se me de la gana. No te preocupes- dijo Kate.
-¿Y también te pidieron que terminaras con Oliver?- le pregunté.
-Si, pero nunca lo haría, antes muerta- dijo Kate.
Reí por la exagerada respuesta de Kate, luego agregué:
-Que lindo gesto- dije sonriendo.
-¿Es lo que hacen las novias por los novios no?- dije riendo.
-Hay Kate.. Nunca cambias- dije riendo nuevamente.
-Soy genial- Dijo sarcásticamente.
-Te quiero pedir un favor enorme- le dije a Kate.
-No vallas a cometer locuras Emy.. Haber.. ¿De que se trata?- preguntó Kate.
-Quiero que averigües, quien muere en "La profecía". Carias me dijo que ahí estaba la pista de todo. Le respondí a Kate.
-¿Estas loca? tu sabes que le tengo pánico a lo que sea de terror- me respondió con cara de horror.
-Cuando tengas los nombres me mandas un mensaje. Adiós- Dije llego hacia donde estaba el chófer.
-¡No! hasta que me digas a donde vas tan arreglada- me gritó Kate.
-Voy a casa de la niña asesinada, y después donde me lleve el destino- le respondí- te encargo la pregunta es muy importante. Adiós- le dije corriendo hasta donde Gastón.
Llegue a la casa de Monica Pinto, las flores que llevaba eran las que había comprado con el dinero de la Directora.
Llame al timbre, al poco tiempo respondieron:
-¿Quien?.
-Buenos días, vengo a ver a mi amiga Monica- respondí.
Caminé por el tranquilo pasillo, su casa era muy humilde. La familia era de clase baja. Supuse que la familia había estado haciendo grande sacrificios para mantener a su hija en el colegio Isaac Newton en vez de tenerla en cualquier escuela pública. Al parecer sus padres tenían una gran esperanza puesta en ella, que ahora se había ido para siempre con su muerte.
Divise una persona con traje negro y de cabello largo, por lo visto tenia mucha prisa. El corazón me anunciaba que algo malo sucedería.
Al fondo del pasillo apareció Melquiades Guntra. Por mi mete pasó. "Puedo soportar el miedo, puedo soportarlo."
Apreté los dientes, no quería que Guntra notara mi miedo.
-Nos volvemos a encontrar Melquiades- me atreví a decir.
-Me sorprendes Mediadora, que bien soportar el miedo. Has estado entrenando- Dijo con su voz ronca.
-¿Que haces aquí?- le pregunté.
-Vine a ver a la familia. Ellos son victimas, de los imbéciles que no sabes hacer tu trabajo. Te lo imaginaras Mediadora.
-Sí me equivoque, fue porque mis sentidos me engañaron, pero quizás tu aun tienes algo que ver con esto. Maldito- Dije apretando mis puños.
-"Ja, ja, ja, ja"- Rió como un loco- mira como tiemblo-dijo este, como si estuviese jugando- Abre los ojos. Soportas bien el terror, pero no sabes nada.
-Me tengo que ir- dije caminando hacia la salida.
Guntra me empujó al suelo.
-La única razón de porque no te devoro aquí, es porque quiero hacerlo con calma, quiero hacerte pasar el terror que jamas hayas soportado. Quiero que tu muerte sea muy lenta y dolorosa.- dijo agarrándome del cuello.
-¡Me tengo que ir maldito! ¡Que parte no entiendes de eso!- dije levantándome del suelo.
Guntra se había ido, como una normal y civilizada persona.
Subí mas escaleras, hasta llegar al velorio nuevamente, iba pensando que lo que le había dicho a mi hermano Elliot se aproximaba.. Mi muerte.. Se aproximaba. De repente me toque frente a frente con el comisario Guillén.
-¡Que haces aquí!- me dijo el comisario sorprendido.
-Monica... emmm.. era mi amiga- mentí.
-Comprendo, vienes a ver a su familia ¿verdad?- pregunto el comisario.
-Sí, pero también..
-¡Te pedí que dejaras el caso!- dijo el comisario alterado.
-No me pidan que haga eso.. No puedo, mi cuerpo quiere, pero mi mente y corazón no- dije tristemente.
-Bueno tampoco es para tanto. Eh sido demasiado duro contigo. Discúlpame. Vamos subamos.
Al subir las escaleras, me dio un ataque de llanto pero supe contenerme.
Tocamos a la puerta.
-Buenos días señor Pinto. Mi sobrina Emily viene a dar sus condolencias- dijo el teniente.
-Claro. Pasa supongo que tu y Moni eran muy buenas amigas.
Preferí no agregar nada, varias personas llegaban a darle el ultimo Adiós a Monica Pinto. Algunos lloraban. Y en general el ambiente era muy melancólico. El comisario me llevo donde la madre de la niña. La señora se inclinó y me abrazó. Al parecer se había quebrado en una torrente de lagrimas, trate de soportar el fuerte desahogo de la señora. Luego me dio un beso en la mejilla y volvió con las demás personas.
Me recargué de brazos cruzados a la pared, junto con el comisario. Se respiraba un aire de tristeza, que casi ya no soportaba.
Y entonces el comisario susurró en mi oído:
-Pon atención.
-No pude dejar de sorprenderme, el comisario había conseguido sacarme una gran sonrisa. Eso me dio a entender que me estaba dando la bienvenida al caso.
-A la izquierda esta el baño, en el segundo piso. Justo al lado esta la habitación de Monica. Pide permiso para ir al baño, vamos yo te cubro- dijo el comisario haciéndome unas disimuladas señas.
Seguía asombrada. Pero no tenia tiempo que perder . Me acerque a la señora, y le pedí prestado el baño. Y de manera inmediata fui hacia a ya.
Encontré enseguida la habitación de la sexta victima. Puse a trabajar mi mente, los segundos valían oro. Me puse a absorber todo lo que viera, para que quedara grabado para siempre en mi memoria.
No había nada que me llamara la atención por el momento, había en su armario unas rameras, también unas peinetas de juguete, unos cuantos accesorios de maquillaje,una bolsa y un reloj de pulsera. Hasta el momento no sabia nada de mi compañera, nada más que iba en mi curso, y era una excelente persona.
De pronto me asombró un detalle. Fue como salir de muchos obstáculos. Revisé la bolsa. Un aire de optimismo vino a mi. Mi corazón se aceleraba.
-¡Claro, como pude ser tan ciega!- dije en un leve grito- que tonta soy..
Saque un boleto, que era un premio. Era un moderno celular.
Salí tranquilamente de la habitación, y me puse como si no hubiese pasado nada, al lado del comisario.
-¿Encontraste algo?- preguntó el comisario.
Me puse a reflexionar por unos instante, y respondí:
-No, no encontré nada- le respondí.
El comisario, Hiso notoria su decepción.
-Ahora me debo ir, adiós comisario.
-Gracias, de todas maneras. Adiós.
EL comisario, sospecho algo el apuro en irme. Se animó quedarse un rato más con la familia.
Iba corriendo en busca de un taxi.. Hasta que..
-¿Que pasa a donde vas con tanto apuro?- Dijo Andrew deteniéndome.
-Que bueno que estas aquí, acompáñame.
Tomamos el taxi y nos fuimos al centro comercial.
-¿Que pasa Emy?- preguntó Andrew.
-Eh encontrado una pista muy importante, después te la digo con más calma.
-Señorita.. ¿Se siente bien?- preguntó el chófer, al ver que "hablaba sola".
Andrew rió a carcajadas.
-Es mi vida, usted solo maneje.
El chófer me miró con cara de asustado.
Nos bajamos en el centro comercial, cerca de la villa Especular. Tenia una mezcla de miedo y entusiasmo. Ahora estaba en la pista correcta.
10 de noviembre de 2011
Capitulo 28.-
Guntra se encargo de que todo el mundo se enterara, cuando lo soltaron. Que pensaba presentar una demanda en contra de la justicia chilena, por haberlo inculpado injustamente. Su rostro apareció en las primeras planas. Y desde que lo dejaron en libertad el miedo volvió a mi de forma incontrolable. El miércoles por la tarde dormí terriblemente mal, tenia pesadillas de engendros, demonios, monstruos y seres sobrenaturales. El Jueves me hice la enferma para no asistir a clases. Pero Elliot y Oliver no me dejaron faltar, creían que me haría bien despejarme un poco.
Cuando llegue al colegio, me tope con la Directora Victoria en la entrada del colegio.
-Acompáñame a mi oficina- dijo la Directora.
Ya estaba empezando a sentir que le debí rogar más a mis hermanos para haberme quedado en casa.
La maestra y yo entramos a su oficina y esta lo cerró.
Sobre el escritorio de la maestra había una fotografía de Monica Pinto la sexta victima.
-Bueno y al final.. No tuviste la razón, pero a la vez si, señalaste a Guntra como el asesino y después advertiste que no por que no estaban las pruebas necesarias ¿Quien te entiende?- Me cuestionó la directora.
-Me siento muy mal directora, ahora estoy completamente sola. Les dije a mis hermanos que los odiaba, a mis amigas también. En mi aula nunca me e llevado bien con mis compañeras, no tengo padre..- Y no pude continuar, una lagrima resbalo por mi mejilla.
-Disculpe Directora- le dije limpiándome la cara.
-No te preocupes. Yo eh contenido el llanto desde ayer.
Guardamos un rato silencio. Hasta que pude hablar con mas calma.
-Directora quiero pedirle un favor enorme, en realidad son dos- le dije mirándola fijamente al parecer se le habían caído un par de lagrimas.
-Veamos- dijo limpiándose el rostro.
-Primero.. ¿Me permitiría faltar hoy a clases?
-Por eso no te preocupes. De todas maneras el colegio de va a cerrar nuevamente.
-Bueno y el segundo es algo más complicado. Ni me lo niega comprenderé.
-Quiero que me de la dirección de Monica Pinto- dije observando la fotografía de la victima.
La maestra no supo que responder. Los datos de los alumnos estaban estrictamente privado revelarlos.
-¿Para que la quieres?- me preguntó.
-Podríamos decir que es para llevarle flores.. Pero usted es inteligente y se dará cuenta..- Respondí.
Busco en los archivos de su computador , busco la dirección, la copio y la imprimió. Y enseguida me la pasó a mi. Luego sacó de su bolso cinco mil pesos.
-Mi aporte para las flores- Dijo sonriendo.
-Gracias- le respondí saliendo de la oficina.
-Hola ¿ Por que esa cara?- dijo Andrew saludándome.
-Nada es que hable con la Directora y estuve reflexionando sobre lo sola que estoy..- respondí bajando la mirada.
-Recuerda que me tienes a mi- dijo este despeinándome, lo cual me Hiso reír.
-Muchas gracias, pero igual siento el vacio de mis amigas y mi familia, sobre todo mis hermanos- respondí.
-Comprendo- respondió.
-Una pregunta... ¿Porque el asesino mató a mis padres si este mata solo a niños más bien a adolecentes?- le pregunté, esa era un pregunta que nunca me habia detenido para refleccionarla.
-Lo que pasa es que el asesino debio matar a tus padres, para debilitarte, y poner obstaculos para no poder llevar a cabo tu misión, es solo eso- respondió.
-Pero no lo consiguió- dije apretando los puños.
-Que fuerte eres- Dijo Andrew.
-Habeces me cuesta pero salgo adelante igual, extraño mucho el apoyo de mis hermanos- dije observandolos, estaban con Kris, James y kate en el recreo, riendo a carcajadas.
-Deben pensar que estas loca- dijo riendo tristemente Andrew.
-¿Existe una manera de que vuelvas a ser humano?- le pregunté.
-Sí, tienes que completar tu misión y así mi alma no estara más atrapada entre la vida y la muerte- dijo este sonriendome levemente.
-Ya veo..- Dije obvservando a mis hermanos y amigas.
-¿Sabes? yo creo que no deberias ser tan rencorosa, eso dificulta tu labor, tiene que comprender que tus hermanos y amigas no son como tu. Tu puedes ver más a ya las situaciones. tus hermanos y amigas no, ellos se convencen con lo primero que ven. ¿Y sabes por que?. Porque ellos no tienen tus virtudes, y no pueden darse cuenta cuando realmente algo esta mal. Piensa lo que digo- dijo Andrew mirando mis manos.
-Cierto, tienes razón, no fue culpa de ellos equivocarse, y ahora comprendo el despresio que me hacian, yo hubiera echo lo mismo si fuera normal. Quien pensaria que yo hablo con fantasmas, leo la mente, veo el futuro, muevo las cosas con la vista y unas tantas más y sobre todo ser una mediadora. Ellos lo unico que tienen claro de mi es que soy observadora nada más.- Dije tristemente, al parecer había cometido yo el error.
-Que bueno que te des cuenta de tus errores, y si no te das cuenta no te ayudo, cuando te vallas a tu casa pídeles disculpas, por que en verdad, tu necesitas de ellos, son una parte esencial de tu vida- dijo Andrew aconsejándome
Solo atine a hacer una mueca.
-Lo se- dijo este riendo- te cuesta mucho pedir perdón, eres muy rencorosa y también orgullosa, te cuesta decir "Te quiero" y más aun "Te amo", solo conmigo has demostrado un poco pero muy poco tu lado sensible. Y te comprendo los Mediadores deben ser así, pero no siempre.. Si no que en ciertas situaciones, les ayuda a fortalecerse, pero siempre van a necesitar el cariño de alguien, no todo es tan frió como tu lo vez Emy.. No todo.. Créeme- Dijo Andrew mirándome, al parecer me conocía.
mucho.
-¿Sabes? siento como si te conociera desde mucho antes no se.. Desde que tengo uso de razón- le dije jugando con su pelo.
-Siempre eh estado contigo Emy...
-¿Como es eso?- le pregunté.
-Desde la Edad Media aproximadamente- dijo este en voz baja.
-¿Perdón?- le pregunté.
-Hay tantas cosas que no sabes pequeña.. Te conozco desde la Edad media que Su comienzo se sitúa convencionalmente en el año 476 con la caída del Imperio romano de Occidente y su fin en 1492 con el descubrimiento de América, o en 1453 con la caída del Imperio bizantino, fecha que tiene la ventaja de coincidir con la invención de la imprenta y con el fin de la Guerra de los Cien Años- Dijo este.
-Si se eso- dije riendo- y deja de explicarme así que me siento tonta. ¿Pero como es eso que te conozco de la Edad Media... Digo.. si no te has dado cuenta soy de la época contemporánea- dije haciendo una mueca graciosa.
-Mira.. antes eramos otras personas en la Edad Media, lo que pasa es que esas personas se van reencarnado en todas las épocas- Dije Andrew.
-Ya veo.. pero vamos al punto. ¿Como me conoces tu de esa época?- Pregunté.
-No querrás saber que eramos- dijo este jugueteando con las manos.
-Dime- dije riendo.
-No- respondió este.
-¡Dime!- dije Seriamente.
-Esta bien... Esta bien, pero deja pararme por que se que después me vas a querer pegar- Dijo este riendo.
-No seas ridículo, ya siéntate- Le dije.
-Te lo advertí- dijo este insistiendo.
-¡Ya, Habla!- dije sulfurada.
-Ya, En la Edad Media nosotros estábamos casados- dijo este serio.
Nos quedamos en silencio por una momento. Pero luego no pude evitar reír a carcajadas.
-Sí búrlate- dijo este un poco serio.
Ya calmada agregué.
-¿En verdad? como es la vida..- dije mirándolo.
-Por eso, bueno en parte, sientes que me conoces desde mucho antes, ese es uno de los motivos. Y también por eso eres la única capas de volver a convertirme en humano.
-Haré lo posible..- dije sonriendo.
-Gracias- Dijo Andrew..
Cuando llegue al colegio, me tope con la Directora Victoria en la entrada del colegio.
-Acompáñame a mi oficina- dijo la Directora.
Ya estaba empezando a sentir que le debí rogar más a mis hermanos para haberme quedado en casa.
La maestra y yo entramos a su oficina y esta lo cerró.
Sobre el escritorio de la maestra había una fotografía de Monica Pinto la sexta victima.
-Bueno y al final.. No tuviste la razón, pero a la vez si, señalaste a Guntra como el asesino y después advertiste que no por que no estaban las pruebas necesarias ¿Quien te entiende?- Me cuestionó la directora.
-Me siento muy mal directora, ahora estoy completamente sola. Les dije a mis hermanos que los odiaba, a mis amigas también. En mi aula nunca me e llevado bien con mis compañeras, no tengo padre..- Y no pude continuar, una lagrima resbalo por mi mejilla.
-Disculpe Directora- le dije limpiándome la cara.
-No te preocupes. Yo eh contenido el llanto desde ayer.
Guardamos un rato silencio. Hasta que pude hablar con mas calma.
-Directora quiero pedirle un favor enorme, en realidad son dos- le dije mirándola fijamente al parecer se le habían caído un par de lagrimas.
-Veamos- dijo limpiándose el rostro.
-Primero.. ¿Me permitiría faltar hoy a clases?
-Por eso no te preocupes. De todas maneras el colegio de va a cerrar nuevamente.
-Bueno y el segundo es algo más complicado. Ni me lo niega comprenderé.
-Quiero que me de la dirección de Monica Pinto- dije observando la fotografía de la victima.
La maestra no supo que responder. Los datos de los alumnos estaban estrictamente privado revelarlos.
-¿Para que la quieres?- me preguntó.
-Podríamos decir que es para llevarle flores.. Pero usted es inteligente y se dará cuenta..- Respondí.
Busco en los archivos de su computador , busco la dirección, la copio y la imprimió. Y enseguida me la pasó a mi. Luego sacó de su bolso cinco mil pesos.
-Mi aporte para las flores- Dijo sonriendo.
-Gracias- le respondí saliendo de la oficina.
-Hola ¿ Por que esa cara?- dijo Andrew saludándome.
-Nada es que hable con la Directora y estuve reflexionando sobre lo sola que estoy..- respondí bajando la mirada.
-Recuerda que me tienes a mi- dijo este despeinándome, lo cual me Hiso reír.
-Muchas gracias, pero igual siento el vacio de mis amigas y mi familia, sobre todo mis hermanos- respondí.
-Comprendo- respondió.
-Una pregunta... ¿Porque el asesino mató a mis padres si este mata solo a niños más bien a adolecentes?- le pregunté, esa era un pregunta que nunca me habia detenido para refleccionarla.
-Lo que pasa es que el asesino debio matar a tus padres, para debilitarte, y poner obstaculos para no poder llevar a cabo tu misión, es solo eso- respondió.
-Pero no lo consiguió- dije apretando los puños.
-Que fuerte eres- Dijo Andrew.
-Habeces me cuesta pero salgo adelante igual, extraño mucho el apoyo de mis hermanos- dije observandolos, estaban con Kris, James y kate en el recreo, riendo a carcajadas.
-Deben pensar que estas loca- dijo riendo tristemente Andrew.
-¿Existe una manera de que vuelvas a ser humano?- le pregunté.
-Sí, tienes que completar tu misión y así mi alma no estara más atrapada entre la vida y la muerte- dijo este sonriendome levemente.
-Ya veo..- Dije obvservando a mis hermanos y amigas.
-¿Sabes? yo creo que no deberias ser tan rencorosa, eso dificulta tu labor, tiene que comprender que tus hermanos y amigas no son como tu. Tu puedes ver más a ya las situaciones. tus hermanos y amigas no, ellos se convencen con lo primero que ven. ¿Y sabes por que?. Porque ellos no tienen tus virtudes, y no pueden darse cuenta cuando realmente algo esta mal. Piensa lo que digo- dijo Andrew mirando mis manos.
-Cierto, tienes razón, no fue culpa de ellos equivocarse, y ahora comprendo el despresio que me hacian, yo hubiera echo lo mismo si fuera normal. Quien pensaria que yo hablo con fantasmas, leo la mente, veo el futuro, muevo las cosas con la vista y unas tantas más y sobre todo ser una mediadora. Ellos lo unico que tienen claro de mi es que soy observadora nada más.- Dije tristemente, al parecer había cometido yo el error.
-Que bueno que te des cuenta de tus errores, y si no te das cuenta no te ayudo, cuando te vallas a tu casa pídeles disculpas, por que en verdad, tu necesitas de ellos, son una parte esencial de tu vida- dijo Andrew aconsejándome
Solo atine a hacer una mueca.
-Lo se- dijo este riendo- te cuesta mucho pedir perdón, eres muy rencorosa y también orgullosa, te cuesta decir "Te quiero" y más aun "Te amo", solo conmigo has demostrado un poco pero muy poco tu lado sensible. Y te comprendo los Mediadores deben ser así, pero no siempre.. Si no que en ciertas situaciones, les ayuda a fortalecerse, pero siempre van a necesitar el cariño de alguien, no todo es tan frió como tu lo vez Emy.. No todo.. Créeme- Dijo Andrew mirándome, al parecer me conocía.
mucho.
-¿Sabes? siento como si te conociera desde mucho antes no se.. Desde que tengo uso de razón- le dije jugando con su pelo.
-Siempre eh estado contigo Emy...
-¿Como es eso?- le pregunté.
-Desde la Edad Media aproximadamente- dijo este en voz baja.
-¿Perdón?- le pregunté.
-Hay tantas cosas que no sabes pequeña.. Te conozco desde la Edad media que Su comienzo se sitúa convencionalmente en el año 476 con la caída del Imperio romano de Occidente y su fin en 1492 con el descubrimiento de América, o en 1453 con la caída del Imperio bizantino, fecha que tiene la ventaja de coincidir con la invención de la imprenta y con el fin de la Guerra de los Cien Años- Dijo este.
-Si se eso- dije riendo- y deja de explicarme así que me siento tonta. ¿Pero como es eso que te conozco de la Edad Media... Digo.. si no te has dado cuenta soy de la época contemporánea- dije haciendo una mueca graciosa.
-Mira.. antes eramos otras personas en la Edad Media, lo que pasa es que esas personas se van reencarnado en todas las épocas- Dije Andrew.
-Ya veo.. pero vamos al punto. ¿Como me conoces tu de esa época?- Pregunté.
-No querrás saber que eramos- dijo este jugueteando con las manos.
-Dime- dije riendo.
-No- respondió este.
-¡Dime!- dije Seriamente.
-Esta bien... Esta bien, pero deja pararme por que se que después me vas a querer pegar- Dijo este riendo.
-No seas ridículo, ya siéntate- Le dije.
-Te lo advertí- dijo este insistiendo.
-¡Ya, Habla!- dije sulfurada.
-Ya, En la Edad Media nosotros estábamos casados- dijo este serio.
Nos quedamos en silencio por una momento. Pero luego no pude evitar reír a carcajadas.
-Sí búrlate- dijo este un poco serio.
Ya calmada agregué.
-¿En verdad? como es la vida..- dije mirándolo.
-Por eso, bueno en parte, sientes que me conoces desde mucho antes, ese es uno de los motivos. Y también por eso eres la única capas de volver a convertirme en humano.
-Haré lo posible..- dije sonriendo.
-Gracias- Dijo Andrew..
9 de noviembre de 2011
Capitulo 27.-
Cuando llegue a la calle del Reflejo , Kate me estaba esperando en la plaza de la mano con Oliver.
-Emy, ¿supiste?- preguntó Kate.
-¿Que?- Le cuestioné.
-Hubo un cuarto asesinato, se trata de Monica Pinto- respondió Oliver.
-En ese caso es un sexto asesinato- dije bajando la mirada.
-¿¡Que!?- preguntaron Kate y Oliver al mismo tiempo.
-Annuk Machvoll tu ex novia.. Y Christofer Reyes un niño de la villa radiación- respondí apenada.
Oliver dejo caer su lata de bebida quedando inmóvil.
-¿A...a..nn..u..k?- dijo impactado- ¡Dios mio! esto es nuestra culpa por no confiar en ti Emy.. Perdóname hermana perdóname- dijo llorando abrazándome.
-Suéltame no sera tan fácil.. Me dolió mucho el desprecio de ustedes, y mas aun cuando me trataban de loca.. Los hermanos siempre confían uno al otro, y eso tu no lo hiciste. La confianza, la confianza.. Oliver se gana y eso tu lo perdiste para siempre por parte mía. Tu y Elliot son las peores personas que eh conocido.
Oliver se quedo sin palabras.
-Emily.. no seas tan cruel, asesinaron a su ex novia, y ahora era su amiga. Compréndelo- dijo Kate abrazándolo, más bien levantándolo del piso.
-¿Cruel?.. Cruel fue lo que me hicieron todos ustedes, el desprecio y la indiferencia- dije corriendo en dirección hacia mi casa.
-Emily ¡Por que apagas tu celular! ¡te voy a matar!- dijo Elliot apenas me abrió la puerta.
-Alto.. Alto.. Antes de que me empieces a regañar ¿Te acuerdas de Annuk?- le pregunte a Elliot.
-Claro la ex novia y amiga de Oliver.. Como no recordarla- dijo mi hermano caminando hacia a la cocina.
-La asesinaron- respondí secamente.
-¿Perdón?- dijo Elliot dando un paso a tras, viniendo hacia mi.
-Lo que escuchaste, el tiempo que estuve ausente del caso, y ustedes siguieron trabajando solos, ustedes no se dieron ni cuenta cuando la asesinaron junto con un niño llamado Christofer Reyes. Ustedes nunca solucionaran este caso sin mi. Pero ustedes ya perdieron mi confianza..
-Osea.. que seria el sexto asesinato Dios mio.. Perdón..- dijo Elliot sentándose en la alfombra de la mesa de centro.
-Por más que quiera perdonarlos no puedo. Lo siento- respondí.
-Haré lo posible, para que lo hagas- dijo Elliot.
-No será fácil.. Créeme- respondí.
-Cambiando el tema.. ¿como encontraron a Monica Pinto?
-En un maldito saco, con sus restos- respondió Elliot.
-La próxima seré yo- dije tranquilamente, como si fuese lo más normal del mundo.
-¿Te das cuenta que hablas estupideces?- dijo mi hermano enojado.
-¿Vez que no confías en mi? yo se porque digo las cosas.. Créeme, o si no, no te lo estaría diciendo.
-No es que no confié en ti.. Realmente.. Lo que pasa, es que no quiero abrir los ojos, quiero cegarme a la realidad, no quiero pensar que puedo llegar a perderte.
-Es exactamente lo que yo eh hecho todo este tiempo, y que ustedes no quisieron ver, la realidad.. Por que tarde o temprano las cosas pasan igual, y es mejor estar preparados.
Noté que a Elliot se le escapó una lagrima.
-No se tu, pero yo detendré esto, con o sin ayuda de ustedes, la verdad es que lo piensen ustedes me da absolutamente lo mismo en este momento.
Elliot no agregó nada, solo lloraba en silencio.
Por favor Emily- agregó a los cinco minutos después- sal de este caso.. Te estas haciendo daño a ti misma- dijo Elliot mirando hacia abajo.
-Que clase de policía eres, no me pidas eso por que no lo haré. Y deja de llorar eres un cobarde enfrenta las consecuencias es lo que te toco vivir, llorar no soluciona nada.
-Solo trataba de protegerte- respondió este.
-En este momento no me sirve la protección de nadie, si me matan, los demonios puedes hacerlo de cualquier manera, incluso desde mis sueños- Dije caminando hacia mi habitación.
Me acosté en mi cama, a refeccionar, no dejaba de pensar en la palabras de Carias, cuando le pregunte si Guntra era el asesino y el respondió "Tu misma puedes responderte esa pregunta o también la operación fallida "2+2=3". Me sentía decepcionada de mi, al afirmar que Guntra era el asesino, solo me quería convencer de eso para vivir una vida tranquila, pero en realidad no estaban las pruebas suficientes, solo era un demonio. También por parte me sentía mal por como había tratado a mis hermanos y amigas. En parte igual era mi culpa por haber señalado a Guntra como el asesino, y convencer a todos de que lo era. Pero por otra parte les había dicho con tiempo de que en realidad el no lo era, o más bien no habían pruebas suficientes que lo inculparan como el asesino. Me sentía dividida.. Como una verdadera Mediadora..
Al instante sonó mi celular, con el tono indicando que era un mensaje.
"Animo, Mediadora. No todo es tan malo. Responde esta pregunta: ¿Quien muere en la profecía? Ahí esta la clave de todo.
No pude evitar sonreír. Por cierta parte me había alegrado el mensaje.
-Emy, ¿supiste?- preguntó Kate.
-¿Que?- Le cuestioné.
-Hubo un cuarto asesinato, se trata de Monica Pinto- respondió Oliver.
-En ese caso es un sexto asesinato- dije bajando la mirada.
-¿¡Que!?- preguntaron Kate y Oliver al mismo tiempo.
-Annuk Machvoll tu ex novia.. Y Christofer Reyes un niño de la villa radiación- respondí apenada.
Oliver dejo caer su lata de bebida quedando inmóvil.
-¿A...a..nn..u..k?- dijo impactado- ¡Dios mio! esto es nuestra culpa por no confiar en ti Emy.. Perdóname hermana perdóname- dijo llorando abrazándome.
-Suéltame no sera tan fácil.. Me dolió mucho el desprecio de ustedes, y mas aun cuando me trataban de loca.. Los hermanos siempre confían uno al otro, y eso tu no lo hiciste. La confianza, la confianza.. Oliver se gana y eso tu lo perdiste para siempre por parte mía. Tu y Elliot son las peores personas que eh conocido.
Oliver se quedo sin palabras.
-Emily.. no seas tan cruel, asesinaron a su ex novia, y ahora era su amiga. Compréndelo- dijo Kate abrazándolo, más bien levantándolo del piso.
-¿Cruel?.. Cruel fue lo que me hicieron todos ustedes, el desprecio y la indiferencia- dije corriendo en dirección hacia mi casa.
-Emily ¡Por que apagas tu celular! ¡te voy a matar!- dijo Elliot apenas me abrió la puerta.
-Alto.. Alto.. Antes de que me empieces a regañar ¿Te acuerdas de Annuk?- le pregunte a Elliot.
-Claro la ex novia y amiga de Oliver.. Como no recordarla- dijo mi hermano caminando hacia a la cocina.
-La asesinaron- respondí secamente.
-¿Perdón?- dijo Elliot dando un paso a tras, viniendo hacia mi.
-Lo que escuchaste, el tiempo que estuve ausente del caso, y ustedes siguieron trabajando solos, ustedes no se dieron ni cuenta cuando la asesinaron junto con un niño llamado Christofer Reyes. Ustedes nunca solucionaran este caso sin mi. Pero ustedes ya perdieron mi confianza..
-Osea.. que seria el sexto asesinato Dios mio.. Perdón..- dijo Elliot sentándose en la alfombra de la mesa de centro.
-Por más que quiera perdonarlos no puedo. Lo siento- respondí.
-Haré lo posible, para que lo hagas- dijo Elliot.
-No será fácil.. Créeme- respondí.
-Cambiando el tema.. ¿como encontraron a Monica Pinto?
-En un maldito saco, con sus restos- respondió Elliot.
-La próxima seré yo- dije tranquilamente, como si fuese lo más normal del mundo.
-¿Te das cuenta que hablas estupideces?- dijo mi hermano enojado.
-¿Vez que no confías en mi? yo se porque digo las cosas.. Créeme, o si no, no te lo estaría diciendo.
-No es que no confié en ti.. Realmente.. Lo que pasa, es que no quiero abrir los ojos, quiero cegarme a la realidad, no quiero pensar que puedo llegar a perderte.
-Es exactamente lo que yo eh hecho todo este tiempo, y que ustedes no quisieron ver, la realidad.. Por que tarde o temprano las cosas pasan igual, y es mejor estar preparados.
Noté que a Elliot se le escapó una lagrima.
-No se tu, pero yo detendré esto, con o sin ayuda de ustedes, la verdad es que lo piensen ustedes me da absolutamente lo mismo en este momento.
Elliot no agregó nada, solo lloraba en silencio.
Por favor Emily- agregó a los cinco minutos después- sal de este caso.. Te estas haciendo daño a ti misma- dijo Elliot mirando hacia abajo.
-Que clase de policía eres, no me pidas eso por que no lo haré. Y deja de llorar eres un cobarde enfrenta las consecuencias es lo que te toco vivir, llorar no soluciona nada.
-Solo trataba de protegerte- respondió este.
-En este momento no me sirve la protección de nadie, si me matan, los demonios puedes hacerlo de cualquier manera, incluso desde mis sueños- Dije caminando hacia mi habitación.
Me acosté en mi cama, a refeccionar, no dejaba de pensar en la palabras de Carias, cuando le pregunte si Guntra era el asesino y el respondió "Tu misma puedes responderte esa pregunta o también la operación fallida "2+2=3". Me sentía decepcionada de mi, al afirmar que Guntra era el asesino, solo me quería convencer de eso para vivir una vida tranquila, pero en realidad no estaban las pruebas suficientes, solo era un demonio. También por parte me sentía mal por como había tratado a mis hermanos y amigas. En parte igual era mi culpa por haber señalado a Guntra como el asesino, y convencer a todos de que lo era. Pero por otra parte les había dicho con tiempo de que en realidad el no lo era, o más bien no habían pruebas suficientes que lo inculparan como el asesino. Me sentía dividida.. Como una verdadera Mediadora..
Al instante sonó mi celular, con el tono indicando que era un mensaje.
"Animo, Mediadora. No todo es tan malo. Responde esta pregunta: ¿Quien muere en la profecía? Ahí esta la clave de todo.
No pude evitar sonreír. Por cierta parte me había alegrado el mensaje.
8 de noviembre de 2011
Capitulo 26.-
-¿Que pasa?- pregunté
-¡Ssssshh! tranquila no te pasara nada, pero cállate- respondió Andrew.
No me tuvo que explicar mucho. Al instante escuchamos ruidos en la casa. Y luego pasos. Me había puesto a cantar inconscientemente y Andrew me tapó la boca. Escuchamos una horrible voz grave, como si proviniera de algún monstruo.
-Maldita gente estúpida- dije.
Luego escuchamos que la voz, empezó a patearlo todo, a destruir todo lo que veía, por poco patea el mueble en que estábamos, pero por fortuna se arrepintió. Después enseguida escuchamos un horrible rugido. Después un silencio sepulcral.
Esperamos cinco minutos más. Cinco minutos que fueron eternos, tratando de no hacer ningún tipo de ruido. Pero al fin pude decir que estábamos solos, que no había peligro . Era algo que no podía decir porque, solo lo sentía.
Salimos. Ambos temblábamos de frió. Cuando de repente salí bruscamente y había unos alambres con espinas así consiguiendo que se me abriera una gran herida.
-Genial, ahora me quedare sin pierna nuevamente- dije riendo sarcásticamente.
-Uh.. Esta bien fea la herida ¿te duele mucho? a ti solamente de te ocurre venir con este frió de pantalones cortos, que especial eres- Dijo Andrew con sarcasmo atándome un pedazo de su ramera que había cortado para amarrarme a mi pierna.
-Ya déjame- dije riendo- vine así porque me sentía cómoda, y además no me duele.. Los cobardes lloran por estas cosas.
-Hay Emy..- Dijo Andrew suspirando- ten ponte mi abrigo mejor, antes de que mueras congelada- dijo riendo.
Mire hacia la pared. Las llaves estaban caída. Me acerque para agrupar las llaves que habían caído al suelo.
-¿Que pasa?- preguntó Andrew.
-Falta una llave- respondí.
-Supongo, que a eso solamente vino.. A recuperar las llaves de su casa.
Escuchamos golpes en la puerta. Golpes violentos que nos hicieron saltar de miedo.-
-¡Señorita Emily! salga de ahí ¡Abre! ¡Abre!- dijo el chófer.
-¡Te eh dicho que to te matas en lo que no te importa!- dije abriéndole a puerta.
Pero al parecer, no era el chófer, era un horrible espécimen que había sabido imitar muy bien la voy de Gastón.
-¡Te voy a matar maldita!- dijo el monstruo lanzándome al piso, y no me puede defender debido a la herida de mi pierna.
-¡Que quieres de mi déjame en paz maldito! Andrew ayúdame- grité.
-No te atrevas a tocarle ningún pelo más o sabrás realmente quien soy- dijo Andrew desafiando al sujeto.
-Nos volvemos a ver Andrew-Dijo el sujeto escupiendo al piso.
El sujeto tomo a Andrew y lo azotó contra la pared, dejándolo casi inconsciente.
-Eso no te lo permitiré- dije tomando una cuchilla que estaba a mi costado.
-¡Alto Emily! dijo Andrew poniéndose de pie- recuerda que tu no puedes enfrentar demonios, tu solo los identificas- dijo gritando.
-Así es- dijo el sujeto, por lo tanto tu vida acabo en este preciso instante- dijo lanzándose encima mio tratando de enterrarme tu navaja en el cuello.
-¡Alto!- Gritó Andrew empujándolo hacia la pared, consiguiendo enterrarle su propia navaja en el corazón y así el sujeto cayo muerto en el piso.
-¿Mu..mu..rió? dije tartamudeando.
-Sí este era un demonio muy fácil de derrotar, pero era muy perseverante- respondió.
-A todo esto.. ¿Como dijiste que no me podías ayudar en mis misiones, si tu lo mataste?
-Lo que pasa, es que como estaba en frente a el, los héroes se pueden enfrentar a los demonios de frente, ya que como sabes esto es una lucha entre el bien y el mal, y en este caso yo protagonizo el bien ¿me entiendes?- dijo Andrew explicándome.
-Claro..- respondí.
-Ya ahora es mejor que salgamos de aquí- Dijo cargándome- así no puedes caminar.
-Gracias- dije sonriendo. Y nos fuimos de la escalofriante casa.
-¡Ssssshh! tranquila no te pasara nada, pero cállate- respondió Andrew.
No me tuvo que explicar mucho. Al instante escuchamos ruidos en la casa. Y luego pasos. Me había puesto a cantar inconscientemente y Andrew me tapó la boca. Escuchamos una horrible voz grave, como si proviniera de algún monstruo.
-Maldita gente estúpida- dije.
Luego escuchamos que la voz, empezó a patearlo todo, a destruir todo lo que veía, por poco patea el mueble en que estábamos, pero por fortuna se arrepintió. Después enseguida escuchamos un horrible rugido. Después un silencio sepulcral.
Esperamos cinco minutos más. Cinco minutos que fueron eternos, tratando de no hacer ningún tipo de ruido. Pero al fin pude decir que estábamos solos, que no había peligro . Era algo que no podía decir porque, solo lo sentía.
Salimos. Ambos temblábamos de frió. Cuando de repente salí bruscamente y había unos alambres con espinas así consiguiendo que se me abriera una gran herida.
-Genial, ahora me quedare sin pierna nuevamente- dije riendo sarcásticamente.
-Uh.. Esta bien fea la herida ¿te duele mucho? a ti solamente de te ocurre venir con este frió de pantalones cortos, que especial eres- Dijo Andrew con sarcasmo atándome un pedazo de su ramera que había cortado para amarrarme a mi pierna.
-Ya déjame- dije riendo- vine así porque me sentía cómoda, y además no me duele.. Los cobardes lloran por estas cosas.
-Hay Emy..- Dijo Andrew suspirando- ten ponte mi abrigo mejor, antes de que mueras congelada- dijo riendo.
Mire hacia la pared. Las llaves estaban caída. Me acerque para agrupar las llaves que habían caído al suelo.
-¿Que pasa?- preguntó Andrew.
-Falta una llave- respondí.
-Supongo, que a eso solamente vino.. A recuperar las llaves de su casa.
Escuchamos golpes en la puerta. Golpes violentos que nos hicieron saltar de miedo.-
-¡Señorita Emily! salga de ahí ¡Abre! ¡Abre!- dijo el chófer.
-¡Te eh dicho que to te matas en lo que no te importa!- dije abriéndole a puerta.
Pero al parecer, no era el chófer, era un horrible espécimen que había sabido imitar muy bien la voy de Gastón.
-¡Te voy a matar maldita!- dijo el monstruo lanzándome al piso, y no me puede defender debido a la herida de mi pierna.
-¡Que quieres de mi déjame en paz maldito! Andrew ayúdame- grité.
-No te atrevas a tocarle ningún pelo más o sabrás realmente quien soy- dijo Andrew desafiando al sujeto.
-Nos volvemos a ver Andrew-Dijo el sujeto escupiendo al piso.
El sujeto tomo a Andrew y lo azotó contra la pared, dejándolo casi inconsciente.
-Eso no te lo permitiré- dije tomando una cuchilla que estaba a mi costado.
-¡Alto Emily! dijo Andrew poniéndose de pie- recuerda que tu no puedes enfrentar demonios, tu solo los identificas- dijo gritando.
-Así es- dijo el sujeto, por lo tanto tu vida acabo en este preciso instante- dijo lanzándose encima mio tratando de enterrarme tu navaja en el cuello.
-¡Alto!- Gritó Andrew empujándolo hacia la pared, consiguiendo enterrarle su propia navaja en el corazón y así el sujeto cayo muerto en el piso.
-¿Mu..mu..rió? dije tartamudeando.
-Sí este era un demonio muy fácil de derrotar, pero era muy perseverante- respondió.
-A todo esto.. ¿Como dijiste que no me podías ayudar en mis misiones, si tu lo mataste?
-Lo que pasa, es que como estaba en frente a el, los héroes se pueden enfrentar a los demonios de frente, ya que como sabes esto es una lucha entre el bien y el mal, y en este caso yo protagonizo el bien ¿me entiendes?- dijo Andrew explicándome.
-Claro..- respondí.
-Ya ahora es mejor que salgamos de aquí- Dijo cargándome- así no puedes caminar.
-Gracias- dije sonriendo. Y nos fuimos de la escalofriante casa.
4 de noviembre de 2011
Capitulo 25.-
Lo estaba esperando en la banca de la plaza, y cuando lo vi no pude evitar sonreír.
-Hola Andrew- dije abrazándolo.
-Hola- dijo sonriéndome.
-El otro día me estabas llamando.. Perdóname, tu labor como Mediadora no me permite ayudarte.
-¿A que te refieres?- pregunté.
-Que tu al ser Mediadora, no se te permite la ayuda de nadie, tu labor es completamente individual.
-Ya veo..- respondí sin entender como había leído mi mente- una pregunta.. ¿Tu confías en mi? osea.. Más bien.. ¿Tu crees que yo estoy loca?
-No como crees.. Siempre confiare en ti, digas lo que digas, no creas nunca eso- respondió con una leve voz.
-Muchas gracias, eres lo único que tengo ahora, todos me tratan como loca.
-No te preocupes, a mi siempre me tendrás, créeme.. después te van ah tener que pedir una buena disculpa- Dijo mirando hacia arriba- Por sierto, tengo la dirección que buscabas.
-¿Como sabes que quería conseguirme la dirección?- pregunté mirándolo fijamente.
Solo gruño el ojo, lo cual no evite sonreír.
-¿Vamos?- me preguntó.
-Bueno, pero déjame llamar a el chófer- dije marcando en el teléfono- por que no me gusta caminar- respondí.
-Pero pensara que estas loca, recuerda que soy un fantasma- dijo un tanto apenado.
-En poco tiempo ya no lo seras, y poco me importa lo que piensen los demás- respondí.
-¿Y tus hermanos y amigas?- preguntó desconcertado.
-Es lo que menos me importa ahora.. En este momento mi misión es solo salvar vidas.
-Emy..hay una cosa que no te eh contado- dijo agachando la cabeza.
-¿Que paso?- pregunte intrigada tras escuchar la triste voz de Andrew.
-En el tiempo que te sacaron del caso.. Asesinaron a dos niños más- respondió con la voz un tanto quebrada.
-¿Que..?- dije casi sin respirar.
-Annuk machvoll y Christofer Reyes- dijo suspirando.
-Así.. que esta vez también fue un niño.. Y también Annuk la ex novia de mi hermano, se va a querer morir, por qué aunque a ya terminado con ella eran muy buenos amigos- respondí con una lagrima en el rostro- ¡Soy una imbécil! ¡como pude cegarme todo este tiempo!, mientras yo era feliz este maldito seguía matando a niños.. Soy una inconsciente..
-Calma.. No es culpa tuya, si no que de la policía, en parte por no permitir que les ayudaras y por otra por convencerse de que Melquiades era el asesino.
-No saco nada con llorar como una estúpida- dije parándome de la banca de la plaza- vamos- dije al ver que Gastón, mi chófer nos estaba esperando en la esquina de la estatua.
-Nada más quiero que estén conscientes de esto- dijo el chófer- estoy en desacuerdo en que sigas en este caso.
-Sí, Gastón, como tu digas. Ahora maneja callado- dije cruzándome de brazos haciendo una mueca.
-Es por la villa Refracción por la Derecha.
-Por la villa Refracción por la derecha Gastón- dije haciéndole una seña por donde ir.
-¿Como se la consiguió niña Emily?- preguntó enojado.
-Eso a ti no te importa, tu maneja solamente.
-Andrew muchas gracias por ayudarme en esto enserio- dije mirando hacia arriba.
-De nada, cuando quieras- dijo sonriendo levemente.
-Niña Emily, usted a perdido la cordura, deje de hablar sola por favor- dijo El chófer desconcertado.
-¡Cállate es mi vida!- respondí enojada tras el comentario del chófer.
Andrew rió, al parecer le había resultado gracioso.
-¡Aquí es! dijo Andy señalando una gran casa solitaria de dos pisos que se encontraba en medio del bosque. El ambiente era extrañamente tenebroso. El sol ya se había ocultado.
-No creo que encuentres nada ahí- intento desanimar el chófer.
-Tu solamente no le quites la vista a la casa- le ordené- Si me vez salir corriendo y un hombre tras mio con un cuchillo, enciende el coche- dije riendo.
-No es gracioso- Respondió el chófer, sabía que yo tenía mucha imaginación.
-Esto no me gusta nada- Dije en cuando vimos de más cerca la casa.
-Que mas miedo te puede dar, si hasta estas con un fantasma al lado tuyo- Dijo Andrew tomandome de la mano.
-¿Que---e- fantasma?- dije tartamudeando.
-Yo, quien más- respondió.
No evitamos reír a carcajadas.
-Nunca te pregunté.. Andrew ¿Tu eres un héroe?- le pregunté mirándolo de reojo.
-Puedes responderte tu eso- respondió.
-Te tengo confianza..- Dije mirando mi mano.
-Lo soy.. Soy un héroe, un.. Salvador- respondió a mi pregunta.
Solo sonreí.
Ya me veía ingresando a la casa sola, de todos modos ya iba preparada mentalmente, ya estaba empezando a aceptar mi condición de Mediadora.
La casa no era pequeña, era de dos pisos, con varias ventanas sin vidrio. El viento mecía las cortinas del interior en forma siniestra.
-Al menos sabemos que Guntra vive solo- deduje- nadie puede vivir en estas escasas condiciones.
A cada paso, aumentaba esa sensación que siempre experimentaba, un sentimiento que me ayudaba a detectar ciertos peligros invisibles que yo solo podía detectar.
Ahora por culpa del agresivo viento, teníamos que casi gritarnos.
-Emily abre los ojos, soporta el miedo- dijo Andrew.
-Prométeme que no veré cinco cráneos de los niños muertos.
Andrew soltó una leve risa.
-No creo que Melquiades sea tan tonto para dejar todo a la vista y que la policía lo encuentre.
Miré mi reloj eran las once de la mañana pero parecía como si fuesen las siete de la tarde.
-¿Por estará tan oscuro? raro.. - dijo Andrew mirando hacia todos lados.
-No se.. pero no me gusta para nada esto- dije presionando las manos.
-Tranquila estando conmigo nada te puede pasar- dijo posando su mano en mi hombro.
-Esto es raro contigo demuestro mi miedo.. Pero con los demás no.- Dije mirándolo.
-Es por que soy un héroe, a los héroes les tienes confianza y por lo tanto demuestras todos tus sentimiento, soy la única "persona" capaz de leerte tu mente y saber lo que sientes- dijo sonriendo.
-Ya veo..- Atiné a decir.
-Yo reviso arriba y tu abajo- dijo Andrew subiendo las escaleras.
-Una pregunta Emy.. ¿Que estamos buscando en realidad?- Preguntó Andrew.
-Algo para comprobar realmente quien es Guntra- respondí.
Nos separamos. revise abajo, habían dos habitaciones, no había ningún detalle que me llamase la atención, había si varios documentos de la empresa de fotografía , pero nada acusaba a Guntra como el asesino.
Ahora comprendí por qué la policía estaba tan desconcertada.
De tanto revisar, ropas, cajones, el baño ect.. di con una idea.
-¡Ya se!
Me levante y subí a buscar a Andrew al segundo piso, y me encontré que Andy estaba revisando el refrigerador.
-Que asco. Esta mantequilla debe tener años aquí, mírala Emy esta verde- dijo haciendo una mueca.
-Claro. ¿Y saber por qué? Porque Guntra no vive aquí.
-¿Tu crees?- Me cuestionó Andrew.
-Claro un infeliz como este, no puede tener "muñequitas de porcelana". Osea.. No es su estilo.
Miré hacia la puerta y estaba una extraña llave en forma de león.
-Yo había visto antes esas llaves- dije observándolas de más cerca.
-¡Como! ¿Donde?
-Fue cuando un demonio se me presentó en el baño del colegio, el las llevaba en sus manos y las dejo caer frente a mi.
-Comprendo- Dijo Andrew.
Andrew corrió hacia la ventana, al parecer había presentido algo. A la distancia vio una figura de grandes alas puntiagudas volando hacia la casa.
El verdadero terror.
Andrew me empujo de bajo de un viejo mueble , metiéndose el conmigo tapándome la boca para que no dijera ninguna palabra.
-Hola Andrew- dije abrazándolo.
-Hola- dijo sonriéndome.
-El otro día me estabas llamando.. Perdóname, tu labor como Mediadora no me permite ayudarte.
-¿A que te refieres?- pregunté.
-Que tu al ser Mediadora, no se te permite la ayuda de nadie, tu labor es completamente individual.
-Ya veo..- respondí sin entender como había leído mi mente- una pregunta.. ¿Tu confías en mi? osea.. Más bien.. ¿Tu crees que yo estoy loca?
-No como crees.. Siempre confiare en ti, digas lo que digas, no creas nunca eso- respondió con una leve voz.
-Muchas gracias, eres lo único que tengo ahora, todos me tratan como loca.
-No te preocupes, a mi siempre me tendrás, créeme.. después te van ah tener que pedir una buena disculpa- Dijo mirando hacia arriba- Por sierto, tengo la dirección que buscabas.
-¿Como sabes que quería conseguirme la dirección?- pregunté mirándolo fijamente.
Solo gruño el ojo, lo cual no evite sonreír.
-¿Vamos?- me preguntó.
-Bueno, pero déjame llamar a el chófer- dije marcando en el teléfono- por que no me gusta caminar- respondí.
-Pero pensara que estas loca, recuerda que soy un fantasma- dijo un tanto apenado.
-En poco tiempo ya no lo seras, y poco me importa lo que piensen los demás- respondí.
-¿Y tus hermanos y amigas?- preguntó desconcertado.
-Es lo que menos me importa ahora.. En este momento mi misión es solo salvar vidas.
-Emy..hay una cosa que no te eh contado- dijo agachando la cabeza.
-¿Que paso?- pregunte intrigada tras escuchar la triste voz de Andrew.
-En el tiempo que te sacaron del caso.. Asesinaron a dos niños más- respondió con la voz un tanto quebrada.
-¿Que..?- dije casi sin respirar.
-Annuk machvoll y Christofer Reyes- dijo suspirando.
-Así.. que esta vez también fue un niño.. Y también Annuk la ex novia de mi hermano, se va a querer morir, por qué aunque a ya terminado con ella eran muy buenos amigos- respondí con una lagrima en el rostro- ¡Soy una imbécil! ¡como pude cegarme todo este tiempo!, mientras yo era feliz este maldito seguía matando a niños.. Soy una inconsciente..
-Calma.. No es culpa tuya, si no que de la policía, en parte por no permitir que les ayudaras y por otra por convencerse de que Melquiades era el asesino.
-No saco nada con llorar como una estúpida- dije parándome de la banca de la plaza- vamos- dije al ver que Gastón, mi chófer nos estaba esperando en la esquina de la estatua.
-Nada más quiero que estén conscientes de esto- dijo el chófer- estoy en desacuerdo en que sigas en este caso.
-Sí, Gastón, como tu digas. Ahora maneja callado- dije cruzándome de brazos haciendo una mueca.
-Es por la villa Refracción por la Derecha.
-Por la villa Refracción por la derecha Gastón- dije haciéndole una seña por donde ir.
-¿Como se la consiguió niña Emily?- preguntó enojado.
-Eso a ti no te importa, tu maneja solamente.
-Andrew muchas gracias por ayudarme en esto enserio- dije mirando hacia arriba.
-De nada, cuando quieras- dijo sonriendo levemente.
-Niña Emily, usted a perdido la cordura, deje de hablar sola por favor- dijo El chófer desconcertado.
-¡Cállate es mi vida!- respondí enojada tras el comentario del chófer.
Andrew rió, al parecer le había resultado gracioso.
-¡Aquí es! dijo Andy señalando una gran casa solitaria de dos pisos que se encontraba en medio del bosque. El ambiente era extrañamente tenebroso. El sol ya se había ocultado.
-No creo que encuentres nada ahí- intento desanimar el chófer.
-Tu solamente no le quites la vista a la casa- le ordené- Si me vez salir corriendo y un hombre tras mio con un cuchillo, enciende el coche- dije riendo.
-No es gracioso- Respondió el chófer, sabía que yo tenía mucha imaginación.
-Esto no me gusta nada- Dije en cuando vimos de más cerca la casa.
-Que mas miedo te puede dar, si hasta estas con un fantasma al lado tuyo- Dijo Andrew tomandome de la mano.
-¿Que---e- fantasma?- dije tartamudeando.
-Yo, quien más- respondió.
No evitamos reír a carcajadas.
-Nunca te pregunté.. Andrew ¿Tu eres un héroe?- le pregunté mirándolo de reojo.
-Puedes responderte tu eso- respondió.
-Te tengo confianza..- Dije mirando mi mano.
-Lo soy.. Soy un héroe, un.. Salvador- respondió a mi pregunta.
Solo sonreí.
Ya me veía ingresando a la casa sola, de todos modos ya iba preparada mentalmente, ya estaba empezando a aceptar mi condición de Mediadora.
La casa no era pequeña, era de dos pisos, con varias ventanas sin vidrio. El viento mecía las cortinas del interior en forma siniestra.
-Al menos sabemos que Guntra vive solo- deduje- nadie puede vivir en estas escasas condiciones.
A cada paso, aumentaba esa sensación que siempre experimentaba, un sentimiento que me ayudaba a detectar ciertos peligros invisibles que yo solo podía detectar.
Ahora por culpa del agresivo viento, teníamos que casi gritarnos.
-Emily abre los ojos, soporta el miedo- dijo Andrew.
-Prométeme que no veré cinco cráneos de los niños muertos.
Andrew soltó una leve risa.
-No creo que Melquiades sea tan tonto para dejar todo a la vista y que la policía lo encuentre.
Miré mi reloj eran las once de la mañana pero parecía como si fuesen las siete de la tarde.
-¿Por estará tan oscuro? raro.. - dijo Andrew mirando hacia todos lados.
-No se.. pero no me gusta para nada esto- dije presionando las manos.
-Tranquila estando conmigo nada te puede pasar- dijo posando su mano en mi hombro.
-Esto es raro contigo demuestro mi miedo.. Pero con los demás no.- Dije mirándolo.
-Es por que soy un héroe, a los héroes les tienes confianza y por lo tanto demuestras todos tus sentimiento, soy la única "persona" capaz de leerte tu mente y saber lo que sientes- dijo sonriendo.
-Ya veo..- Atiné a decir.
-Yo reviso arriba y tu abajo- dijo Andrew subiendo las escaleras.
-Una pregunta Emy.. ¿Que estamos buscando en realidad?- Preguntó Andrew.
-Algo para comprobar realmente quien es Guntra- respondí.
Nos separamos. revise abajo, habían dos habitaciones, no había ningún detalle que me llamase la atención, había si varios documentos de la empresa de fotografía , pero nada acusaba a Guntra como el asesino.
Ahora comprendí por qué la policía estaba tan desconcertada.
De tanto revisar, ropas, cajones, el baño ect.. di con una idea.
-¡Ya se!
Me levante y subí a buscar a Andrew al segundo piso, y me encontré que Andy estaba revisando el refrigerador.
-Que asco. Esta mantequilla debe tener años aquí, mírala Emy esta verde- dijo haciendo una mueca.
-Claro. ¿Y saber por qué? Porque Guntra no vive aquí.
-¿Tu crees?- Me cuestionó Andrew.
-Claro un infeliz como este, no puede tener "muñequitas de porcelana". Osea.. No es su estilo.
Miré hacia la puerta y estaba una extraña llave en forma de león.
-Yo había visto antes esas llaves- dije observándolas de más cerca.
-¡Como! ¿Donde?
-Fue cuando un demonio se me presentó en el baño del colegio, el las llevaba en sus manos y las dejo caer frente a mi.
-Comprendo- Dijo Andrew.
Andrew corrió hacia la ventana, al parecer había presentido algo. A la distancia vio una figura de grandes alas puntiagudas volando hacia la casa.
El verdadero terror.
Andrew me empujo de bajo de un viejo mueble , metiéndose el conmigo tapándome la boca para que no dijera ninguna palabra.
Capitulo 24.-
-Emily.. ven aquí- me llamo mi hermano Elliot desde el comedor.
Fui para a ya, desanimada.
-¿Pasa algo?- pregunté
-Siéntate- dijo serio.
-Elliot.. Perdóname..
-¿Por lo de ayer?- dijo acariciándome el pelo.
-Por todo.. Se que eh estado muy rara, pero no es culpa mía.. Eso te lo puedo asegurar.
-Emily.. te voy a confesar, que cuando huimos de la casa de los tíos , y nos perdimos en el desierto.. Me eh estado preguntado inquietamente ¿Por que no huí solo? ¿Que necesidad tenia de cargar un bebé que me daría muchos problemas?
Entendí enseguida.. Era una indirecta que me llego al fondo de mi corazón. Elliot perdió su niñez por cuidarme a mi. El había trabajado desde adolescente. Se había preocupado de mi bienestar junto con mi hermano Oliver. Y yo a cambio le daba puros problemas y dolores de cabeza.
-Nos vemos en la tarde- Dije poniéndome de pie tristemente.
-Emily Elizabeth..- dijo Elliot con la voz quebrada- No quiero que sigas metida en este caso. Es una orden.
Me detuve por un momento al escuchar esas palabras.. Me gire y vi que me hermano tenia sus manos sobre su cabeza, al parecer estaba llorando.
No quiso mirarme, le habían dolido las palabras que acababa de decir.Nunca antes me había dicho algo así, nunca antes me había sacado en cara de que era una carga para el. Nunca durante esos quince años, los ojos de el lobo negro habían vuelto a su memoria con tanta claridad.
Salí de casa.. Dejando el desayudo intacto.
Fui para a ya, desanimada.
-¿Pasa algo?- pregunté
-Siéntate- dijo serio.
-Elliot.. Perdóname..
-¿Por lo de ayer?- dijo acariciándome el pelo.
-Por todo.. Se que eh estado muy rara, pero no es culpa mía.. Eso te lo puedo asegurar.
-Emily.. te voy a confesar, que cuando huimos de la casa de los tíos , y nos perdimos en el desierto.. Me eh estado preguntado inquietamente ¿Por que no huí solo? ¿Que necesidad tenia de cargar un bebé que me daría muchos problemas?
Entendí enseguida.. Era una indirecta que me llego al fondo de mi corazón. Elliot perdió su niñez por cuidarme a mi. El había trabajado desde adolescente. Se había preocupado de mi bienestar junto con mi hermano Oliver. Y yo a cambio le daba puros problemas y dolores de cabeza.
-Nos vemos en la tarde- Dije poniéndome de pie tristemente.
-Emily Elizabeth..- dijo Elliot con la voz quebrada- No quiero que sigas metida en este caso. Es una orden.
Me detuve por un momento al escuchar esas palabras.. Me gire y vi que me hermano tenia sus manos sobre su cabeza, al parecer estaba llorando.
No quiso mirarme, le habían dolido las palabras que acababa de decir.Nunca antes me había dicho algo así, nunca antes me había sacado en cara de que era una carga para el. Nunca durante esos quince años, los ojos de el lobo negro habían vuelto a su memoria con tanta claridad.
Salí de casa.. Dejando el desayudo intacto.
3 de noviembre de 2011
Capitulo 23.-
-¡Comisario! ¡me asustó!- gritó Elliot.
-¿Que pasa Detective? ¿va ah algún lado?
-Sí venga conmigo.
El comisario lo siguió. Cruzaron la calle y llegaron a la plaza. Ahí se encontraba Kris y su papá, ambos en pijama. El señor Jenson aplicaba un algodón de alcohol por mi cara. Sentado a mi lado.
-¡Gracias a Dios!- dijo el comisario.
Elliot tomó un suéter y lo puso en mis hombros.
-¿A donde estabas?- preguntó enfurecido.
-Salí a dar un vuelta- respondí.
Elliot me pegó una cachetada la cual sorprendió a todos.
-Perdóname- susurré.
Elliot no respondió. solo se sentó a mi lado. Agobiado.
-¿Que fue lo que paso?- preguntó el comisario.
-Mi papá descubrió a Emily por casualidad durmiendo a los pies de la estatua.
-¿Y que hacia ahí?- preguntó el comisario.
-Les dije que salí a dar una vuelta, me golpee y perdí el conocimiento.
-¿Ah que hora saliste a dar "una vuelta"?- me cuestiono Elliot.
-Como a las 23:00 PM- mentí.
Creo que te has vuelto loca.. Necesitas ayuda medica, te sacare del caso te estas involucrando mucho- Dijo Elliot desconcertado.
-Pe-pe-ro..- Dije con la voz entrecortada sin creer lo que había escuchado- Tu no me puedes prohibir eso..
-Soy tu hermano mayor, y te prohíbo lo que se me de la gana- Dijo Elliot con una mirada desafiante.
-Perdónenme todos.. por favor..- suplique.
-Es mejor que vallamos todos a descansar- dijo el comisario.
-Hasta pronto comisario. Vamos Emily Elizabeth subamos- dijo secamente, odiaba que me nombrara por mi nombre completo.. No se era como una estaca en mi corazón, cuando el lo decía.. Por que significaba que había superado sus limites.
-Creo que renunciare a la banda- dijo rompiendo el silencio.
-No dejes tus ocupaciones, enserio no lo volveré a hacer.
-¡No puede tratarte toda la vida, como una niña de cinco años! ¡Entiende!- dijo golpeando una de las paredes de la casa.
Me enfado que me hiciera sentir como si nunca hubiese crecido, como si el tuviese que estar viviendo siempre por mi, como si fuera una maldita carga. Hubiera querido contarle toda la verdad para callarle la boca, pero hubiera sido aun peor por que creería que lo hubiera inventado todo, hasta mis propios amigos me miraban raro, incluso Kate y Kris que eran mis mejores amigas y siempre confiaban en mi.. Estaba empezando a sentir que cada vez me estaba quedando más sola.. Solo tenía una persona que siempre confiaba en mi, por cualquier cosa del mundo.. Andy.
Subí a mi habitación, prendí el PC. Me conecte a msn. Y sentí alivio al ver que Carias estaba en sesión.
Emily Elizabeth: ¿Tu me salvaste verdad?
Carias: ¿De que hablas Mediadora?
Emily Elizabeth: Sabes bien a lo que me refiero.
Carias: No tengo idea.
Me imagine que, quien quiera que fuera Carias, no era tan perverso después de todo como había pensado inicialmente. Verdaderamente había algo muy fuerte entre nosotros que si era capaz de enfrentar demonios y luego cargarme hasta la estatua.
Emily Elizabeth: Gracias de todos modos.
Carias: Aun no se de que me hablas Claussen.
Emily Elizabeth: Una pregunta... ¿Es verdad que cada demonio tiene algo de verdad. Que muchos de ellos han existido desde siempre? ¿Es cierto?
Carias: Tu misma puedes responderte esa pregunta.
Emily Elizabeth: ¿Todos?- Teclee ahora con miedo- ¿Los hombres lobos también?
Carias: Te sorprendería saber.. La cantidad de servidores del mal que andan en los almacenes comprando pan, asistiendo al cine, estacionando sus autos..
Emily Elizabeth: Dime la verdad.. ¿Hay alguna forma de abandonar esto?
Carias: ¿Abandonar?- cuestionó Carias.
Emily Elizabeth: No me gusta esto. Hace unos años era bastante feliz.. Aunque el miedo siempre ah estado ahí.. Aunque no se explicarme ahora.. No se es diferente.
Carias: Siempre ah sido así Claussen. Solo que ahora tiene una utilidad. Además "Lo que no te mata, te fortalece".
Emily Elizabeth: Pero antes temía por tonterías, ahora por seres sobrenaturales.
Carias: Ese es el punto, tu eres un ser en evolución, cada día te fortaleces más. Tu no eres. "Cualquier Niña". Claussen. Lo siento.
Emily Elizabeth: No quiero ser "Mediadora."
Carias: Cada uno es lo que le toca ser. Además no todo es tan malo, tu solo te has fijado en lo negativo ¿Y los héroes Claussen?
Me detuve a pensar. Se suponía que había una lucha entre el bien y el mal. Yo estaba en la mitad, mi papel era identificar demonios, no enfrentarlos. ¿Donde quedaban los héroes?.
Carias: Tu memoria, tu inteligencia y tu perspicacia te son muy útiles, Claussen. Pero a los demonios se les vence con la espada. Con ellos no se negocia.
Emily Elizabeth: ¿Y?
Carias: A los demonios los reconoces por el miedo.. ¿Como reconoces a un héroe?
Emily Elizabeth: ¿Como voy ah saberlo?- respondí un tanto molesta.
Carias: ¿Que es lo contrario al miedo?
Emily Elizabeth: El valor.
Carias: No.
Emily Elizabeth: ¡Claro que sí!
Carias: Lo contrario al miedo es la confianza. Cuando algo no te da miedo te da confianza. Ahora.. ¿Que es lo contrario al temor?
Emily Elizabeth: Que se yo... ¿El amor?- dije soltando una pequeña risa sarcástica.
Carias: Se parece, pero no. No existe palabra para ese sentimiento por eso no lo sabes. Solo alguien que ah vivido el terror puede experimentar ese opuesto. Y eso Claussen, es lo mejor de ser Mediadora.
Emily Elizabeth: No me parece algo para gritar de alegría.
Emily Elizabeth: Y la ultima cosa.. ¿Quien es Melquiades Guntra?
Carias: Respondete tu eso.. Solo creo que se que 2+2=3 Ja, ja , ja- dijo con sarcasmo y abandonó el chat.
Al instante se abrió otra pestaña.. Era Kris.
Kristen Jenson ¿Que favor querías pedirme?- Fue con la pregunta que inicio la conversación.
Emily Elizabeth: Búscame la dirección de Melquiades, Por favor.
Kristen Jenson: ¿Estas loca?, ¿Para que las quieres?.
Emily Elizabeth: Te lo imaginaras..
Kristen Jenson: Que te lo de la policía.
Emily Elizabeth: Que tonta eres, por algo te la estoy pidiendo a ti, no me la darán quieren "protegerme", creen que estoy loca.
Kristen Jenson: Bueno.. ¿Por algo será no?
Emily Elizabeth: Creo que estoy sola, Adiós, cuando se compruebe que estoy en lo cierto.. Les haré que me pidan perdón de rodillas..- Dije golpeando el PC y al instante con el golpe se apagó solo.
-¿Que pasa Detective? ¿va ah algún lado?
-Sí venga conmigo.
El comisario lo siguió. Cruzaron la calle y llegaron a la plaza. Ahí se encontraba Kris y su papá, ambos en pijama. El señor Jenson aplicaba un algodón de alcohol por mi cara. Sentado a mi lado.
-¡Gracias a Dios!- dijo el comisario.
Elliot tomó un suéter y lo puso en mis hombros.
-¿A donde estabas?- preguntó enfurecido.
-Salí a dar un vuelta- respondí.
Elliot me pegó una cachetada la cual sorprendió a todos.
-Perdóname- susurré.
Elliot no respondió. solo se sentó a mi lado. Agobiado.
-¿Que fue lo que paso?- preguntó el comisario.
-Mi papá descubrió a Emily por casualidad durmiendo a los pies de la estatua.
-¿Y que hacia ahí?- preguntó el comisario.
-Les dije que salí a dar una vuelta, me golpee y perdí el conocimiento.
-¿Ah que hora saliste a dar "una vuelta"?- me cuestiono Elliot.
-Como a las 23:00 PM- mentí.
Creo que te has vuelto loca.. Necesitas ayuda medica, te sacare del caso te estas involucrando mucho- Dijo Elliot desconcertado.
-Pe-pe-ro..- Dije con la voz entrecortada sin creer lo que había escuchado- Tu no me puedes prohibir eso..
-Soy tu hermano mayor, y te prohíbo lo que se me de la gana- Dijo Elliot con una mirada desafiante.
-Perdónenme todos.. por favor..- suplique.
-Es mejor que vallamos todos a descansar- dijo el comisario.
-Hasta pronto comisario. Vamos Emily Elizabeth subamos- dijo secamente, odiaba que me nombrara por mi nombre completo.. No se era como una estaca en mi corazón, cuando el lo decía.. Por que significaba que había superado sus limites.
-Creo que renunciare a la banda- dijo rompiendo el silencio.
-No dejes tus ocupaciones, enserio no lo volveré a hacer.
-¡No puede tratarte toda la vida, como una niña de cinco años! ¡Entiende!- dijo golpeando una de las paredes de la casa.
Me enfado que me hiciera sentir como si nunca hubiese crecido, como si el tuviese que estar viviendo siempre por mi, como si fuera una maldita carga. Hubiera querido contarle toda la verdad para callarle la boca, pero hubiera sido aun peor por que creería que lo hubiera inventado todo, hasta mis propios amigos me miraban raro, incluso Kate y Kris que eran mis mejores amigas y siempre confiaban en mi.. Estaba empezando a sentir que cada vez me estaba quedando más sola.. Solo tenía una persona que siempre confiaba en mi, por cualquier cosa del mundo.. Andy.
Subí a mi habitación, prendí el PC. Me conecte a msn. Y sentí alivio al ver que Carias estaba en sesión.
Emily Elizabeth: ¿Tu me salvaste verdad?
Carias: ¿De que hablas Mediadora?
Emily Elizabeth: Sabes bien a lo que me refiero.
Carias: No tengo idea.
Me imagine que, quien quiera que fuera Carias, no era tan perverso después de todo como había pensado inicialmente. Verdaderamente había algo muy fuerte entre nosotros que si era capaz de enfrentar demonios y luego cargarme hasta la estatua.
Emily Elizabeth: Gracias de todos modos.
Carias: Aun no se de que me hablas Claussen.
Emily Elizabeth: Una pregunta... ¿Es verdad que cada demonio tiene algo de verdad. Que muchos de ellos han existido desde siempre? ¿Es cierto?
Carias: Tu misma puedes responderte esa pregunta.
Emily Elizabeth: ¿Todos?- Teclee ahora con miedo- ¿Los hombres lobos también?
Carias: Te sorprendería saber.. La cantidad de servidores del mal que andan en los almacenes comprando pan, asistiendo al cine, estacionando sus autos..
Emily Elizabeth: Dime la verdad.. ¿Hay alguna forma de abandonar esto?
Carias: ¿Abandonar?- cuestionó Carias.
Emily Elizabeth: No me gusta esto. Hace unos años era bastante feliz.. Aunque el miedo siempre ah estado ahí.. Aunque no se explicarme ahora.. No se es diferente.
Carias: Siempre ah sido así Claussen. Solo que ahora tiene una utilidad. Además "Lo que no te mata, te fortalece".
Emily Elizabeth: Pero antes temía por tonterías, ahora por seres sobrenaturales.
Carias: Ese es el punto, tu eres un ser en evolución, cada día te fortaleces más. Tu no eres. "Cualquier Niña". Claussen. Lo siento.
Emily Elizabeth: No quiero ser "Mediadora."
Carias: Cada uno es lo que le toca ser. Además no todo es tan malo, tu solo te has fijado en lo negativo ¿Y los héroes Claussen?
Me detuve a pensar. Se suponía que había una lucha entre el bien y el mal. Yo estaba en la mitad, mi papel era identificar demonios, no enfrentarlos. ¿Donde quedaban los héroes?.
Carias: Tu memoria, tu inteligencia y tu perspicacia te son muy útiles, Claussen. Pero a los demonios se les vence con la espada. Con ellos no se negocia.
Emily Elizabeth: ¿Y?
Carias: A los demonios los reconoces por el miedo.. ¿Como reconoces a un héroe?
Emily Elizabeth: ¿Como voy ah saberlo?- respondí un tanto molesta.
Carias: ¿Que es lo contrario al miedo?
Emily Elizabeth: El valor.
Carias: No.
Emily Elizabeth: ¡Claro que sí!
Carias: Lo contrario al miedo es la confianza. Cuando algo no te da miedo te da confianza. Ahora.. ¿Que es lo contrario al temor?
Emily Elizabeth: Que se yo... ¿El amor?- dije soltando una pequeña risa sarcástica.
Carias: Se parece, pero no. No existe palabra para ese sentimiento por eso no lo sabes. Solo alguien que ah vivido el terror puede experimentar ese opuesto. Y eso Claussen, es lo mejor de ser Mediadora.
Emily Elizabeth: No me parece algo para gritar de alegría.
Emily Elizabeth: Y la ultima cosa.. ¿Quien es Melquiades Guntra?
Carias: Respondete tu eso.. Solo creo que se que 2+2=3 Ja, ja , ja- dijo con sarcasmo y abandonó el chat.
Al instante se abrió otra pestaña.. Era Kris.
Kristen Jenson ¿Que favor querías pedirme?- Fue con la pregunta que inicio la conversación.
Emily Elizabeth: Búscame la dirección de Melquiades, Por favor.
Kristen Jenson: ¿Estas loca?, ¿Para que las quieres?.
Emily Elizabeth: Te lo imaginaras..
Kristen Jenson: Que te lo de la policía.
Emily Elizabeth: Que tonta eres, por algo te la estoy pidiendo a ti, no me la darán quieren "protegerme", creen que estoy loca.
Kristen Jenson: Bueno.. ¿Por algo será no?
Emily Elizabeth: Creo que estoy sola, Adiós, cuando se compruebe que estoy en lo cierto.. Les haré que me pidan perdón de rodillas..- Dije golpeando el PC y al instante con el golpe se apagó solo.
28 de octubre de 2011
Capitulo 22.-
-¿2+2=3? ¿Desde cuando mediadora?
Me volvió ese maldito escalofríos desagradable, que sentí hace tiempo, sentía que todo volvía de nuevo..
Emily Elizabeth: ¿Que estas queriendo decir?, puedes burlarte si quieres infeliz. Sabes que atrapamos al asesino.
Carias: ¡Bravo querida mediadora! misión cumplida, celebremos que es lo que cuenta ¡cantemos, bailemos! ¿Y porqué nadie ve a tu amigo Andrew?. ¿Porqué tus amigos te miran como si estuvieras loca?
Emily Elizabeth: ¿De que hablas?- pregunté sintiendo una horrible presión en mi pecho.
Carias: Hay.. Claussen.. Claussen.. Pero que ingenua eres.. ¿De cuando dejaste de observar? piénsalo. Adiós.
-¡Emily Elizabeth! ¿estas a esta hora chateando?- se asomó Elliot por la puerta de mi habitación.
Seguí mi impulso y apague el monitor del computador para que Elliot no se enterara de mi conversación.
No- Mentí.
Elliot me miró suspicazmente. Había alcanzado a ver que estaba por mensaje con alguien.
-Emily.. Estas cambiando.. Ya hace dos semanas que estas así en los diez pasados meses eran tan normal y feliz.. ¿Que diablos pasa contigo?. Actúas muy raro.
-mmmmm.. estoy bien- dije dudosamente.
-Emily.. Parece que me vez cara de imbécil. Tengo un horrible presentimiento que estas metida en algo que escapa mi comprensión. Es como si estuvieses metida en una jaula y.. No se.. Es como no pudiese verte ni tocarte, mucho menos ayudarte a escapar.
pensé que la comparación de mi hermano era bastante cierta. Después de todo no había perdido la capacidad de leer mi mente, en mi corazón.
-De algo si estoy seguro.. Tu me estas mintiendo, y eso lo tengo bastante claro, me da pena saber que no confíes en mi después de tantas cosas que hemos pasado juntos- dijo mirándome fijamente.
No supe como contradecirlo, lo me anime a decir:
-Siempre eh confiado en ti, te quiero.
Elliot ya no agregó nada. Solo salió de mi habitación.
Comencé a marcar el numero del comisario Guillén, no me quedaría de brazos cruzados, necesitaba saber que estaba pasando en estos momentos, por qué ya en este caso.. No tenia el apoyo de mis hermanos.
-¿Hola, en que puedo ayudarte?
-Comisario dígame la verdad. ¿Como va la investigación? ¿han encontrado algo nuevo?
El comisario tardo en responder.
-Melquiades Guntra esta libre de evidencias. No hay ningún rastro de cuerpos y el sigue negando todo. Estoy ,tratando de tenerlo bajo arresto por más tiempo, pero..
Guillén no supo como continuar.
-Pero ambos sabemos que es imposible mantenerlo encerrado sin evidencias- concluí la frase.
-Sí tienes razón, pero es mejor que este tras las rejas- me respondió.
"Claro, si es en demonio"- De pronto, al ver por mi ventana a tantas personas caminar de prisa, que el mundo podía estar, poblado de demonios encubiertos, que la labor de un mediador podía ser increíblemente agotadora.
-Adiós comisario, no quiero que me hermano me escuche hablando. Nos vemos.
Ya había llegado al colegio. Debido a la conversación del comisario, el pesimismo volvió a mi como una grave infección.
-¿Terminaste lo de matemáticas?- Me apresuré a preguntar a Kris.
-Sí, pero no creo que estén buenos- respondió.
-Siempre dices lo mismo, y al final están todos buenos. Pásamelos.
Niñas, escuchen, postergaremos la clase por un momento, escogeremos a la mejor compañera.
Me apresuré, en levantar la mano.
-Oliver ven- le dije a mi hermano, mientras le explicaba unos ejercicios a una compañera.
-¿Que paso pequeña?
-Oye esta inútil de profesora que tenemos, ¿no tiene nada mejor que hacer?
-Al parecer no.. Pero yo acato ordenes solamente- Dijo mi hermano.
-Ayúdame, ve a buscar una silla y te sientas al lado mio, para no copiarle todo a Kris.
-Por favor no me digas que no los hiciste.
-No los hice, ya hacerlos- le dije apuntando mi cuaderno.
-Esta bien..- Respondió con un suspiro.
-En un "papelito" entregenme el nombre de la persona que consideren mejor compañera.
-Emily a que sales tu. dijo Kris riéndose.
-Graciosa- le respondí haciendo una mueca, Kris sabía que con mi curso no me llevaba para nada bien. Debido a la capacidad de inmadurez que tenían mis compañeras, yo solía juntarme siempre con niñas de cuatro años mayores que yo.
-¿Por quien votaras?- preguntaron al mismo tiempo Kris y Oliver.
-Nulo ¿y ustedes?- le pregunte.
-Yo como profesor no puedo votar- Dijo Oliver.
-Yo también nulo- dijo Kris.
-Niñas, María Ignacia Marquéz obtuvo la mayoría de sus votos, por lo tanto ella es la mejor compañera.
-¡Bravo! no le doy más de tres días- dije inconscientemente.
-¿¡Que!?- preguntaron alterados Kris y Oliver.
-Perdón, no se por qué dije eso- respondí confusa.
En ese preciso momento sonó mi celular, con el especial timbre, indicando que se trataba de un mensaje.
"bravo mediadora, por fin abres lo ojos y te das cuenta de que la realidad es un sueño, y el sueño la realidad. Ella es la próxima."
Mi mente se nublo, mi corazón latía rápido y sentía que en cualquier momento se iba a pasar. No me lograba explicar como había deducido ese calculo tan rapido, eso me llevo a comprobar que esto seguía en pie..
-Me voy- les dije.
-¿Que? ¿Perdón? ¿Escuche bien?- preguntó mi hermano en tono irónico.
No lo quise escuchar, y me esfume por la puerta de la sala como un rayo.
-Andrew.. te necesito aquí conmigo- susurre para mi misma.
Me fui a caminar más bien a correr sin rumbo alguno hasta que di con un bosque. Mí respiración se agitó. Comprendí al instante de lo que se trataba, pero no podía estar segura. No hasta..
Mis ojos se encontraban con otros que ya no me resultaban ajenos. Estaban inyectados de sangre.. Un demonio más.. Suena ya tan obvio mencionar eso. "¿Qué le pasa a este maldito?"-. Me pregunté, anticipando el, que poco a poco comenzaba a fluir por mi interior. "¿Porqué me molesta?". El hombre del abrigo no dejaba de mirarme. Y tampoco yo quería apartar la vista. Una pequeña guerra de aguante.
"El problema no es tener miedo, si no que hacer al respecto"- pensé.
Estaba esperando que el hombre viniera a mi encuentro, en vez de lo que yo temía: Que huyera y me impidiera terminar esto de una vez y por todas.
Tal como pensé, el sujeto estaba huyendo, y decidí ir a su encuentro.
"Bravo mediadora. ¿Y se puede saber que harás cuando lo alcances? ¿Tal vez cruzaras los dedos para evitar que te ataque?. Suerte."
Sentía que me acompañaba esa voz, ahora no tan solo me mandaba mensajes, si no que me los trasmitía en la mente.
"Lo que te hubiera servido de algo sería dar una leída a cierto libro olvidado querida mediadora."
Tenia yo tanto tiempo ese libro, y nunca se me ocurrió leerlo. Tal vez ahí estaba la clave de todo, pero no me importaba.
¿Que estoy haciendo? ¿estoy enfrentado un demonio así como así?- me cuestione- Que daría para que estuvieras aquí Andy.- susurre.
Iba en la mitad del recorrido por donde había pasado el sujeto, no había rastro de el ¿Y si era una trampa? ¿Dios mio.. y si no encuentro la salida?
El corazón comenzó a golpearme el pecho con fuerza. La adrenalina me intoxicaba la sangre. Me sentí mareada. El miedo me amenazaba.
De pronto, en el silencio, mi celular me traicionó. Mi timbre sonó dos veces. Lo calle tan pronto como pude. Era un mensaje.
"Créeme, Mediadora esta es una de esas veces, en las que es mejor escapar."
Escuche un gruñido a mis espaldas. Una de tantas pesadillas vuelta realidad. Conocía perfectamente ese tipo de gruñido, había formado parte de mis terrores internos desde mi más "tierna infancia", el gruñido se desplazó a mi izquierda con una velocidad impresionante.
"Esto no esta pasando"- me dije- "Voy a despertar en mi cama como siempre, este es un sueño". Pero el frío, los temblores, las palpitaciones.. Todo real. Tenia que salir de ahí cuanto antes.
Caminé a través de la pared sin despegarme de ella, a pesar de no ver absolutamente nada. Los brutales jadeos eran cada vez más cercanos pero podía percibir que venían ahora solo de una dirección.
Caminé poco a poco, tratando de no hacer ruido.
"Andrew, ven a buscarme.. Por lo que más quieras y sácame de aquí.. Por favor"- Se me ocurrió decir en susurro, sin dejar de desplazarme.
Poco a poco la vista se me comenzó a aclarar. De pronto pude ver de nuevo la luz provenía de una fogata en una habitación. La habitación se encontraba sucia de manchas marrones que identifique como sangre seca. Y junto a la fogata el horror de un perro descuartizado, sin piel, los ojos aun brillantes. Se notaba que lo habían matado hace poco, había una gran cantidad de huesos.
"No debo desmayarme.. Tengo que salvar mi vida".
Un inconfundible ruido de un cuadrúpedo acercándose a toda velocidad.
No quise voltear. Eche a correr abandonando del sitio, aprovechando la escasa luz para no chocar contra las paredes. El maldito perro iba corriendo tras mi. Cada vez menos luz, hasta que todo frente a mis ojos se volvió negro.
"Esto es el terror"- me dije- me arrinconé y esperé, a ciegas el golpe final.
Un desgarrador aullido. Un torrente de lagrimas se aglomeró en mis ojos, luego una garrafa de viento.
Apenas sentí cuando mi cabeza golpeó contra el suelo.
Me volvió ese maldito escalofríos desagradable, que sentí hace tiempo, sentía que todo volvía de nuevo..
Emily Elizabeth: ¿Que estas queriendo decir?, puedes burlarte si quieres infeliz. Sabes que atrapamos al asesino.
Carias: ¡Bravo querida mediadora! misión cumplida, celebremos que es lo que cuenta ¡cantemos, bailemos! ¿Y porqué nadie ve a tu amigo Andrew?. ¿Porqué tus amigos te miran como si estuvieras loca?
Emily Elizabeth: ¿De que hablas?- pregunté sintiendo una horrible presión en mi pecho.
Carias: Hay.. Claussen.. Claussen.. Pero que ingenua eres.. ¿De cuando dejaste de observar? piénsalo. Adiós.
-¡Emily Elizabeth! ¿estas a esta hora chateando?- se asomó Elliot por la puerta de mi habitación.
Seguí mi impulso y apague el monitor del computador para que Elliot no se enterara de mi conversación.
No- Mentí.
Elliot me miró suspicazmente. Había alcanzado a ver que estaba por mensaje con alguien.
-Emily.. Estas cambiando.. Ya hace dos semanas que estas así en los diez pasados meses eran tan normal y feliz.. ¿Que diablos pasa contigo?. Actúas muy raro.
-mmmmm.. estoy bien- dije dudosamente.
-Emily.. Parece que me vez cara de imbécil. Tengo un horrible presentimiento que estas metida en algo que escapa mi comprensión. Es como si estuvieses metida en una jaula y.. No se.. Es como no pudiese verte ni tocarte, mucho menos ayudarte a escapar.
pensé que la comparación de mi hermano era bastante cierta. Después de todo no había perdido la capacidad de leer mi mente, en mi corazón.
-De algo si estoy seguro.. Tu me estas mintiendo, y eso lo tengo bastante claro, me da pena saber que no confíes en mi después de tantas cosas que hemos pasado juntos- dijo mirándome fijamente.
No supe como contradecirlo, lo me anime a decir:
-Siempre eh confiado en ti, te quiero.
Elliot ya no agregó nada. Solo salió de mi habitación.
Comencé a marcar el numero del comisario Guillén, no me quedaría de brazos cruzados, necesitaba saber que estaba pasando en estos momentos, por qué ya en este caso.. No tenia el apoyo de mis hermanos.
-¿Hola, en que puedo ayudarte?
-Comisario dígame la verdad. ¿Como va la investigación? ¿han encontrado algo nuevo?
El comisario tardo en responder.
-Melquiades Guntra esta libre de evidencias. No hay ningún rastro de cuerpos y el sigue negando todo. Estoy ,tratando de tenerlo bajo arresto por más tiempo, pero..
Guillén no supo como continuar.
-Pero ambos sabemos que es imposible mantenerlo encerrado sin evidencias- concluí la frase.
-Sí tienes razón, pero es mejor que este tras las rejas- me respondió.
"Claro, si es en demonio"- De pronto, al ver por mi ventana a tantas personas caminar de prisa, que el mundo podía estar, poblado de demonios encubiertos, que la labor de un mediador podía ser increíblemente agotadora.
-Adiós comisario, no quiero que me hermano me escuche hablando. Nos vemos.
Ya había llegado al colegio. Debido a la conversación del comisario, el pesimismo volvió a mi como una grave infección.
-¿Terminaste lo de matemáticas?- Me apresuré a preguntar a Kris.
-Sí, pero no creo que estén buenos- respondió.
-Siempre dices lo mismo, y al final están todos buenos. Pásamelos.
Niñas, escuchen, postergaremos la clase por un momento, escogeremos a la mejor compañera.
Me apresuré, en levantar la mano.
-Oliver ven- le dije a mi hermano, mientras le explicaba unos ejercicios a una compañera.
-¿Que paso pequeña?
-Oye esta inútil de profesora que tenemos, ¿no tiene nada mejor que hacer?
-Al parecer no.. Pero yo acato ordenes solamente- Dijo mi hermano.
-Ayúdame, ve a buscar una silla y te sientas al lado mio, para no copiarle todo a Kris.
-Por favor no me digas que no los hiciste.
-No los hice, ya hacerlos- le dije apuntando mi cuaderno.
-Esta bien..- Respondió con un suspiro.
-En un "papelito" entregenme el nombre de la persona que consideren mejor compañera.
-Emily a que sales tu. dijo Kris riéndose.
-Graciosa- le respondí haciendo una mueca, Kris sabía que con mi curso no me llevaba para nada bien. Debido a la capacidad de inmadurez que tenían mis compañeras, yo solía juntarme siempre con niñas de cuatro años mayores que yo.
-¿Por quien votaras?- preguntaron al mismo tiempo Kris y Oliver.
-Nulo ¿y ustedes?- le pregunte.
-Yo como profesor no puedo votar- Dijo Oliver.
-Yo también nulo- dijo Kris.
-Niñas, María Ignacia Marquéz obtuvo la mayoría de sus votos, por lo tanto ella es la mejor compañera.
-¡Bravo! no le doy más de tres días- dije inconscientemente.
-¿¡Que!?- preguntaron alterados Kris y Oliver.
-Perdón, no se por qué dije eso- respondí confusa.
En ese preciso momento sonó mi celular, con el especial timbre, indicando que se trataba de un mensaje.
"bravo mediadora, por fin abres lo ojos y te das cuenta de que la realidad es un sueño, y el sueño la realidad. Ella es la próxima."
Mi mente se nublo, mi corazón latía rápido y sentía que en cualquier momento se iba a pasar. No me lograba explicar como había deducido ese calculo tan rapido, eso me llevo a comprobar que esto seguía en pie..
-Me voy- les dije.
-¿Que? ¿Perdón? ¿Escuche bien?- preguntó mi hermano en tono irónico.
No lo quise escuchar, y me esfume por la puerta de la sala como un rayo.
-Andrew.. te necesito aquí conmigo- susurre para mi misma.
Me fui a caminar más bien a correr sin rumbo alguno hasta que di con un bosque. Mí respiración se agitó. Comprendí al instante de lo que se trataba, pero no podía estar segura. No hasta..
Mis ojos se encontraban con otros que ya no me resultaban ajenos. Estaban inyectados de sangre.. Un demonio más.. Suena ya tan obvio mencionar eso. "¿Qué le pasa a este maldito?"-. Me pregunté, anticipando el, que poco a poco comenzaba a fluir por mi interior. "¿Porqué me molesta?". El hombre del abrigo no dejaba de mirarme. Y tampoco yo quería apartar la vista. Una pequeña guerra de aguante.
"El problema no es tener miedo, si no que hacer al respecto"- pensé.
Estaba esperando que el hombre viniera a mi encuentro, en vez de lo que yo temía: Que huyera y me impidiera terminar esto de una vez y por todas.
Tal como pensé, el sujeto estaba huyendo, y decidí ir a su encuentro.
"Bravo mediadora. ¿Y se puede saber que harás cuando lo alcances? ¿Tal vez cruzaras los dedos para evitar que te ataque?. Suerte."
Sentía que me acompañaba esa voz, ahora no tan solo me mandaba mensajes, si no que me los trasmitía en la mente.
"Lo que te hubiera servido de algo sería dar una leída a cierto libro olvidado querida mediadora."
Tenia yo tanto tiempo ese libro, y nunca se me ocurrió leerlo. Tal vez ahí estaba la clave de todo, pero no me importaba.
¿Que estoy haciendo? ¿estoy enfrentado un demonio así como así?- me cuestione- Que daría para que estuvieras aquí Andy.- susurre.
Iba en la mitad del recorrido por donde había pasado el sujeto, no había rastro de el ¿Y si era una trampa? ¿Dios mio.. y si no encuentro la salida?
El corazón comenzó a golpearme el pecho con fuerza. La adrenalina me intoxicaba la sangre. Me sentí mareada. El miedo me amenazaba.
De pronto, en el silencio, mi celular me traicionó. Mi timbre sonó dos veces. Lo calle tan pronto como pude. Era un mensaje.
"Créeme, Mediadora esta es una de esas veces, en las que es mejor escapar."
Escuche un gruñido a mis espaldas. Una de tantas pesadillas vuelta realidad. Conocía perfectamente ese tipo de gruñido, había formado parte de mis terrores internos desde mi más "tierna infancia", el gruñido se desplazó a mi izquierda con una velocidad impresionante.
"Esto no esta pasando"- me dije- "Voy a despertar en mi cama como siempre, este es un sueño". Pero el frío, los temblores, las palpitaciones.. Todo real. Tenia que salir de ahí cuanto antes.
Caminé a través de la pared sin despegarme de ella, a pesar de no ver absolutamente nada. Los brutales jadeos eran cada vez más cercanos pero podía percibir que venían ahora solo de una dirección.
Caminé poco a poco, tratando de no hacer ruido.
"Andrew, ven a buscarme.. Por lo que más quieras y sácame de aquí.. Por favor"- Se me ocurrió decir en susurro, sin dejar de desplazarme.
Poco a poco la vista se me comenzó a aclarar. De pronto pude ver de nuevo la luz provenía de una fogata en una habitación. La habitación se encontraba sucia de manchas marrones que identifique como sangre seca. Y junto a la fogata el horror de un perro descuartizado, sin piel, los ojos aun brillantes. Se notaba que lo habían matado hace poco, había una gran cantidad de huesos.
"No debo desmayarme.. Tengo que salvar mi vida".
Un inconfundible ruido de un cuadrúpedo acercándose a toda velocidad.
No quise voltear. Eche a correr abandonando del sitio, aprovechando la escasa luz para no chocar contra las paredes. El maldito perro iba corriendo tras mi. Cada vez menos luz, hasta que todo frente a mis ojos se volvió negro.
"Esto es el terror"- me dije- me arrinconé y esperé, a ciegas el golpe final.
Un desgarrador aullido. Un torrente de lagrimas se aglomeró en mis ojos, luego una garrafa de viento.
Apenas sentí cuando mi cabeza golpeó contra el suelo.
27 de octubre de 2011
Capitulo 21.-
Cuando abandonamos mi casa, me ayudó a darme cuenta que el miedo seguía girando como siempre, que todo el mundo estaba ocupado en vivir, que no había demonios acechando.
En estos diez pasados meses han pasado muchas cosas. Tales como que yo había dejado mi virtud de observar y todas las demás virtudes. Me sentía una persona normal y valla que se sentía bien.
Quien iba a pensar después de este tiempo, después de tanto odio, indiferencias, desprecios y tantas cosas más.. Kate era novia de mi hermano Oliver y su ex novia Annuk nunca apareció.. Fue como si se la hubiese tragado la tierra.
Y pues, hablando de Kris se encontró un gato y era como su hermano, suena absurdo, pero este era un caso distinto, ninguna especie humana puede comprenderlo.
También, llego de Estados Unidos, Zac.. El hermano de Kate lo cual habían estado separados por siete años.
Y Elliot.. Como siempre solo, tan lindo que era mi hermano, pero siempre solo.. Pero así era feliz haciendo lo que amaba, permanecer en la brigada.
Y yo.. por ultimo, mi vida era normal.. Nunca volví a ver a Carias, duele admitirlo, pero creo que tenía razón a el y a mi nos conecta la sangre por lo cual sentía que lo necesitaba.
También en este ultimo tiempo, llego un nuevo alumno al colegio, llamado Andrew, el se había convertido en uno de mis mejores amigos, pero nunca comprendí que siempre cuando estaba con el mis amigas, mi tío y hermanos me miraban como si estuviese loca.
Pero por mas tranquila que estuviera mi vida, en estos meses aún, siento un vació, como si extrañara los demonios. ¿Que risa? ¿no?.. Bueno yo solamente me entiendo.
"Ya se terminó". Solo puedo decir eso.
Eran las siete de la tarde. La tarde era melancólica, con ánimos de lluvia. Tal verme sola en la plaza, una vez que James, Kate y Kris se despidieron a mi, me sorprendí sintiéndome feliz. Mire hacia la ventana de mi casa y me imaginé a mi misma volviendo a mi rutina, tocando música con mis hermanos, haciendo deberes de la casa, preocupándome de mis notas, chatear con mis amigos, poner mi música favorita.. Y así sucesivamente.. Que linda vida llevaba ahora.
Me acerque al monumento "Madre tierra" y asegurándome que nadie me estuviese viendo, me atreví a decir:
-Gracias.
Luego, corrí a mi casa, al paso de que lo permitiera mi pierna.
En estos diez pasados meses han pasado muchas cosas. Tales como que yo había dejado mi virtud de observar y todas las demás virtudes. Me sentía una persona normal y valla que se sentía bien.
Quien iba a pensar después de este tiempo, después de tanto odio, indiferencias, desprecios y tantas cosas más.. Kate era novia de mi hermano Oliver y su ex novia Annuk nunca apareció.. Fue como si se la hubiese tragado la tierra.
Y pues, hablando de Kris se encontró un gato y era como su hermano, suena absurdo, pero este era un caso distinto, ninguna especie humana puede comprenderlo.
También, llego de Estados Unidos, Zac.. El hermano de Kate lo cual habían estado separados por siete años.
Y Elliot.. Como siempre solo, tan lindo que era mi hermano, pero siempre solo.. Pero así era feliz haciendo lo que amaba, permanecer en la brigada.
Y yo.. por ultimo, mi vida era normal.. Nunca volví a ver a Carias, duele admitirlo, pero creo que tenía razón a el y a mi nos conecta la sangre por lo cual sentía que lo necesitaba.
También en este ultimo tiempo, llego un nuevo alumno al colegio, llamado Andrew, el se había convertido en uno de mis mejores amigos, pero nunca comprendí que siempre cuando estaba con el mis amigas, mi tío y hermanos me miraban como si estuviese loca.
Pero por mas tranquila que estuviera mi vida, en estos meses aún, siento un vació, como si extrañara los demonios. ¿Que risa? ¿no?.. Bueno yo solamente me entiendo.
"Ya se terminó". Solo puedo decir eso.
Eran las siete de la tarde. La tarde era melancólica, con ánimos de lluvia. Tal verme sola en la plaza, una vez que James, Kate y Kris se despidieron a mi, me sorprendí sintiéndome feliz. Mire hacia la ventana de mi casa y me imaginé a mi misma volviendo a mi rutina, tocando música con mis hermanos, haciendo deberes de la casa, preocupándome de mis notas, chatear con mis amigos, poner mi música favorita.. Y así sucesivamente.. Que linda vida llevaba ahora.
Me acerque al monumento "Madre tierra" y asegurándome que nadie me estuviese viendo, me atreví a decir:
-Gracias.
Luego, corrí a mi casa, al paso de que lo permitiera mi pierna.
23 de octubre de 2011
Capitulo 20.-
Llamaron a la puerta, no sentia animos para nada. Aunque me doliera admitirlo mi mal estar era por que, no habia visto a Carias conectado. Lo estaba empezando a necesitar para aclarar mis dudas y preguntarle si hacia falta el libro que me habia enviado.
-¡Isa! Atrapaste al asesino- grito Kate.
-Que heroina ¿no?- dijo Kris.
-Muy bien echo- apoyó James.
Los invite a pasar. Y ambos notaron que mi rostro no era de satisfacción.
-¿Qué?- me recriminó Kris- ¿No estas contenta?
-Por que no puedo decir que el tipo ese, el tal Melquiades Guntra, sea en verdad el asesino, ¿Te parece poco?
-¿No le viste la cara? ¡Claro que es! ademas no olvides el nombre de la tienda..
-¿Que, paso algo?- pregunté confundida.
- No has visto noticias ¿Verdad?
-Ese tipo resulto ser el dueño de la tienda, y el verdadero nombre es "Revelados Moloch", "Chevere" es la empresa, pero el nombre que le puso él es "Moloch".
-¿Y sabes que es Moloch?- me preguntó Kris.
-Ni idea- Le respondí.
-Dicen que era un diablo al que, en la antigüedad, sus adoradores le sacrificaban niños. Yo misma lo busque en Internet.
Sentí una extraña angustia instalarse en mi estomago, una angustia que, de pronto, tan rápido como vino, desapareció para dejar el alivio. Tal vez sí fuera posible que hubiera dado en el blanco por una simple corazonada y el mencionado dueño de la tienda fuera en realidad el asesino. Por primera vez desde el día anterior sentí una leve alegría. Tal vez se detuvieran los crímenes. Tal vez todo terminaría.
-¿En serio eso significa Moloch?- pregunté.
-Nadie duda que ese tipo sea el asesino, Isa- Afirmo Kate-. Nadie excepto tu.
-Una de la cosas que me hace especial, como mediadora, es que puedo detectar demonios por el miedo que son capaces de producir.
-El tipo ese es un demonio?- Preguntó mi tío James.
-No lo se explicar pero sí. Su sola presencia me inquietó horriblemente, como a nadie antes en la vida. Y así como yo lo identifiqué, el también me identificó a mí. La verdad me dio mucho miedo a que lo agarraran.
-¿Por qué? ¿ Te digo algo?- preguntó Kris.
-Me dijo que esto no se iba a quedar así- respondí tragando saliva.
- El tipo ese se va a quedar en la cárcel, cariño. no te preocupes más, si no ser por ti probablemente aún andaríamos buscándolo- Dijo Oliver bajando de las escaleras.
-¿Y tu? que psicopatía eres- le dije.
-Hola- dijeron los tres.
-¿Y Elliot?- le pregunté.
-Salió a comprar- respondió.
-¿Y en que estábamos?- preguntó Kate.
-Oye que raro que no me hayas venido a molestar- dijo Oliver a Kate.
-Ya no importa, parezco tonta siguiéndote, no caeré en tu juego y además mirándote bien.. Estas bien feo, Elliot es mucho mejor que tú, mejor no lo comparo lo estaría. ofendiendo.
-¿Y a ti que te pasa? ¿eh? ¿feo yo?, estas loca- dijo haciendo una mueca.
-Perdón Isa, me pico un mosquito, ahora dime.. ¿En que íbamos?- dijo ignorando por completo a Oliver.
-Poco me importa lo que pienses- dijo Oliver caminando hacia la cocina.
Mañana volvemos al colegio, hay que aprovechar el ultimo día de vacaciones.
-¡Isa! Atrapaste al asesino- grito Kate.
-Que heroina ¿no?- dijo Kris.
-Muy bien echo- apoyó James.
Los invite a pasar. Y ambos notaron que mi rostro no era de satisfacción.
-¿Qué?- me recriminó Kris- ¿No estas contenta?
-Por que no puedo decir que el tipo ese, el tal Melquiades Guntra, sea en verdad el asesino, ¿Te parece poco?
-¿No le viste la cara? ¡Claro que es! ademas no olvides el nombre de la tienda..
-¿Que, paso algo?- pregunté confundida.
- No has visto noticias ¿Verdad?
-Ese tipo resulto ser el dueño de la tienda, y el verdadero nombre es "Revelados Moloch", "Chevere" es la empresa, pero el nombre que le puso él es "Moloch".
-¿Y sabes que es Moloch?- me preguntó Kris.
-Ni idea- Le respondí.
-Dicen que era un diablo al que, en la antigüedad, sus adoradores le sacrificaban niños. Yo misma lo busque en Internet.
Sentí una extraña angustia instalarse en mi estomago, una angustia que, de pronto, tan rápido como vino, desapareció para dejar el alivio. Tal vez sí fuera posible que hubiera dado en el blanco por una simple corazonada y el mencionado dueño de la tienda fuera en realidad el asesino. Por primera vez desde el día anterior sentí una leve alegría. Tal vez se detuvieran los crímenes. Tal vez todo terminaría.
-¿En serio eso significa Moloch?- pregunté.
-Nadie duda que ese tipo sea el asesino, Isa- Afirmo Kate-. Nadie excepto tu.
-Una de la cosas que me hace especial, como mediadora, es que puedo detectar demonios por el miedo que son capaces de producir.
-El tipo ese es un demonio?- Preguntó mi tío James.
-No lo se explicar pero sí. Su sola presencia me inquietó horriblemente, como a nadie antes en la vida. Y así como yo lo identifiqué, el también me identificó a mí. La verdad me dio mucho miedo a que lo agarraran.
-¿Por qué? ¿ Te digo algo?- preguntó Kris.
-Me dijo que esto no se iba a quedar así- respondí tragando saliva.
- El tipo ese se va a quedar en la cárcel, cariño. no te preocupes más, si no ser por ti probablemente aún andaríamos buscándolo- Dijo Oliver bajando de las escaleras.
-¿Y tu? que psicopatía eres- le dije.
-Hola- dijeron los tres.
-¿Y Elliot?- le pregunté.
-Salió a comprar- respondió.
-¿Y en que estábamos?- preguntó Kate.
-Oye que raro que no me hayas venido a molestar- dijo Oliver a Kate.
-Ya no importa, parezco tonta siguiéndote, no caeré en tu juego y además mirándote bien.. Estas bien feo, Elliot es mucho mejor que tú, mejor no lo comparo lo estaría. ofendiendo.
-¿Y a ti que te pasa? ¿eh? ¿feo yo?, estas loca- dijo haciendo una mueca.
-Perdón Isa, me pico un mosquito, ahora dime.. ¿En que íbamos?- dijo ignorando por completo a Oliver.
-Poco me importa lo que pienses- dijo Oliver caminando hacia la cocina.
Mañana volvemos al colegio, hay que aprovechar el ultimo día de vacaciones.
Capitulo 19.-
-¡La hoja!
-Gracias a Dios que despiertas- dijo Elliot acercándose a mí.
-¿Que paso?- pregunté.
-Nada pero si que nos preocupaste- respondió Oliver.
-¿Que hora es?- pregunté.
-Las cinco de la tarde.
-¿Me vas a decir que te paso? ¿Porqué gritabas?
-Pesadillas, solo eso- respondí.
-No me mientas Emily Elizabeth- me regañó Elliot - ¿Porqué hablabas de una calavera con sombrero?
Me apresure al salir de la cama.
-¡Cierto! ¡La hoja!
Fui a mi escritorio y tomé la hoja en la que había echo el dibujo y se la mostré a Elliot.
-Dime. ¿Que vez?
-Una calavera con sombrero- Respondió Elliot.
-No. Fíjate bien. ¿Que es lo que debe haber antes de la calavera?
Elliot se esforzó.
-Ni idea.
Es tan obvio que es difícil darse cuenta.
-Me rindo- dijo el.
-A mi ni me mires- dijo Oliver.
-¡La hoja!
-Que tontería- dijo Elliot.
-Exactamente- resolví-. Cuando yo te pregunté, tu respuesta debió haber sido "Una hoja con una calavera en ella".
-¡Estoy olvidando el entorno! ¡Todo lo que rodea a los niños!- exclamé- Me estuve centrando tanto en ellas, que olvide a sus padres, amigos y cosas.
-¿Quieres que te lleve a saca de las victimas?- preguntó Oliver.
-Tal vez no sea necesario- respondí.
Fui dando saltos hacia la mesa del comedor, ahí donde había estado haciendo el análisis con ayuda de Kate. Tomé las mismas hojas que había unido y las volteé para poder realizar un nuevo análisis desde cero. En la parte de arriba, escribí los nombres de las victimas, y liego separe las hojas en columnas.
Elliot y Oliver se sentaron frente a mi sin entender nada, yo anotaba lo primero que se me venia a la cabeza, apuntaba hasta el color de zapatos.
-¿Necesitas ayuda?, me siento inútil- Pregunto Oliver.
-Lo siento, por ahora no me sirves- le respondí.
-Graciosa- dijo con sarcasmo.
Empecé a asociar las cosas pero algunas no tenían sentido, como que los tres papás calzaban lo mismo, así que lo descarté.
Hubo un detalle que me llamo la atención. Que las tres fotos que poseía en cada una decía "Fotos, Chevere"
Es el nombre de la empresa en donde tomaron sus ultimas fotos.
-Que buen detalle, hay que apuntarlo- Dijo Oliver.
Al terminar de decir eso mi celular suena con un mensaje.
"Bravo mediadora, pero ten cuidado. ¿Te gusta jugar con el peligro. ¿No?
Sentí temor ¿Y si en verdad estaba en la pista correcta? ¿Y estaba por enfrentarme a un demonio?
Elliot se sintió en la obligación de preguntarme, de donde prevenía en mensaje. Estuve a punto de decirle la verdad, pero no me atreví, no quería confesar que era probable que el asesino fuera un demonio. No sabia como trasmitirles que debían tener cuidado, y mucho..
La patrulla hizo su recorrido hasta el centro comercial. Cuando llegaron al estacionamiento del mall, ya habían otras dos patrullas esperando.
-Hola detective- Saludo Oliver a su colega.- quiero que estén alerta, pero no intervengan si yo no se los pido.
-Entendido Detective.
Caminamos hacia la entrada del centro comercial, en compañía de cuatro uniformados.
Al llegar a la entrada, trate de despertar mis sentidos, observar todo detenidamente. A un lado había un pequeño kiosko solicitando publico junto con un letrero, invitando a la gente a donar ropa para la gente pobre, había globos adornando el sitio, música suave, decena de personas iban y venían.
-¿Todo bien?- me preguntó el comisario guillén- permiteme presentarme soy el comisario guillén, me han contado tus hermanos que tienes una capacidad muy útil que es el observar, y que ha servido mucho para esta investigación.
-Así es, soy Emily Claussen, espero ayudarles en este caso.
-Esta bien, vamos.
En el puerto de vigilancia había una mujer policía, la cual parecía amable.
-¿Puedo ayudarles?- pregunto esta.
-¿Usted esta a cargo aquí?- le cuestione.
-Adriana cortés para servirles.
-Gracias Adriana- le agradeció Elliot.
-Estaré atenta- respondió llevándose una mano, a la gorra y sonriéndome, y se la devolvió en forma inmediata.
Oliver dio ordenes a los otros policías para que se mantuvieran alerta.
Caminamos y Elliot por los pasillos del centro comercial, y a cada paso se incrementaban mis palpitaciones , el frió, el ligero temblor de las manos. Un miedo casi palpable. Algo, tal vez, parecido al terror.
Cuando dejamos a tras las filas de gente, pudimos ver a la distancia el letrero.
"Chevere. Revelados. Ultra rápidos."
Nos aproximamos al local, un corpulento hombre joven de aspecto espeluznante, cabellos negro, largo y despeinado y cejas muy pobladas. En las manos sostenía unja revista, pero no tardó en levantar la mirada, una mirada cargada de odio, de resentimiento, proveniente de unos ojos tan claros que parecían trasparentes.
Percibí, de algún modo, que el encargado había presentido mi llegada. creí ver que este paladeaba entre los labios mi nombre: "Emily Claussen".
-Buenas tardes. ¿En que puedo ayudarles?- dijo el de la mirada rencorosa.
En este momento hubiera querido tener a Carias para preguntarle se eso que estaba sintiendo era el verdadero Terror.
-Vamos a mirar un rato- dijo Oliver tratando de disimular.
-No estarán pensando que este respetable lugar tiene que ver con esos crímenes espantosos ¿eh?- preguntó el, desafiándonos.
-Estamos investigando, solo eso le puedo decir- respondió el comisario Guillén.
-Lo que están haciendo es el ridículo- respondió el sujeto groseramente.
-Cuide sus palabras, amigo- dijo Oliver.
-Ahora resulta que una estúpida mocosa, con mucha imaginación puede señalar a cualquiera y resulta ser el culpable, ¿no? ¡Valla como nos hemos adelantado en esta ciudad de mierda!
-Le eh dicho que cuide su lenguaje- Dijo Oliver, esta vez gritándole.
-Creo que vamos a hacer una revisión a su tienda- encargo el comisario.
Este se violentó. Y me arrojo al suelo.
-¿Y con que ordenes? ¿eh? ¿solo por que lo dice esta maldita niña?
-¡La niña no a dicho nada, maldito infeliz! y esta niña es mi hermana, y si la vuelves a tocar, lo lamentaras maldito, ¡Lo lamentaras!- dijo Oliver apunto de golpear al sujeto- ¡Y si no te has dado cuenta estamos con el comisario, ignorante!
-Detengan a este hombre y cierren la tienda- ordenó el comisario.
-Como diga comisario- dijo Elliot y tres colegas más.
-¡Voy a quejarme! ¡Esta es una injusticia!
Tenía su vista clavada en mí. Eran unos ojos malignos, también el rostro desfigurado por el odio, podría ser que de tratara de Eris..
Miré los anuncios de las tiendas, sus promociones, sus cámaras, sus rollos fotográficos.. No había nada para comprobar que podía estar segura. Quería señalarlo como el asesino, peor en ese momento, no podía.
Los policías esposaron al individuo y los empujaron hacia la puerta. El comisario ordenó que se detuvieran. Afuera ya se había poblado de curiosos incluida la prensa. El comisario se acerco´a mi y trató de tranquilizarme.
El hombre, nuevamente clavó sus ojos en mi, trató de meterme miedo, increíblemente se mostraba más interesado en mí que en la policía.
Los uniformados empujaron al hombre hacia los pasillos del local era llevado contra su voluntad a la delegación.
Luego, cuando ya parecía haber concluido todo, ocurrió un nuevo incidente extraordinariamente rápido. El hombre se soltó de la prisión de los policías, volvió en donde estaba yo y de hincó frente a mí, poniéndome su rostro congestionado de ira a pocos centímetros de mi aterrorizada mirada.
-Esto no se va a quedar así, mediadora. Que te quede claro.- Dijo en un murmullo solo para que yo lo escuchara.- No se va a quedar así.
Elliot Reaccionó en seguida. Sacó su arma y propinó un golpe en la nuca del sujeto, consiguiendo que cayera desmayado. Pero ya era demasiado tarde. Ya en esa fracción de segundos, había conocido el miedo que sobrepasaba todos mis miedos anteriores. Y, al parecer, lo había tolerado firmemente.
-Gracias a Dios que despiertas- dijo Elliot acercándose a mí.
-¿Que paso?- pregunté.
-Nada pero si que nos preocupaste- respondió Oliver.
-¿Que hora es?- pregunté.
-Las cinco de la tarde.
-¿Me vas a decir que te paso? ¿Porqué gritabas?
-Pesadillas, solo eso- respondí.
-No me mientas Emily Elizabeth- me regañó Elliot - ¿Porqué hablabas de una calavera con sombrero?
Me apresure al salir de la cama.
-¡Cierto! ¡La hoja!
Fui a mi escritorio y tomé la hoja en la que había echo el dibujo y se la mostré a Elliot.
-Dime. ¿Que vez?
-Una calavera con sombrero- Respondió Elliot.
-No. Fíjate bien. ¿Que es lo que debe haber antes de la calavera?
Elliot se esforzó.
-Ni idea.
Es tan obvio que es difícil darse cuenta.
-Me rindo- dijo el.
-A mi ni me mires- dijo Oliver.
-¡La hoja!
-Que tontería- dijo Elliot.
-Exactamente- resolví-. Cuando yo te pregunté, tu respuesta debió haber sido "Una hoja con una calavera en ella".
-¡Estoy olvidando el entorno! ¡Todo lo que rodea a los niños!- exclamé- Me estuve centrando tanto en ellas, que olvide a sus padres, amigos y cosas.
-¿Quieres que te lleve a saca de las victimas?- preguntó Oliver.
-Tal vez no sea necesario- respondí.
Fui dando saltos hacia la mesa del comedor, ahí donde había estado haciendo el análisis con ayuda de Kate. Tomé las mismas hojas que había unido y las volteé para poder realizar un nuevo análisis desde cero. En la parte de arriba, escribí los nombres de las victimas, y liego separe las hojas en columnas.
Elliot y Oliver se sentaron frente a mi sin entender nada, yo anotaba lo primero que se me venia a la cabeza, apuntaba hasta el color de zapatos.
-¿Necesitas ayuda?, me siento inútil- Pregunto Oliver.
-Lo siento, por ahora no me sirves- le respondí.
-Graciosa- dijo con sarcasmo.
Empecé a asociar las cosas pero algunas no tenían sentido, como que los tres papás calzaban lo mismo, así que lo descarté.
Hubo un detalle que me llamo la atención. Que las tres fotos que poseía en cada una decía "Fotos, Chevere"
Es el nombre de la empresa en donde tomaron sus ultimas fotos.
-Que buen detalle, hay que apuntarlo- Dijo Oliver.
Al terminar de decir eso mi celular suena con un mensaje.
"Bravo mediadora, pero ten cuidado. ¿Te gusta jugar con el peligro. ¿No?
Sentí temor ¿Y si en verdad estaba en la pista correcta? ¿Y estaba por enfrentarme a un demonio?
Elliot se sintió en la obligación de preguntarme, de donde prevenía en mensaje. Estuve a punto de decirle la verdad, pero no me atreví, no quería confesar que era probable que el asesino fuera un demonio. No sabia como trasmitirles que debían tener cuidado, y mucho..
La patrulla hizo su recorrido hasta el centro comercial. Cuando llegaron al estacionamiento del mall, ya habían otras dos patrullas esperando.
-Hola detective- Saludo Oliver a su colega.- quiero que estén alerta, pero no intervengan si yo no se los pido.
-Entendido Detective.
Caminamos hacia la entrada del centro comercial, en compañía de cuatro uniformados.
Al llegar a la entrada, trate de despertar mis sentidos, observar todo detenidamente. A un lado había un pequeño kiosko solicitando publico junto con un letrero, invitando a la gente a donar ropa para la gente pobre, había globos adornando el sitio, música suave, decena de personas iban y venían.
-¿Todo bien?- me preguntó el comisario guillén- permiteme presentarme soy el comisario guillén, me han contado tus hermanos que tienes una capacidad muy útil que es el observar, y que ha servido mucho para esta investigación.
-Así es, soy Emily Claussen, espero ayudarles en este caso.
-Esta bien, vamos.
En el puerto de vigilancia había una mujer policía, la cual parecía amable.
-¿Puedo ayudarles?- pregunto esta.
-¿Usted esta a cargo aquí?- le cuestione.
-Adriana cortés para servirles.
-Gracias Adriana- le agradeció Elliot.
-Estaré atenta- respondió llevándose una mano, a la gorra y sonriéndome, y se la devolvió en forma inmediata.
Oliver dio ordenes a los otros policías para que se mantuvieran alerta.
Caminamos y Elliot por los pasillos del centro comercial, y a cada paso se incrementaban mis palpitaciones , el frió, el ligero temblor de las manos. Un miedo casi palpable. Algo, tal vez, parecido al terror.
Cuando dejamos a tras las filas de gente, pudimos ver a la distancia el letrero.
"Chevere. Revelados. Ultra rápidos."
Nos aproximamos al local, un corpulento hombre joven de aspecto espeluznante, cabellos negro, largo y despeinado y cejas muy pobladas. En las manos sostenía unja revista, pero no tardó en levantar la mirada, una mirada cargada de odio, de resentimiento, proveniente de unos ojos tan claros que parecían trasparentes.
Percibí, de algún modo, que el encargado había presentido mi llegada. creí ver que este paladeaba entre los labios mi nombre: "Emily Claussen".
-Buenas tardes. ¿En que puedo ayudarles?- dijo el de la mirada rencorosa.
En este momento hubiera querido tener a Carias para preguntarle se eso que estaba sintiendo era el verdadero Terror.
-Vamos a mirar un rato- dijo Oliver tratando de disimular.
-No estarán pensando que este respetable lugar tiene que ver con esos crímenes espantosos ¿eh?- preguntó el, desafiándonos.
-Estamos investigando, solo eso le puedo decir- respondió el comisario Guillén.
-Lo que están haciendo es el ridículo- respondió el sujeto groseramente.
-Cuide sus palabras, amigo- dijo Oliver.
-Ahora resulta que una estúpida mocosa, con mucha imaginación puede señalar a cualquiera y resulta ser el culpable, ¿no? ¡Valla como nos hemos adelantado en esta ciudad de mierda!
-Le eh dicho que cuide su lenguaje- Dijo Oliver, esta vez gritándole.
-Creo que vamos a hacer una revisión a su tienda- encargo el comisario.
Este se violentó. Y me arrojo al suelo.
-¿Y con que ordenes? ¿eh? ¿solo por que lo dice esta maldita niña?
-¡La niña no a dicho nada, maldito infeliz! y esta niña es mi hermana, y si la vuelves a tocar, lo lamentaras maldito, ¡Lo lamentaras!- dijo Oliver apunto de golpear al sujeto- ¡Y si no te has dado cuenta estamos con el comisario, ignorante!
-Detengan a este hombre y cierren la tienda- ordenó el comisario.
-Como diga comisario- dijo Elliot y tres colegas más.
-¡Voy a quejarme! ¡Esta es una injusticia!
Tenía su vista clavada en mí. Eran unos ojos malignos, también el rostro desfigurado por el odio, podría ser que de tratara de Eris..
Miré los anuncios de las tiendas, sus promociones, sus cámaras, sus rollos fotográficos.. No había nada para comprobar que podía estar segura. Quería señalarlo como el asesino, peor en ese momento, no podía.
Los policías esposaron al individuo y los empujaron hacia la puerta. El comisario ordenó que se detuvieran. Afuera ya se había poblado de curiosos incluida la prensa. El comisario se acerco´a mi y trató de tranquilizarme.
El hombre, nuevamente clavó sus ojos en mi, trató de meterme miedo, increíblemente se mostraba más interesado en mí que en la policía.
Los uniformados empujaron al hombre hacia los pasillos del local era llevado contra su voluntad a la delegación.
Luego, cuando ya parecía haber concluido todo, ocurrió un nuevo incidente extraordinariamente rápido. El hombre se soltó de la prisión de los policías, volvió en donde estaba yo y de hincó frente a mí, poniéndome su rostro congestionado de ira a pocos centímetros de mi aterrorizada mirada.
-Esto no se va a quedar así, mediadora. Que te quede claro.- Dijo en un murmullo solo para que yo lo escuchara.- No se va a quedar así.
Elliot Reaccionó en seguida. Sacó su arma y propinó un golpe en la nuca del sujeto, consiguiendo que cayera desmayado. Pero ya era demasiado tarde. Ya en esa fracción de segundos, había conocido el miedo que sobrepasaba todos mis miedos anteriores. Y, al parecer, lo había tolerado firmemente.
22 de octubre de 2011
Capitulo 18.-
Todas las escuelas primarias y secundarias habían decidido suspender las clases. Los ojos del país estaban puestos en el caso de "Los niños del misterioso paquete".
Por la tarde me dediqué, a estar con Kate y a cruzar la información con la que contaba. Kate me ayudó a pegar varias hojas de cuaderno para relacionar todo lo que sabia de cada una de las niñas muertas y llegar a una conclusión. Pero por más que me concentré, no conseguí nada, sentía que me cabeza iba a estallar.
Eran las 22:30 cuando sonó el celular de Kate.
-Es mi mamá, Parece que me tendré que ir.
-Va a venir por mi, dijo que ni muerta me iba a dejar ir sola a casa.
Asentí con la cabeza. Toda la ciudad estaba al borde de la locura. De hecho ya me preocupaba quedarme sola, aunque sabia que mis hermanos tomarían medidas al respecto.
-Mañana te ayudo más, Isa.
-No me digas Isa, Kate- le dije con enojo.
-Nos vemos- dijo Kate.
Llamaron a la puerta de la casa.
-¿Quien es?- pregunté.
-Yo la mamá de Kate, Isa- dijo la señora.
-¿Ves lo que haces?- le reclamé- al rato todo el mundo me dirá "Isa".
Abrí la puerta y la señora me saludo.
-Isa.. se que comprenderás, pero no me tranquiliza mucho que Kate te ayude.
-¡Ay mamá! ¡No empieces!- dijo ella molesta.
-¡Pues es la verdad!
-¡Ay, ya vamos!- gruñó ella saliendo de mi casa
Oliver me había dicho por la mañana, que tenía que hacer guardia en la brigada con Elliot y no iban a llegar en toda la noche.
De repente comencé a escuchar unos extraños ruidos, cinco golpeteos apresurados.
Toc, toc, toc, toc, toc..
Fui directo a la entrada de mi casa
Toc, toc, toc..
Me anime a preguntar.
¿Quien es?
Toc, toc, toc, toc, toc, toc, toc, toc, toc, toc..
El miedo me amenazaba, no era nada bueno, que el que estuviese golpeando, no respondiera.
Toc, toc, toc, toc..
Lo siguiente fue un feroz gruñido, algo muy similar a cuando un perro está apunto de atacar o tirar una mordida. Luego, silencio. Luego, más golpes a la puerta, golpes frenéticos, golpes desesperados. Después, pasos presurosos que bajaban las escaleras..
Corrí entonces a la ventana de mi cuarto para ver a través de esta de quien se trataba. Lamentablemente, cuando me asomé solo contemple la calle vacía.
Luego regresé a mi cuarto.
Carias: ¿Miedo Claussen?
Me apresuré a sentarme en el computador para responderle a Carias.
Emily Elizabeth: No se de que me hablas.
Carias: No importa. Yo me entiendo.. por cierto se que por tu mente a estado pasando, que fue lo que te ocurrió el otro día cuando te peleaste con tu hermano. Lo que pasa es que paso lo mismo que le paso a tu amiga Kate, a diferencia que tu lo sentiste.. Y ella no sabe nada. Pero fue tan solo por unos instantes.. cuidado mediadora que esos instantes se pueden volver y resto de tu vida.
Emily Elizabeth: No molestes quieres.. vete al demonio.
Carias: no importa todas las cosas que me digas mediadora.. siempre estaré ahí para protegerte.
Emily Elizabeth: Estoy cansada, me voy a dormir, si no te importa.
Carias: A mi no me importa para nada, no se si a la tercera victima.
Emily Elizabeth: ¡Hago lo que puedo!
Carias: Prrr.. Emy..
Carias: Te voy a ayudar. Trae una hoja blanca.
Pensé por un momento ¿Quería ayuda de el? ¿Y si era una trampa?.. Como sea, en este momento todo sirve..
Carias: Arranca la hoja es importante.
Obedecí.
Carias: Dibuja una calavera con sombrero.
Me pareció extraño esto, en efecto teclé.
Emily Elizabeth: Ya sabia. Te estas burlando.
Carias: ¡Dibuja una calavera con sombrero, mocosa!
Negué con la cabeza y dibuje lo pedido.
Emily Elizabeth: ¿Listo?
Carias: Sí.
Emily Elizabeth: ¿Ahora que? ¿Quieres que la ilumine con mis colores?
Carias: No, con lo que hiciste es bastante. Ahora.. ¿Que vez?
Emily Elizabeth: ¿Que veo?
Carias: Sí, que vez..
Emily Elizabeth: Pues.. una calavera con sombrero.
Carias: Mal.
Emily Elizabeth: ¿Como que mal?
Carias: ¡No te estas fijando mediadora!
Emily Elizabeth: Es un estúpido cráneo con sombrero.
Carias: ¡No!¡no y no! Error ¿Que es lo más evidente?
Emily Elizabeth: ¡La estúpida y maldita calavera!
Carias: ¿Que es lo que sobresale?
Emily Elizabeth: ¡LA MALDITA CALAVERA!
Carias: Adiós mediadora, cuando aprendas a observar me buscas.
A lo largo de tres horas me dormí, la computadora seguía encendida, hasta que desperté creyendo haber escuchado algo, pero estaba soñando.
Entonces, confirmé que lo que había arrancado en mis sueños no había sido producto de mi imaginación.
Toc, toc , toc..
Llamaban nuevamente. Pero no a la puerta si no que a la ventana.
-Esto no puede estar pasando ¿Quien puede estar golpeando la ventana de un tercer piso?
Toc, toc..
Eran llamadas mas suaves, menos energéticas que las otras, peor no lograba explicarme por que estas me producían más miedo.. Era una sensación extraña..
-"No tengo miedo", "No tengo miedo". Me dije a mi misma- "Se controlar el miedo".
-"No tengo miedo. Me aproximé a la ventana, y de un golpe abrí las persianas.
Un niño de ojos sangrantes me miraban, flotando en el aire, del otro lado del cristal. De su boca brotaba un río de sangre.
Sentí que mi corazón se aceleraba. No obstante, puede sostenerle la mirada al espectro.
-¿Que quieres? ¿Por qué me atormentas?
"Los demonios se querrán apoderar de ti y conjugaran en tu contra."
-¡Vete al diablo!- grite y arroje las persianas.
En ese momento, no sentí miedo, creo que ya lo tomaba como algo cotidiano ya había aceptado la idea de siempre convivir con ellos. Había logrado controlarme, y eso me permitió felicitarme.
-Lo que necesito es dormir, malditos fantasmas.
Al dar la vuelta para acostarme, no puede evitarlo, deje escapar un espantoso grito.
En mi colchón, una niña destrozada, con el estomago abierto, me miraba con gran dolor. La luz del monitor me mostraba con las claridad sus órganos.
Empecé a sentir que las fuerzas me abandonaban, ahora si que me desmayaría, nunca fui tan miedosa, pero esto había superado los limites ¿Cuanto miedo puedo soportar?. El niño, mejor dicho el espectro, estiro una mano para tocarme, y instantáneamente me eché para atrás.
-¡Aléjate!
Abandoné mi pieza a saltos, mi pierna no me acompaño en este momento. Pero en el suelo del pasillo, atravesado, otro engendro, igualmente con el vientre completamente abierto. Me tropecé con él y quede a milímetros del rostro agonizante.
-¡Déjame!- seguí gritando mientras trataba de llegar a la puerta de salida de mi casa, ahora arrastrándome.
Debajo del comedor, una nueva visión. El cuerpo de quien esta vez parecía una niña, también se desangraba, abierta a la mitad.
Procure llegar a la puerta de mi casa a través de ríos de viscoso fluido rojinegro. A cada paso que daba más me iba convenciendo de que estaba loca. Cuando puede levantar la vista, confirmé que había otro espectro y este era similar a Fabiola Romero la primera victima, también con el cuerpo destrozado.
Decidí detenerme. Pensé que acaso los espíritus me estaban persiguiendo por no poder detener los asesinatos. Cerré los ojos y comencé a llorar, tendida en el suelo. "Perdón, perdón, perdón".
Se oyó un fuerte estallido. Se abrió la puerta de mi casa de un solo golpe y se encendió la luz.
Y no supe más de mí..
Por la tarde me dediqué, a estar con Kate y a cruzar la información con la que contaba. Kate me ayudó a pegar varias hojas de cuaderno para relacionar todo lo que sabia de cada una de las niñas muertas y llegar a una conclusión. Pero por más que me concentré, no conseguí nada, sentía que me cabeza iba a estallar.
Eran las 22:30 cuando sonó el celular de Kate.
-Es mi mamá, Parece que me tendré que ir.
-Va a venir por mi, dijo que ni muerta me iba a dejar ir sola a casa.
Asentí con la cabeza. Toda la ciudad estaba al borde de la locura. De hecho ya me preocupaba quedarme sola, aunque sabia que mis hermanos tomarían medidas al respecto.
-Mañana te ayudo más, Isa.
-No me digas Isa, Kate- le dije con enojo.
-Nos vemos- dijo Kate.
Llamaron a la puerta de la casa.
-¿Quien es?- pregunté.
-Yo la mamá de Kate, Isa- dijo la señora.
-¿Ves lo que haces?- le reclamé- al rato todo el mundo me dirá "Isa".
Abrí la puerta y la señora me saludo.
-Isa.. se que comprenderás, pero no me tranquiliza mucho que Kate te ayude.
-¡Ay mamá! ¡No empieces!- dijo ella molesta.
-¡Pues es la verdad!
-¡Ay, ya vamos!- gruñó ella saliendo de mi casa
Oliver me había dicho por la mañana, que tenía que hacer guardia en la brigada con Elliot y no iban a llegar en toda la noche.
De repente comencé a escuchar unos extraños ruidos, cinco golpeteos apresurados.
Toc, toc, toc, toc, toc..
Fui directo a la entrada de mi casa
Toc, toc, toc..
Me anime a preguntar.
¿Quien es?
Toc, toc, toc, toc, toc, toc, toc, toc, toc, toc..
El miedo me amenazaba, no era nada bueno, que el que estuviese golpeando, no respondiera.
Toc, toc, toc, toc..
Lo siguiente fue un feroz gruñido, algo muy similar a cuando un perro está apunto de atacar o tirar una mordida. Luego, silencio. Luego, más golpes a la puerta, golpes frenéticos, golpes desesperados. Después, pasos presurosos que bajaban las escaleras..
Corrí entonces a la ventana de mi cuarto para ver a través de esta de quien se trataba. Lamentablemente, cuando me asomé solo contemple la calle vacía.
Luego regresé a mi cuarto.
Carias: ¿Miedo Claussen?
Me apresuré a sentarme en el computador para responderle a Carias.
Emily Elizabeth: No se de que me hablas.
Carias: No importa. Yo me entiendo.. por cierto se que por tu mente a estado pasando, que fue lo que te ocurrió el otro día cuando te peleaste con tu hermano. Lo que pasa es que paso lo mismo que le paso a tu amiga Kate, a diferencia que tu lo sentiste.. Y ella no sabe nada. Pero fue tan solo por unos instantes.. cuidado mediadora que esos instantes se pueden volver y resto de tu vida.
Emily Elizabeth: No molestes quieres.. vete al demonio.
Carias: no importa todas las cosas que me digas mediadora.. siempre estaré ahí para protegerte.
Emily Elizabeth: Estoy cansada, me voy a dormir, si no te importa.
Carias: A mi no me importa para nada, no se si a la tercera victima.
Emily Elizabeth: ¡Hago lo que puedo!
Carias: Prrr.. Emy..
Carias: Te voy a ayudar. Trae una hoja blanca.
Pensé por un momento ¿Quería ayuda de el? ¿Y si era una trampa?.. Como sea, en este momento todo sirve..
Carias: Arranca la hoja es importante.
Obedecí.
Carias: Dibuja una calavera con sombrero.
Me pareció extraño esto, en efecto teclé.
Emily Elizabeth: Ya sabia. Te estas burlando.
Carias: ¡Dibuja una calavera con sombrero, mocosa!
Negué con la cabeza y dibuje lo pedido.
Emily Elizabeth: ¿Listo?
Carias: Sí.
Emily Elizabeth: ¿Ahora que? ¿Quieres que la ilumine con mis colores?
Carias: No, con lo que hiciste es bastante. Ahora.. ¿Que vez?
Emily Elizabeth: ¿Que veo?
Carias: Sí, que vez..
Emily Elizabeth: Pues.. una calavera con sombrero.
Carias: Mal.
Emily Elizabeth: ¿Como que mal?
Carias: ¡No te estas fijando mediadora!
Emily Elizabeth: Es un estúpido cráneo con sombrero.
Carias: ¡No!¡no y no! Error ¿Que es lo más evidente?
Emily Elizabeth: ¡La estúpida y maldita calavera!
Carias: ¿Que es lo que sobresale?
Emily Elizabeth: ¡LA MALDITA CALAVERA!
Carias: Adiós mediadora, cuando aprendas a observar me buscas.
A lo largo de tres horas me dormí, la computadora seguía encendida, hasta que desperté creyendo haber escuchado algo, pero estaba soñando.
Entonces, confirmé que lo que había arrancado en mis sueños no había sido producto de mi imaginación.
Toc, toc , toc..
Llamaban nuevamente. Pero no a la puerta si no que a la ventana.
-Esto no puede estar pasando ¿Quien puede estar golpeando la ventana de un tercer piso?
Toc, toc..
Eran llamadas mas suaves, menos energéticas que las otras, peor no lograba explicarme por que estas me producían más miedo.. Era una sensación extraña..
-"No tengo miedo", "No tengo miedo". Me dije a mi misma- "Se controlar el miedo".
-"No tengo miedo. Me aproximé a la ventana, y de un golpe abrí las persianas.
Un niño de ojos sangrantes me miraban, flotando en el aire, del otro lado del cristal. De su boca brotaba un río de sangre.
Sentí que mi corazón se aceleraba. No obstante, puede sostenerle la mirada al espectro.
-¿Que quieres? ¿Por qué me atormentas?
"Los demonios se querrán apoderar de ti y conjugaran en tu contra."
-¡Vete al diablo!- grite y arroje las persianas.
En ese momento, no sentí miedo, creo que ya lo tomaba como algo cotidiano ya había aceptado la idea de siempre convivir con ellos. Había logrado controlarme, y eso me permitió felicitarme.
-Lo que necesito es dormir, malditos fantasmas.
Al dar la vuelta para acostarme, no puede evitarlo, deje escapar un espantoso grito.
En mi colchón, una niña destrozada, con el estomago abierto, me miraba con gran dolor. La luz del monitor me mostraba con las claridad sus órganos.
Empecé a sentir que las fuerzas me abandonaban, ahora si que me desmayaría, nunca fui tan miedosa, pero esto había superado los limites ¿Cuanto miedo puedo soportar?. El niño, mejor dicho el espectro, estiro una mano para tocarme, y instantáneamente me eché para atrás.
-¡Aléjate!
Abandoné mi pieza a saltos, mi pierna no me acompaño en este momento. Pero en el suelo del pasillo, atravesado, otro engendro, igualmente con el vientre completamente abierto. Me tropecé con él y quede a milímetros del rostro agonizante.
-¡Déjame!- seguí gritando mientras trataba de llegar a la puerta de salida de mi casa, ahora arrastrándome.
Debajo del comedor, una nueva visión. El cuerpo de quien esta vez parecía una niña, también se desangraba, abierta a la mitad.
Procure llegar a la puerta de mi casa a través de ríos de viscoso fluido rojinegro. A cada paso que daba más me iba convenciendo de que estaba loca. Cuando puede levantar la vista, confirmé que había otro espectro y este era similar a Fabiola Romero la primera victima, también con el cuerpo destrozado.
Decidí detenerme. Pensé que acaso los espíritus me estaban persiguiendo por no poder detener los asesinatos. Cerré los ojos y comencé a llorar, tendida en el suelo. "Perdón, perdón, perdón".
Se oyó un fuerte estallido. Se abrió la puerta de mi casa de un solo golpe y se encendió la luz.
Y no supe más de mí..
21 de octubre de 2011
Capitulo 17.-
-Me voy- dije secamente.
-¿Y a donde si se puede saber?- pregunto Elliot siguiéndome el juego.
-Voy a tomar aire después de lo de anoche.. como hermano, de ti se espera cualquier cosa.
-Toma desayuno, y después hace lo que se te pegue la gana- Dijo empujándome a la mesa.
-Déjame maldito.. -dije poniéndole una mirada desafiante.
-Has lo que se te pegue la gana- dijo soltándome bruscamente.
-Te odio- dije golpeando fuertemente a la puerta.
Al salir de mi casa vi a Kate, estaba al frente te la estatua "Madre Tierra". No pude evitar ir a su encuentro.
-Hola. ¿No es muy temprano para que vengas a desahogarte?
Kate tenía rasgos de no haber pasado una buena noche.
-Le estoy pidiendo que cuide a Oliver.
No pude evitar sonreír, solo Kate podía tener una ocurrencia como esa.
-Kate.. es un monumento, tampoco es un santuario- exclamé.
-No importa, yo se que me escucha.
-Tuve un muy mal sueño Emily- dijo ella.
-¿De que trataba?- pregunté.
-Soñé que mataban a Oliver.
-Solo fue un sueño, Kate.
-A veces sueño cosas ciertas.
-Traté de evitar de que me viera riendo.
-Si, búrlate- se quejó- no quiero quedarme viuda antes de casarme.
-¡Emily Elizabeth! ven aquí ahora mismo- me grito mi hermano del segundo piso.
-¡Ah! es peor que una abuela..- dije poniendo los ojos en blanco- ¿Me acompañas? - me pregunté a Kate.
-Bueno- respondió ella.
-Estas acumulando puntos, has estado muy desobediente- me regaño mi hermano mientras me abría la puerta.
-Sí, como digas- le respondí.
-Hola Kate disculpa no te había visto. Perdón- le dijo a mi amiga con una sonrisa de oreja a oreja.
-Hola Elliot- dijo abrazándolo.
-Ni que fuera tan chica, para que no la hubieras visto- dije haciendo una mueca.
-¡Mira tu cállate!
-Dejen de pelear hermanitos- dijo Kate riendo.
-Que sentido del humor- le dije ante su regaño.
-Oliver baja llego tu amor- dije burlándome.
-Cállate- dijo Kate pegándome con el codo.
Oliver no tardo en decir.
-¿Annuk? ya bajo.- dijo alegremente.
Cuando había bajado, se tomó una gran sorpresa.
-¿Kate? ah no lo que faltaba para arruinar el día.
-Emmm.. ¿Hola?- dijo Kate un tanto enojada.
-Se me olvidaba tu me debes algo- reclamé a Oliver.
-Verdad..- dijo presionando lo ojos dándole un beso a Kate.
-Por fin salí de eta maldición- dijo Oliver suspirando
-¿Y eso?- dijo Kate, con casi los ojos formados en corazones.
-Era una apuesta, como crees, que me fijaría en una niña tan fea como tu- dijo mirándola de pies a cabeza.
-Así que me utilizas para tus apuestas ¿eh?- dijo enojada.
-Claro, de algo que seas útil.
-¡Eres un imbécil!- dijo golpearlo fuertemente.
-Ya por favor suéltame, si igual te quiero- dijo este afirmándola para que no lo golpeara más.
-Saben, me tengo que ir al colegio ¿me vas a dejar Elliot?- pregunte ignorando la situación.
-Esta bien, vamos.
-Yo tengo el día libre, me quedo en casa- dijo Oliver acomodándose en el sofá.
-Yo no iré a clases, con lo que esta pasando mi mama dijo que me quedara aquí o en casa, no quiere que valla al colegio.
-¿Salgamos al centro comercial?- le preguntó oliver.
-Bueno- dijo alegremente.
-Quien como ustedes..- dijimos al mismo tiempo con Elliot.
-¿Vamos? le dije a Elliot.
-Ya vamos, y no pelemos más- dijo abrazándome.
-Bueno- dije correspondiendo a su abrazo.
Al ingresar al colegio, me di cuenta que era el centro de miradas. Un par de compañeras de mi salón se acercaban y me bombardeaban con sus preguntas.
-Te vimos en las noticias Emily. ¿De verdad estas ayudando a la policía?
-¿Viste sangre?
-¿Verdad que a todos los niños los sacaron mientras dormían?
-¿Es cierto que es obra de un loco satánico?
No respondí nada,. solo las ignore y me fui donde Kris.
Naturalmente, en la sala, mis compañeras continuaron con sus inquietudes, pero Kris se encargo de desanimarlas a todas diciendo que los detalles eran horribles y por eso prefería no hablar. Cuando sonó el timbre, todas fueron a los lugares, aunque de muy mala gana.
Por la puerta entró la directora Victoria, en vez de la profesora de matemática, que esa era la asignatura que teníamos inicialmente.
Me percaté que no me quitaba los ojos de encima. No obstante, cuando volvió a reinar el silencio, miró a todos por igual.
-Se imaginaran por que estoy aquí- inició-. Miren a su alrededor. ¿Que notan?
Los alumnos del 1°A miraron en torno pero al parecer, no detectaron nada. La maestra ya sabía a quien preguntarle.
-Emily Claussen. ¿Que notas?
Me puse de pie.
-Faltan Javiera Martines, Romina Medina, Catalina Simi, Kate Kroos, Laura Esquivel, Maria Angelica Fernandez y Fernanda Navarro..
-Correcto. Y en esta sala en el que hubo menos jóvenes ausentes, supongo por razones obvias. Muchos de ustedes querían ver a Emily y hablar con ella. ¿Cuantos de ustedes se enfrentaron a sus padres para poder venir?. Levanten la mano.
Se levantaron once brazos, entre ellos el de Kris.
-Hay salas en las que no se junta ni la mitad de la asistencia. Es posible que estemos viviendo en una ola de pánico. Exactamente lo que la policía quería evitar.
Una niña levantó la mano.
-Pero dice mi papá que es mejor que lo sepamos-Opinó.- Porque así podemos estar alerta.
-Y tu papá tiene razón- concedió la directora- por eso creo que hay que tomar una resolución.
-Emily, acompáñame y trae tus cosas.
-¿Conoces de cerca lo que esta pasando?- me pregunto la maestra en el pasillo.- Dime con toda honestidad.. ¿Que tan probable es que hayan victimas?
No lo dude, que fácil pregunta.
-Muy probable.
La profesora suspiró; Tendría que tomar cartas en el asunto.
Atravesamos el patio. Y noté que la profesora me conducía hacia la puerta de la entrada del colegio.
-Llamaron de la delegación de policías. Me pidieron que te permitiera salir temprano.- dijo la directora juntando los manos.
-Eh... gracias.
-No me lo agradezcas. Es lo que voy a hacer con todos. Las clases se suspenderán hasta que capturen el asesino. Si los alumnos permanecen en sus casas, no puede sucederles nada.
-Perdón por la tardanza, pero las alumnas estaban en prueba- dijo agitado Elliot, al parecer se había apresurado mucho.
-¿Y Oliver?- le pregunté.
-Recuerda que tenía el día libre nos debe estar esperando con la patrulla- afirmó.
-Ahh..
La maestra pidió con una seña al auxiliar que abriera la puerta del colegio. Frente a esta se encontraba mi hermano Oliver dentro de la patrulla, esperándonos a Elliot y a mi.
me despedí de la maestra, pero esta me retuvo. En sus ojos por primera vez, vi su angustia.
-Emily ¿En que estas ayudando a la policía?- Preguntó.
-En solo detalles maestra- Le respondí.
-Has todo lo que puedas..- dijo angustiada.
Subí a la patrulla, al asiento trasero, saludando a mi hermano. Me daba gusto verlo.
-Vamos, pequeña, el capitán quiere conocerte..
-¿Y a donde si se puede saber?- pregunto Elliot siguiéndome el juego.
-Voy a tomar aire después de lo de anoche.. como hermano, de ti se espera cualquier cosa.
-Toma desayuno, y después hace lo que se te pegue la gana- Dijo empujándome a la mesa.
-Déjame maldito.. -dije poniéndole una mirada desafiante.
-Has lo que se te pegue la gana- dijo soltándome bruscamente.
-Te odio- dije golpeando fuertemente a la puerta.
Al salir de mi casa vi a Kate, estaba al frente te la estatua "Madre Tierra". No pude evitar ir a su encuentro.
-Hola. ¿No es muy temprano para que vengas a desahogarte?
Kate tenía rasgos de no haber pasado una buena noche.
-Le estoy pidiendo que cuide a Oliver.
No pude evitar sonreír, solo Kate podía tener una ocurrencia como esa.
-Kate.. es un monumento, tampoco es un santuario- exclamé.
-No importa, yo se que me escucha.
-Tuve un muy mal sueño Emily- dijo ella.
-¿De que trataba?- pregunté.
-Soñé que mataban a Oliver.
-Solo fue un sueño, Kate.
-A veces sueño cosas ciertas.
-Traté de evitar de que me viera riendo.
-Si, búrlate- se quejó- no quiero quedarme viuda antes de casarme.
-¡Emily Elizabeth! ven aquí ahora mismo- me grito mi hermano del segundo piso.
-¡Ah! es peor que una abuela..- dije poniendo los ojos en blanco- ¿Me acompañas? - me pregunté a Kate.
-Bueno- respondió ella.
-Estas acumulando puntos, has estado muy desobediente- me regaño mi hermano mientras me abría la puerta.
-Sí, como digas- le respondí.
-Hola Kate disculpa no te había visto. Perdón- le dijo a mi amiga con una sonrisa de oreja a oreja.
-Hola Elliot- dijo abrazándolo.
-Ni que fuera tan chica, para que no la hubieras visto- dije haciendo una mueca.
-¡Mira tu cállate!
-Dejen de pelear hermanitos- dijo Kate riendo.
-Que sentido del humor- le dije ante su regaño.
-Oliver baja llego tu amor- dije burlándome.
-Cállate- dijo Kate pegándome con el codo.
Oliver no tardo en decir.
-¿Annuk? ya bajo.- dijo alegremente.
Cuando había bajado, se tomó una gran sorpresa.
-¿Kate? ah no lo que faltaba para arruinar el día.
-Emmm.. ¿Hola?- dijo Kate un tanto enojada.
-Se me olvidaba tu me debes algo- reclamé a Oliver.
-Verdad..- dijo presionando lo ojos dándole un beso a Kate.
-Por fin salí de eta maldición- dijo Oliver suspirando
-¿Y eso?- dijo Kate, con casi los ojos formados en corazones.
-Era una apuesta, como crees, que me fijaría en una niña tan fea como tu- dijo mirándola de pies a cabeza.
-Así que me utilizas para tus apuestas ¿eh?- dijo enojada.
-Claro, de algo que seas útil.
-¡Eres un imbécil!- dijo golpearlo fuertemente.
-Ya por favor suéltame, si igual te quiero- dijo este afirmándola para que no lo golpeara más.
-Saben, me tengo que ir al colegio ¿me vas a dejar Elliot?- pregunte ignorando la situación.
-Esta bien, vamos.
-Yo tengo el día libre, me quedo en casa- dijo Oliver acomodándose en el sofá.
-Yo no iré a clases, con lo que esta pasando mi mama dijo que me quedara aquí o en casa, no quiere que valla al colegio.
-¿Salgamos al centro comercial?- le preguntó oliver.
-Bueno- dijo alegremente.
-Quien como ustedes..- dijimos al mismo tiempo con Elliot.
-¿Vamos? le dije a Elliot.
-Ya vamos, y no pelemos más- dijo abrazándome.
-Bueno- dije correspondiendo a su abrazo.
Al ingresar al colegio, me di cuenta que era el centro de miradas. Un par de compañeras de mi salón se acercaban y me bombardeaban con sus preguntas.
-Te vimos en las noticias Emily. ¿De verdad estas ayudando a la policía?
-¿Viste sangre?
-¿Verdad que a todos los niños los sacaron mientras dormían?
-¿Es cierto que es obra de un loco satánico?
No respondí nada,. solo las ignore y me fui donde Kris.
Naturalmente, en la sala, mis compañeras continuaron con sus inquietudes, pero Kris se encargo de desanimarlas a todas diciendo que los detalles eran horribles y por eso prefería no hablar. Cuando sonó el timbre, todas fueron a los lugares, aunque de muy mala gana.
Por la puerta entró la directora Victoria, en vez de la profesora de matemática, que esa era la asignatura que teníamos inicialmente.
Me percaté que no me quitaba los ojos de encima. No obstante, cuando volvió a reinar el silencio, miró a todos por igual.
-Se imaginaran por que estoy aquí- inició-. Miren a su alrededor. ¿Que notan?
Los alumnos del 1°A miraron en torno pero al parecer, no detectaron nada. La maestra ya sabía a quien preguntarle.
-Emily Claussen. ¿Que notas?
Me puse de pie.
-Faltan Javiera Martines, Romina Medina, Catalina Simi, Kate Kroos, Laura Esquivel, Maria Angelica Fernandez y Fernanda Navarro..
-Correcto. Y en esta sala en el que hubo menos jóvenes ausentes, supongo por razones obvias. Muchos de ustedes querían ver a Emily y hablar con ella. ¿Cuantos de ustedes se enfrentaron a sus padres para poder venir?. Levanten la mano.
Se levantaron once brazos, entre ellos el de Kris.
-Hay salas en las que no se junta ni la mitad de la asistencia. Es posible que estemos viviendo en una ola de pánico. Exactamente lo que la policía quería evitar.
Una niña levantó la mano.
-Pero dice mi papá que es mejor que lo sepamos-Opinó.- Porque así podemos estar alerta.
-Y tu papá tiene razón- concedió la directora- por eso creo que hay que tomar una resolución.
-Emily, acompáñame y trae tus cosas.
-¿Conoces de cerca lo que esta pasando?- me pregunto la maestra en el pasillo.- Dime con toda honestidad.. ¿Que tan probable es que hayan victimas?
No lo dude, que fácil pregunta.
-Muy probable.
La profesora suspiró; Tendría que tomar cartas en el asunto.
Atravesamos el patio. Y noté que la profesora me conducía hacia la puerta de la entrada del colegio.
-Llamaron de la delegación de policías. Me pidieron que te permitiera salir temprano.- dijo la directora juntando los manos.
-Eh... gracias.
-No me lo agradezcas. Es lo que voy a hacer con todos. Las clases se suspenderán hasta que capturen el asesino. Si los alumnos permanecen en sus casas, no puede sucederles nada.
-Perdón por la tardanza, pero las alumnas estaban en prueba- dijo agitado Elliot, al parecer se había apresurado mucho.
-¿Y Oliver?- le pregunté.
-Recuerda que tenía el día libre nos debe estar esperando con la patrulla- afirmó.
-Ahh..
La maestra pidió con una seña al auxiliar que abriera la puerta del colegio. Frente a esta se encontraba mi hermano Oliver dentro de la patrulla, esperándonos a Elliot y a mi.
me despedí de la maestra, pero esta me retuvo. En sus ojos por primera vez, vi su angustia.
-Emily ¿En que estas ayudando a la policía?- Preguntó.
-En solo detalles maestra- Le respondí.
-Has todo lo que puedas..- dijo angustiada.
Subí a la patrulla, al asiento trasero, saludando a mi hermano. Me daba gusto verlo.
-Vamos, pequeña, el capitán quiere conocerte..
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